Hace un par de semanas se reportó la muerte de Enrique Alejandro Pizano Jiménez, alias “El Anestesia” o “Sacristán”, identificado como el secretario particular de Nemesio Rubén Oseguera Cervantes, “El Mencho”.
La muerte del sicario del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se registró en medio del hermetismo de las autoridades del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 2 de Puente Grande, la cárcel donde se encontraba desde su captura en 2015.
La Secretaría de Salud informó que “El Anestesia”, de 47 años, fue ingresado al Hospital General de Occidente y que tenía antecedentes de obesidad, hipertensión, tabaquismo y asma. Aparentemente murió por COVID-19. De acuerdo con medios de comunicación locales como Milenio Jalisco, en esa misma cárcel habría más reos infectados y tres muertos, entre ellos dos narcotraficantes.
El anestesia fue capturado en 2015, se le ubicaba en el círculo de seguridad más cercano del Mencho y de ser responsable de localizar inmuebles para ser utilizarlos como casas de seguridad y para almacenar precursores químicos. También se le identificó, junto con Heleno Madrigal Virrueta, alias “El 20”, como parte importante en los disturbios del 1 de mayo de 2015 cuando integrantes del CJNG derribaron un helicóptero Cougar 1009 de la Fuerza Aérea que dejó un saldo de ocho soldados y una policía federal muertos.
Sin embargo, la extraña muerte por posible COVID-19 de Enrique Alejandro Pizano no es la primera que ocurre en el centro penitenciario ubicado en El Salto, Jalisco.
Antes de la muerte de “El Anestesia” ocurrieron otros casos en situaciones que no han logrado ser esclarecidas. Como lo reveló La Unión Jalisco, el 20 de agosto de 2019 fue asesinado Heleno Madrigal Virrueta, alias el 20, identificado como cabecilla del CJNG. Sus compañeros de celda lo encontraron suspendido y atado del cuello en una de las vigas del dormitorio. La Fiscalía General de Jalisco lo consideró un suicidio.
“El 20” fue detenido en marzo pasado por más de 80 elementos de la Policía Federal y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en un operativo en Tequisquiapan, en Querétaro, junto a cuatro supuestos cómplices. Los delitos de los que se le acusaba fueron portación de armas exclusivas del ejército, delitos contra la salud y delincuencia organizada.
En julio de 2018 ocurrió la muerte de Adrián Gómez Meza, contador del Cártel Jalisco (CJNG), sin embargo, las autoridades también aseguraron que se trató de un suicidio.
De acuerdo con una investigación de Reporte Índigo, Adrián Gómez Meza fue promovido por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) como candidato suplente a la candidatura municipal de Puerto Vallarta en el 2003. Así lo reveló un informe del mismo partido político. Fue registrado por el Comité Directivo Estatal del PRI como el suplente del candidato propietario a la presidencia municipal del puerto, Gustavo González Villaseñor. La dupla ganó los comicios de uno de los municipios más importantes en el estado.
En la administración municipal 2004-2006 de Puerto Vallarta, Gómez Meza encabezó la Oficialía Mayor Administrativa- una de las funciones más importantes del Ayuntamiento- en donde despachó del 1 de enero de 2004 al 31 de diciembre del 2006, según lo confirmó el municipio vía transparencia (expediente 486/2018). Posteriormente, regresó en el trienio 2010-2012 encabezado por el entonces presidente municipal priista, Salvador González Reséndiz. En ese periodo, Gómez Meza se desempeñó como titular de la Subdirección Administrativa de Seguridad Pública y Academia de Puerto Vallarta.
En abril de 2018, Gómez Meza fue aprehendido. Su captura, efectuada por la entonces Procuraduría General de la República (PGR) hoy Fiscalía General, sacudió al ámbito político-empresarial de ese destino turístico, pues eran conocidos sus vínculos con el poder público y con el sector transportista, en el cual participaba como un empresario más del ramo.
Se esperaba su declaración sobre los vínculos de 11 empresas con el CJNG. Sin embargo, su cuerpo fue encontrado colgado con una soga en la parte alta del gimnasio de Puente Grande.
Otro deceso ocurrió en mayo de 2018, cuando localizaron sin vida a Gerardo Mendoza Chávez, a quien se le atribuye el asesinato del exgobernador de Colima, Silverio Cavazos Ceballos. Además de traficar con metanfetamina, cocaína y marihuana. Fue detenido el 9 de mayo de 2018 y solo tres días después fue ejecutado. Según fuentes extraoficiales, Gerardo Mendoza fue asesinado cerca de las 22:00 horas, por un preso que lo golpeó en la cabeza con un tronco de madera.
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