Yeidckol Polevnsky, ex presidenta nacional de Morena, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador, recibió en uno de los momentos más difíciles de su carrera el elogio de uno de los hombres más influyentes no sólo en el partido, sino en la política nacional: el coordinador de senadores morenistas, Ricardo Monreal.
El también presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara Alta mostró su respeto por Polevnsky durante una conferencia de prensa virtual este lunes. “Deseo que todo salga bien y que se aclare todo”, dijo.
Monreal se refirió a las acusaciones contra la ex presidenta de Morena de haber ordenado transacciones millonarias para cubrir gastos de remodelaciones y mantenimiento en distintos inmuebles, los cuales nunca se llevaron a cabo.
Esto provocó que su sucesor a cargo de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, iniciara un proceso de auditoría para revisar la erogación de varios cientos millones de pesos realizada en la dirigencia anterior. En otras palabras, Ramírez Cuéllar solicitó revisar la administración de Polevnsky.
Lo anterior, de acuerdo con los expertos, podría encausar una acusación penal contra Polevnsky, en caso de que se demuestren las irregularidades durante su mandato frente al partido que hoy ostenta la presidencia y la mayoría en el Congreso mexicano.
Estas acusaciones ya generaron que el opositor PRD (Partido de la Revolución Democrática) presentara una queja ante el Instituto Nacional Electoral (INE), en materia de financiamiento de los partidos políticos, en contra de Morena por hacer mal uso de los recursos públicos, señalando lo supuestamente hecho por Polevnsky.
“Creo en su honestidad”, remarcó Monreal este lunes. “La conozco y es una mujer íntegra, por eso hago votos porque rápido se aclare todo”, añadió. Además, el senador indicó que no espera que López Obrador vaya a inmiscuirse en temas partidarios, como ha evitado desde su triunfo electoral en 2018.
“No lo sé, pero el Presidente no se mete en asuntos del partido y serán los dirigentes del partido los que decidan. Creo que es conveniente que el partido pueda asumir con responsabilidad los desafíos a los que se está enfrentando", finalizó Monreal.
Y es que Morena no tiene descanso. Primero, su proceso electoral se ha visto envuelto en una serie de polémica precisamente para definir al sucesor de Polevnsky. La llegada de Ramírez Cuéllar es provisional y deberá darle paso a un proceso para que el partido elija a su nuevo líder cuando las condiciones sanitarias del país lo permitan.
Esto después de que Bertha Luján convocara al VI Congreso Nacional Extraordinario del partido, donde se acordó establecer una presidencia transitoria de cuatro meses para el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido, que a su vez llame a un proceso interno para renovar la dirigencia, por lo que Polevnsky fue relevada como dirigente del partido.
La controversia jurídica inició cuando Yeidckol Polevnsky no reconoció el congreso morenista ni todo lo acordado durante la sesión del mismo, entonces se recurrió a la máxima autoridad en estos casos, el Tribunal Electoral, que determinó que la también empresaria tendría que dejar el cargo que venía ejerciendo.
Entre los candidatos a suceder a Ramírez Cuéllar se encuentran la misma Luján, Polevnsky, el líder de los diputados morenistas, Mario Delgado y también el senador suplente de Monreal, Alejandro Rojas Díaz Durán, uno de los más críticos al interior del partido.
Sin embargo, el proceso ha tardado tanto y las polémicas han sido tan diversas, que el partido todavía no ha podido ni siquiera definir el método para elegir a su próximo líder: una parte de los aspirantes propone realizar encuestas para determinar al ganador, lo cual está considerado en los estatutos. Otros, por su parte, proponen que sean los miembros del partido quienes voten, pero tampoco se ha podido definir el padrón electoral de Morena con claridad.
MÁS SOBRE ESTE TEMA