El regreso a actividades en los destinos turísticos han sido un respiro para miles de mexicanos ávidos de salir a disfrutar de las riquezas naturales, culturales y gastronómicas que ofrece el país.
Sin embargo, la industria del turismo en México sigue padeciendo los estragos de la pandemia de COVID-19, pues a pesar de asegurar reservaciones limitadas y estrictas medidas de higiene, como lo indica la Secretaría de Salud (Ssa), todavía existe en la población la desconfianza de viajar a regiones lejanas.
Así lo reveló un reciente estudio presentado por Airbnb, la plataforma mundial de alojamientos a particulares y turísticos, cuya empresa fue una de las más afectadas por la contingencia.
Cabe mencionar que dicho análisis se realizó con base en más de 11 millones de búsquedas hechas por mexicanos en su plataforma durante el pasado mes de junio, los cuales revelan información sobre tendencias e intereses en materia de viajes en el corto plazo.
De acuerdo con los datos, el 84% de los mexicanos prefieren viajar a lugares cercanos (menos de 500 kilómetros de distancia) y accesibles en coche, lo que representa un alza de 24 puntos porcentuales, en comparación con las búsquedas para destinos domésticos de 2019.
Otro dato a destacar es que, el 83.3% buscaron hacer un viaje entre agosto y septiembre.
Tal es el caso de los capitalinos, pues destinos como Cuernavaca (Morelos), Acapulco (Guerrero) y Valle de Bravo (Estado de México) duplicaron sus reservaciones respecto al año pasado en los próximos meses.
Además de destinos domésticos, los usuarios están buscando viajar en familia o con amigos, ya que cerca del 50% de las búsquedas son para grupos de cinco personas en adelante. En los demográficos de familia el número de búsquedas con un niño como huésped se duplicó, en comparación al año anterior.
“A medida que se levantan las recomendaciones de confinamiento, el distanciamiento social sigue prevaleciendo, Airbnb te permite tener lo mejor de ambos mundos: poder satisfacer ese deseo de aventurarse fuera de la ciudad y mantener el distanciamiento social que requiere esta pandemia para viajar de manera segura al estar en tu propia casa sin tener que convivir con grupos de desconocidos”, mencionó al portal Expansión Ángel Terral, director de Airbnb para México, Centroamérica y el Caribe.
En este sentido, sólo el 16% de esas búsquedas fueron para viajes internacionales que están siendo postergados hasta después del verano.
En cuanto a nivel global, tan solo el pasado 8 de julio, los huéspedes reservaron más de un millón de noches para estancias futuras en Airbnb en todo el mundo. Es el primer día en más de cuatro meses, desde el 3 de marzo, que se alcanza dicho umbral de noches.
Las noches reservadas, también apuntaron hacia viajes domésticos, el corazón de la estrategia de reactivación de la empresa para el resto de 2020, de acuerdo con sus fundadores.
Incluso, Airbnb estima que tendrá menos de la mitad de ingresos que en 2019, según el mensaje que envió en marzo pasado el director ejecutivo, Brian Chesky, a sus empleados anunciando un 25% de recortes a la nomina.
La crisis sanitaria y económica que ha desencadenado COVID-19 podría causar la pérdida de cinco millones de empleos en el sector turismo, de acuerdo con el Consejo Mundial de Viajes y Turismo, por ello es que muchas empresas enfocadas en este rubro están buscando alternativas turísticas para que se reactive la derrama económica que genera este sector.
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