Del Culiacanazo al COVID-19: radiografía del desempeño de López Obrador a dos años de su arrasador triunfo

Cuatro expertos en política y seguridad, consultados por Infobae México, analizan las decisiones tomadas por el presidente

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(Foto: REUTERS/Henry Romero)
(Foto: REUTERS/Henry Romero)

Este miércoles entra en vigor el nuevo Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, también conocido como T-MEC, con el cual ha quedado atrás el antiguo TLCAN de 1994 (Tratado de Libre Comercio de América del Norte), y que supone una importante modernización en la relación comercial entre dichos países.

Desde que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) aprobó el cambio en dicho acuerdo comercial, en junio de 2019, muchos lo han visto como algo contradictorio a su retórica. Pero no ha sido el único evento en su gobierno que le ha acarreado fuertes críticas, e incluso, la pérdida de aceptación que se ve reflejada en las encuestas.

A dos años de haber ganado la presidencia de México, la gestión de López Obrador se ha visto marcada por sucesos como la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México; la radical estrategia contra el ‘huachicol’, opacada por la explosión en un ducto que dejó más de 120 muertos en Hidalgo; el ‘Culiacanazo’; el asilo político a Evo Morales; la militarización de las calles; o el manejo de la pandemia del COVID-19.

Cuatro especialistas en seguridad, política pública y exterior, consultados por Infobae México, analizaron el trasfondo de los hechos que mayor trascendencia han tenido.

(Imagen: Jovani Pérez/INFOBAE)
(Imagen: Jovani Pérez/INFOBAE)

“Una estrategia ineficaz y errática”

Para Guillermo Valdés, exdirector del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), el balance de seguridad del actual sexenio es simplemente terrible “porque las cifras hablan de una violencia estabilizada en niveles muy elevados”.

Los datos dan respaldo de eso. En 2019 se alcanzó la cifra anual de homicidios dolosos más alta de la que se ha tenido registro en los últimos 20 años: 34,582, un promedio de 95 diarios. Y esa última estadística se rebasó el día más violento de 2020, el 7 de junio, con 117 asesinatos.

El experto en seguridad atañe esta crisis a que el gobierno actual no dimensiona adecuadamente el fenómeno de la inseguridad y violencia en el país. Tampoco se cuenta, agregó, con un diagnóstico serio, integral, regionalizado por tipos de delito, organizaciones criminales o mercados ilegales, que permita definir estrategias diferenciadas.

Para Valdés hay un episodio que “es un reflejo de una estrategia ineficaz y errática: el ‘Culiacanazo’, los hechos del 17 de octubre de 2019 ocurridos en Culiacán, Sinaloa, cuando fue capturado, y posteriormente liberado, Ovidio Guzmán, hijo de ‘El Chapo’ Guzmán. El operativo fallido desató varios actos de violencia en la zona, que dejaron ocho muertos.

'Culiacanazo' (Foto: REUTERS/Jesús Bustamante)
'Culiacanazo' (Foto: REUTERS/Jesús Bustamante)

“Con la consigna del presidente de ‘abrazos, no balazos’, la señal que le ha mandado a las fuerzas del Estado es que no usen la violencia, que no disparen, y eso no opera bien frente a un enemigo que no tiene ningún prurito ético en utilizar la violencia de la forma más cruel y despiadada”.

Esta deficiencia en seguridad se ejemplifica también con la masacre de la familia Lebarón –ocurrida en noviembre de 2019 al norte del país, entre Chihuahua y Sonora– que dejó nueve muertos. O con la situación de Guanajuato, donde a raíz de la estrategia contra el robo de combustible, el ‘huachicol’, implementada por AMLO en enero de 2019, aún se disputa una lucha contra el crimen en la entidad. Específicamente, contra el Cártel Santa Rosa de Lima.

“No se han dado cuenta (el gobierno actual) que una parte fundamental de la inseguridad se debe a las debilidades de toda la cadena institucional del Estado, es decir, las policías, los ministerios públicos, el poder judicial y el sistema carcelario”, dijo el experto.

Precisamente, al ver rebasado el alcance de la Guardia Nacional, el presidente López Obrador decretó el pasado 11 de mayo la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles hasta 2024. Una de las decisiones que más cara, en términos de aprobación, le ha salido.

“El Ejército es necesario porque no tenemos a los policías, pero es muy malo que se institucionalice la presencia del Ejército. Es la solución menos mala, pero no es la óptima”, advirtió el exdirector del CISEN.

Contradicción en el discurso

La politóloga María Marván Laborde ve en esa decisión otro punto a considerar: la contradicción de López Obrador respecto a la militarización de las calles, puesto que “todos sus discursos antes del día de la elección eran una crítica muy severa sobre la militarización de la seguridad pública del país y ahora tenemos una Guardia Nacional mucho más militarizada de lo que jamás se atrevieron ni Peña Nieto ni Calderón”.

