A diferencia de un próximo regreso del fútbol mexicano con partidos a puerta cerrada para finalizar la temporada, y al mismo tiempo, evitar un rebrote de contagios de coronavirus (COVID-19), la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) no está en posibilidades de jugar sin aficionados en sus tribunas.
Así lo reconoció a finales abril para el diario Milenio Horacio de la Vega, presidente de la LMB, quien explicó que los equipos dependen económicamente de su la afluencia y consumo en sus estadios; y no de los derechos de transmisión como sí ocurre en la Liga MX.
No estamos en posibilidad realista de tener una temporada a puerta cerrada. El 60-70% del ingreso de los equipos proviene de la venta de boletos, de la asistencia de la gente, del consumo interno de alimentos, bebidas, en tiendas y demás (...) Eso nos pone en una situación complicada, de visualizar un escenario con una temporada a puerta cerrada porque los flujos económicos de la Liga no nos darían hoy por hoy
Incluso, ante el planteamiento de que la campaña se realice a puerta “semiabierta”, controlando el acceso de los fans y respetando el protocolo de sana distancia, sería insuficiente para mitigar la falta de liquidez en cada plantel, de acuerdo con lo dicho este viernes por Alejandro Uribe, presidente de Toros de Tijuana, en entrevista para El Universal.
Si jugamos con 500 o 600 fans sería casi el mismo resultado económico que si lo hiciéramos sin público. Es una realidad que todos los equipos dependemos de los ingresos que se generen en los estadios
Aunque no es un tema cerrado, trabajan con instancias privadas y públicas para realizar la temporada 2020. Mientras tanto, al no poder brindar sus servicios por las medidas precautorias, los beisbolistas se quedan sin el ingreso al que están habituados por alrededor de cuatro meses de rol regular.
Y es que según De la Vega, la situación con los patrocinios para que apoyen a solventar la operatividad de los clubes ha sido muy complicada. De los más de cinco grandes patrocinadores, dos de ellos (sin especificar nombres) han pedido no participar en esta campaña.
No obstante, los equipos de la LMB se comprometieron a apoyar a sus peloteros económicamente mientras la temporada se encuentra suspendida, pero la ayuda no alcanza para cubrir las necesidades de los jugadores, confesó a principios de mayo a El Economista Iván Terrazas, jugador de los Diablos Rojos del México.
No es el sueldo que nosotros manejamos comúnmente, pero es un apoyo que nos está dando Diablos. Nos ha golpeado bastante, tenemos compromisos como pagar colegiaturas, un carro, alguna hipoteca. Tenemos que echar mano de los ahorros, es bastante complicado
Cabe mencionar que la mayoría de los beisbolistas son conscientes de que el apoyo por parte de los directivos no puede ser mayor porque los clubes también se quedan sin los ingresos que permiten gestionar los equipos.
A pesar de este panorama, los 16 equipos mantienen sus intenciones de jugar. Entre las proyecciones de la LMB son realizar un calendario recortado, que podría ser de 51 juegos por equipo (la mitad de lo planeado) o menos si empiezan en julio o agosto, pero todo dependerá de las decisiones de las autoridades sanitarias del país y cómo se desarrolle la propagación del COVID-19 las próximas semanas.
"Ya nos comunicó la autoridad sanitaria a nivel federal que en dado caso que se permita tener eventos masivos, no será simplemente a puertas abiertas, sino que habrá muchos protocolos de salud que se tendrán que implementar”, sostuvo De la Vega.
En resumen, todavía no hay certeza del inicio de la campaña (que originalmente comenzaría el pasado 6 de abril),ni del número de juegos a disputar por equipo. Eso sí, la fecha de inicio para la temporada 2020-21 sigue siendo la del 12 de octubre.
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