Juan Antonio Valenzuela Ortiz llevaba apenas 16 días en la Ciudad de México cuando fue asesinado a tiros dentro del hotel Presidente Intercontinental Santa Fe (Ciudad de México).
El joven había arribado a la capital mexicana proveniente de Sinaloa, el pasado 31 de mayo. Según los informes de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, se registró con el nombre falso de Raymundo Moreno, se hospedaba en el piso 13 en la habitación 3304, y su reservación vencía el lunes.
Ese día, a las 21:00 horas una camarera escucho gritos en el pasillo, y a una persona tratando de entrar a una de las habitaciones. Luego vinieron voces pidiendo ayuda y tres detonaciones.
Cuando la empleada se acercó, encontró al joven sin vida y tirado en el suelo boca arriba.
El reporte médico detalló que Valenzuela Ortiz presentaba al menos dos impactos de bala, uno de ellos en el tórax del lado derecho y el segundo en el hombre derecho a la altura de la clavícula.
El personal del hotel dio aviso a las autoridades, quienes registraron la habitación del occiso y encontraron cinco celulares y un pasaporte con su verdadera identidad.
La Fiscalía indaga el móvil del crimen de Valenzuela Ortiz, que podría estar relacionado con el Cártel de Sinaloa. Se presume que la víctima era sobrino del finado narcotraficante, Luis Gabriel Valenzuela Valenzuela, conocido como Grimaldi Paredes, operador logístico y financiero de una red de lavado de dinero de Ismael “El Mayo” Zamabada.
Grimaldi Paredes fue capturado en febrero de 2018 por elementos del Ejército Mexicano en un fraccionamiento de Culiacán, Sinaloa, acusado de encabezar la emboscada contra un covoy militar en 2016.
Meses después de su captura, Valenzuela Valenzuela se fugó de prisión, pero fue asesinado días más tarde.
Se presume que su sobrino habría arribado recientemente a la Ciudad de México, para realizar algún negocio relacionado con actividades de narcotráfico.
El Cártel de Sinaloa opera en al menos 17 estados de la República, entre ellos la Ciudad de México. En la urbe se han realizado importantes operativos contra la organización criminal. En mayo de 2017, Dámaso López Núñez, uno de los cabecillas del Cártel de Sinaloa, inmerso en una guerra intestina por el poder, fue detenido en la Ciudad de México.
El operativo, en el que participó el Ejército y la Fiscalía, localizó a López Nuñez junto a su mujer en la colonia Azures, una de las zonas residenciales más exclusivas de la capital mexicana.
“El Lic”, antiguo policía estatal y titulado en Derecho, fue la mano que abrió la puerta de la cárcel a “El Chapo” Guzmán en su primera fuga de 2001.
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