Como parte del Programa Nacional de Becas 2020, el estado ha lanzado una serie de apoyos económicos para impulsar la educación entre diversos sectores de la sociedad y a distintos individuos que por diversas razones se ven obligados al abandono de sus estudios.
Uno de esos apoyos es la llamada Beca de Apoyo a la Educación Básica de Madres Jóvenes y Jóvenes Embarazadas (antes conocida como Promajoven) a cargo de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
El objetivo, de acuerdo con la dirección, es asegurar una mayor cobertura, inclusión y equidad educativa entre todos los grupos de la población para la construcción de una sociedad más justa, mediante el otorgamiento de becas a niñas y jóvenes en contexto de vulnerabilidad, agravada por el embarazo o la maternidad temprana para el acceso, permanencia y conclusión de la educación básica.
En este contexto, los apoyos están dirigidos para adolescentes de cualquier estado civil que sean madres o que estén atravesando por un embarazo; cuya edad, al momento de hacer el registro oficial, oscile entre 12 y 18 años 11 meses de edad.
Su meta principal debe ser el deseo de iniciar, reincorporarse, permanecer o concluir la educación básica, primaria y secundaria, así como la alfabetización. El formato que estudien podrá ser tanto en el sistema escolarizado, no escolarizado o mixto.
El apoyo económico es de 850.00 pesos mensuales por un máximo de 10 meses en el año; de acuerdo con el tiempo que le falte a la alumna para concluir sus estudios de educación básica o con la fecha de ingreso a la beca.
Entre los requisitos destaca el rango de edad, pero en casos de excepción, adolescentes menores de 12 años de edad embarazadas o madres podrán obtener acceso al apoyo económico si cumplen con los demás requisitos establecidos en las reglas de operación.
También es necesario que no se perciba ningún otro apoyo económico gubernamental o beca que persiga los mismos propósitos, con excepción de las madres que sean beneficiarias del Programa PROSPERA de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
Por último, quienes busquen la beca deberán estar inscritas en algún plantel público de educación básica del sistema escolarizado, no escolarizado u otro sistema de educación.
La convocatoria y recepción de solicitudes estará disponible durante todo el año a través del correo electrónico becaspromajoven@edugem.gob.mx o en los teléfonos de atención (722) 2-13-90-63, (722) 2-14-55-88, (722) 2-14-66-81, (722) 2-83-13-26,(722) 2-13-88-94, (722) 2-14-36-10 y (722) 2-13-91-76. El horario de atención es de lunes a viernes de 09:00 a 18:00 horas.
En 2019, México ocupó el primer lugar del embarazo en adolescentes entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con una tasa de fecundidad de 77 nacimientos por cada mil adolescentes de 15 a 19 años de edad.
El Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) reveló, además, que en México el 23% de las y los adolescentes inician su vida sexual entre los 12 y los 19 años; de estos, 15% de los hombres y 33% de las mujeres no utilizaron ningún método anticonceptivo en su primera relación sexual. De acuerdo con estos datos, aproximadamente ocurren al año 340 mil nacimientos en mujeres menores de 19 años.
En el ámbito nacional, esta problemática afecta directamente la permanencia en la escuela, los ingresos presentes y futuros, el acceso a oportunidades recreativas, sociales y laborales especializadas y de calidad y el desarrollo humano, así como el riesgo permanente de adquirir una infección de transmisión sexual.
Actualmente, el Gobierno de la República desarrolla la llamada Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA), producto del trabajo conjunto de 16 dependencias del Gobierno Federal y de la participación de organizaciones de la sociedad civil, de organismos internacionales y de personas expertas del ámbito académico, en esta temática.
El objetivo general de la ENAPEA es reducir el número de embarazos en adolescentes en México con absoluto respeto a los derechos humanos, particularmente los derechos sexuales y reproductivos. Para lograr su meta, la Estrategia se plantea disminuir a cero los nacimientos en niñas de 10 a 14 años y reducir en un 50% la tasa especifica de fecundidad de las adolescentes de 15 a 19 años para el año 2030.
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