(Foto: REUTERS/Stringer)
(Foto: REUTERS/Stringer)

Marván, también ex consejera presidenta del antiguo Instituto Federal Electoral (IFE), subrayó que AMLO se ha apartado de cosas que él criticaba mucho, para las que ofreció soluciones distintas, y “a la hora de la hora en realidad ha traicionado sus propias palabras y su propio proyecto”.

Más contradicciones en los dichos del presidente López Obrador los apunta Adolfo Laborde, experto en política exterior, en el tema de las caravanas migrantes que empezaron a llegar a México desde octubre de 2018, así como en el asilo político concedido al expresidente de Bolivia, Evo Morales, en noviembre de 2019.

“Con esto de la caravana cambió muchísimo la lógica del control migratorio”, indicó Laborde en referencia al cambio de postura que fue, de dar la bienvenida y abrir las puertas a los migrantes, a reforzar la frontera norte con la Guardia Nacional. Esto a petición de Estados Unidos y para evitar un castigo arancelario con el que amenazaba Donald Trump a México.

Mientras que en el caso de Evo Morales, el experto indicó que, aunque se trató de “un tema más de la integración espiritual que hay con América Latina”, fue una decisión que provocó mucha molestia y un evidente reclamo porque “puso en entredicho el principio de no intervención”, una de sus afirmaciones insignia.

Evo Morales en su arribo a México (FOTO: GRACIELA LÓPEZ /CUARTOSCURO)
Evo Morales en su arribo a México (FOTO: GRACIELA LÓPEZ /CUARTOSCURO)

Adolfo Laborde también resaltó una contrariedad en el asunto del T-MEC señalando que, aunque sí se necesitaba la actualización del acuerdo –México depende vitalmente del comercio e inversiones en América del Norte–, ese tipo de tratados forman parte del espectro neoliberal.

“Resulta contradictorio el discurso del señor López Obrador de hablar del fin del neoliberalismo y apostar al T-MEC, que es un instrumento del neoliberalismo (...) Para dar fin al neoliberalismo tendría que acabar con todos los tratados de libre comercio que tenemos en todo el mundo”, explicó.

En mismo sentido se expresó el politólogo José Fernández Santillán. “Él (AMLO) dijo que no iba a permitir más el neoliberalismo, pero lo está aplicando de una manera incluso más ortodoxa que los propios neoliberales”.

Y para ilustrar lo anterior mencionó los recortes al presupuesto para las estancias infantiles y los refugios para mujeres maltratadas.

Foto: (Facebook)
Foto: (Facebook)

Ambos ejemplos también los utilizó María Marván para señalar la manera en la que el presidente ignora –deliberadamente– la situación de las mujeres en México, al establecer dichos recortes así como la falta de respuesta en el tema de violencia y los feminicidios.

“Se ha distinguido (AMLO) por una serie de lenguaje y políticas públicas profundamente misóginas, con una concepción de mujer que creo que no era admisible ni siquiera en el siglo XIX. ‘La mujer es la responsable de la delincuencia, como mamá’; ‘la mujer es la que debe cuidar a sus padres si es que enferman de Covid’; ‘las abuelas tienen que cuidar a los nietos para que las mujeres puedan trabajar porque ya no hay guarderías infantiles’ (...) discurso de profundo conservadurismo. Absolutamente en contra de la igualdad sustantiva entre los hombres y las mujeres, en todos los planos”, lamentó.

El precio

A dos años de la victoria de López Obrador, “han habido muchos más errores que aciertos. Lo que hemos visto es una desilusión que se manifiesta incluso en las encuestas”, aseguró José Fernández.

Precisamente, la popularidad de Andrés Manuel empezó bastante alta hace año y medio que asumió la presidencia: 82% de aprobación. Pero esa cifra ha ido cambiando significativamente tras cada decisión que ha ido tomando.

Porcentaje de aprobación de AMLO (Imagen: Jovani Pérez/INFOBAE)
Porcentaje de aprobación de AMLO (Imagen: Jovani Pérez/INFOBAE)

Precisamente, uno de los capítulos que más aprobación por parte de los ciudadanos le ha costado a López Obrador es el manejo de la pandemia del COVID-19. Desde su inicial escepticismo; pasando por su descuido al no usar cubrebocas o no hacer cuarentena; hasta el descuido a los sectores salud y empresarial, entre otras cosas.

Los especialistas coinciden en que sobretodo fue la poca seriedad con la que se tomó la crisis por el nuevo coronavirus.

“Se sabía que era una pandemia que ya estaba en México, que no debía acercarse a las personas para guardar la sana distancia (...) y él seguía dando abrazos y besos”, recordó Fernández Santillán.

(Foto: Cortesía Presidencia)
(Foto: Cortesía Presidencia)

El analista también se refirió a las decisiones de López Obrador de echar atrás la reforma educativa y cancelar la construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México –ambos proyectos de la pasada administración– como retrocesos bastante graves a causa de “caprichos políticos” del presidente.

“La gente sí está muy molesta por los malos resultados de su administración (...) porque no acaba de comprender que ya llegó el tiempo de gobernar y no de seguir en campaña, concluyó José Fernández Santillán.

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