El director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, informó que el Centro Vacacional Oaxtepec, Morelos, fue transformado para recibir 450 enfermos no graves de COVID-19, con el fin de evitar que contagien a las personas cercanas en los sitios donde habitan.
A través de su cuenta de Twitter, el funcionario explicó que el lugar cuenta con 225 cuartos en dos hoteles ejecutivos y cuatro familiares. Además se albergarán 150 personas del sector salud en las cabañas.
Robledo aseguró que no todas las personas contagiadas van al hospital, ya que cerca del 80% enfrenta la enfermedad de manera ambulatoria, en su casa. Sin embargo, con base en un estudio epidemiológico, muchas veces cohabitan con una persona con alguna comorbilidad, que podría desarrollar un cuadro grave de la enfermedad.
Las personas que decidan pasar su periodo de aislamiento contarán con televisión, acceso a internet, actividades recreativas.
"Aquí vamos a recibir a pacientes de COVID-19 que no tienen síntomas graves, gente joven, sin otros padecimientos, para evitar que al ir a casa contagie a alguien más”, puntualizó.
De igual manera, ofreció la dotación de comidas, con personal del IMSS que atiende COVID-19, desde enfermeras, hasta quienes realizan la limpieza. Mencionó que otro objetivo es romper las cadenas de contagio.
El hospedaje se ofrece para “alguien que vive en una casa y que no puede poner un baño exclusivo para quien está enfermo. Es algo que puede funcionar muy bien”, reiteró.
En total, 600 personas se estarían beneficiando de este servicio en este centro vacacional. Los pacientes podrán ver al personal de salud, y hablar con quienes los atiendan y monitorean sus síntomas para que sigan estables.
“Creemos que es una medida diferente para que los hospitales se concentren en las terapias intensivas, en los casos más graves, críticos, mientras aquí los no graves se recuperen en condiciones para que evolucionen y en caso de que tengan complicaciones hay un protocolo para su atención”, apuntó el director.
El pasado 7 de mayo, informó que otros dos centros vacacionales también se convertirían en albergues para pacientes con COVID-19 que presenten síntomas leves y con ello evitar la propagación de contagios entre familiares.
En conjunto, los centros vacacionales ubicados en Oaxtepec, Atlixco-Metepec y La Trinidad, cuentan con 525 habitaciones y 1,238 camas.
En ese sentido, expuso que los esfuerzos del IMSS están enfocados a resolver el hecho de que los pacientes sospechosos de tener la infección acudan demasiado tarde a los hospitales y tengan que ser ingresados inmediatamente a terapia intensiva.
Esto ha sido un factor para que las camas disponibles para atender casos graves de coronavirus comiencen a escasear en diversos puntos de la capital y el país.
Un caso similar que está próximo a operar, es el Autódromo Hermanos Rodríguez, el cual se está habilitando para convertirse en un Hospital de Expansión para pacientes con COVID-19 con síntomas leves que requieran hospitalización.
Se han instalado ocho módulos para hospitalización con capacidad de 24 camas. Adicionalmente habrá 16 camas de cuidados intensivos.
En su comunicado, aseguró que el próximo 13 de mayo el hospital quedará listo para atender a los pacientes.
Cabe mencionar que el Autódromo Hermanos Rodríguez forma parte de la Corporación Interamericana de Entretenimiento (CIE), el corporativo empresarial mexicano más grande de entretenimiento del país que de igual manera, impulsó a 16 empresas y fundaciones a convertir el Centro Citibanamex en hospital designado a atender pacientes de COVID-19.
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