El fundador del Cártel del Milenio, Armando Valencia Cornelio, “El Maradona”, fue liberado tras 17 años encerrado en cárceles de México y Estados Unidos. El pasado 21 de abril, el capo dejó el Centro Médico Federal de Lexington, Kentucky, luego de que le fue reducida su condena, en un 15%, por haber tenido buen comportamiento.
Según reporta el Reforma, el año pasado la Corte Federal del Distrito Sur de Florida, en Miami, rechazó reducir su sentencia de 19 años con 7 meses de cárcel y concederle la libertad anticipada. Sin embargo, el narcotraficante alegó razones humanitarias por padecer cáncer linfático.
El también empresario aguacatero originario de Michoacán señaló en ese momento a la Corte que si conseguía obtener el recurso que solicitaba, se iría a vivir a su domicilio de Marsh Road, en Atherton, California, nada menos que el poblado más rico de todo Estados Unidos.
A diferencia de otros traficantes de droga, “El Maradona” nunca accedió a convertirse en testigo colaborador de la DEA, ni brindar nada de información sobre sus socios, colaboradores o negocios.
El Cártel del Milenio o Cártel de los Valencia es una organización criminal, que nació en el estado sureño de Michoacán, dedicada al tráfico ilegal de drogas y al envío de cocaína de México y Estados Unidos.
A inicios de la década de los 90, Armando Valencia Cornelio tomó el liderazgo del cártel y extendió el territorio de ese grupo a los estados de Jalisco, Colima, Nayarit y Tamaulipas. En esos años se les conocía como Los Reyes del Aguacate, debido a que disfrazaban sus actividades delictivas con la producción y comercialización de aguacate.
Precisamente, “El Maradona” se convirtió en esos años en un próspero ganadero y exportador de aguacate, negocios que las autoridades consideraron se financiaban con las ganancias de exportaciones de cocaína a Estados Unidos, por lo que en 1999 la Corte Federal del Distrito Sur de Florida ordenó su aprehensión por surtir de cargamentos de mariguana, cocaína y heroína a estados como California, Chicago y Nueva York.
Desde ese momento, se le empezó a vincular a con traficantes como Ignacio “Nacho” Coronel y Arturo Beltrán Leyva “El Barbas”.
Armando Valencia fue detenido por el Ejército el 14 de agosto de 2003, en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco. En ese momento las autoridades federales lo consideraron un “fuerte golpe al narcotráfico”, e incluso compararon la importancia del Cártel del Milenio con las agrupaciones de los hermanos Arellano Félix o la de Ismael El Mayo Zambada. De igual manera, detallaron que la organización de los Valencia pertenecía en un principio pertenecía al Cártel de Juárez y que peleaba contra el Cártel del Golfo para obtener el control de la plaza de Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Además, el gobierno mexicano señalaba también a dicha agrupación delictiva como responsable de matar a varios servidores públicos y amenazar de muerte a otros más que estaban involucrados en las investigaciones para capturar a sus integrantes. También acusaban al cártel de operar en conjunto con el Cártel de Medellín, del colombiano Pablo Escobar.
“El Maradona” estuvo preso en el Penal Federal del Altiplano hasta el año 2012, cuando fue extraditado a Estados Unidos. El 11 de enero de 2013 se declaró culpable de tráfico de cocaína, ante la Corte de Florida.
Cabe señalar que la primera vez que se registró la actividad de Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”, este pertenecía al Cártel del Milenio. En el año 2007 la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés) documentó que “El Mencho” junto con su cuñado, Abigael González Valencia, intentaban introducir cocaína colombiana desde México a Estados Unidos.
Posteriormente, en 2010, “El Mencho” y los hermanos González Valencia junto con otros sicarios se separaron de la organización para formar el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) cuyo primer objetivo era disputar las importantes plazas de Michoacán y Jalisco.
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