El comentarista y productor Epigmenio Ibarra criticó duramente a la que llamó “élite mexicana” por sus impulsos “antidemocráticos” contra el presidente Andrés Manuel López Obrador y señaló que buscan que "el caos y la muerte imperen en el país para volver al poder”.
Jugaron a ser demócratas pero ya se dieron cuenta que eso no es lo suyo, es cosa de la ‘plebe’, de los ignorantes, de los pobres
De acuerdo con Ibarra, quien emitió su opinión en un video para su columna en Milenio Televisión, los integrantes de este grupo “no pueden contenerse, están rabiosos, hartos, decididos a jugarse el todo por el todo, o más bien, que Donald Trump y sus marines se encarguen del asunto”.
Y es que la semana pasada, el periodista Pedro Ferriz de Con se volvió tendencia por la filtración del audio de una supuesta llamada en la que, junto a un grupo de empresarios, conspira contra el gobierno de López Obrador.
“Se está cocinando que el propio gobernador de Jalisco (Enrique Alfaro) se va a levantar y va a decir: bajo estas condiciones el Occidente no tiene un plan de recuperación y desconozco al presidente de México”, es una de las primera declaraciones de Ferriz de Con.
En días posteriores, el comunicador dijo, ya en un video transmitido en su cuenta de Twitter: “Estamos siendo víctimas de una manipulación”. Concluyó diciendo: “¿Estás listo para la unidad? Si estás listo, ten calma, pronto tendremos que hacer uso de ella".
“El racismo se asoma en cada frase que dicen, no pueden evitarlo, miran siempre con desprecio de arriba para abajo (…) votaron por López Obrador, dicen y también en eso mientan, sólo gente sin educación, ‘ninis’ sin oficio ni beneficio que no pagan impuestos”, respondió por su parte Ibarra en su monólogo.
De acuerdo con el productor, una figura muy cercana al presidente mexicano, la élite “tiene mucho miedo al ‘populacho’, lo odian”. “Les fallaron José Antonio Meade y Ricardo Anaya”, añadió, en referencia a los rivales del actual mandatario en las elecciones presidenciales de 2018.
“Al PRI (Partido Revolucionario Institucional) lo deshizo el corrupto impresentable de Enrique Peña Nieto”, disparó Ibarra contra el ex presidente (2012-2018). “Al PAN (Partido Acción Nacional) lo desbarató Felipe Calderón”, añadió contra otro ex mandatario (2006-2012).
De su propia responsabilidad en la debacle de esta oposición, electoralmente despedazada, políticamente desarticulada y moralmente derrotada, no dicen una palabra
Para Ibarra, el resentimiento de este grupo no es exclusivo de la gente “de abajo”, sino también “temen y odian a quienes tienen más dinero, sobre todos aquellos que dialogan de manera constructiva y constante con López Obrador, y que han manifestado siempre una actitud de respeto irrestricto a la democracia”.
En dicha frase, el comentarista podría haberse referido, entre otros, a los magnates Carlos Slim y Alberto Baillères, aquellos que más se han acercado a la actual administración desde el sector empresarial. “Contra ellos despotrican, les tienen saña y envidia y en el fondo los consideran traidores a su clase”, añadió Ibarra.
Están encabronadísimos, y tienen razón: ya no tienen en Palacio (Nacional) a un sirviente, a un gerente en el mejor de los casos
Es por ello, de acuerdo con Ibarra, que el presidente ya no se arrodilla ante ellos ni obedece sus órdenes. “Ni siquiera las escucha, con indignación gritan que les ha dado la espalda”. Aquí, el productor los calificó como “conjurados que están por todas partes”.
“Hay amateurs (…) que escuchan arengas golpistas como si fueran conferencias de autoayuda. A esos, con ignorarlos basta”, aseguró. “Pero los hay también en los medios, y son legión: nunca un presidente había sido sometido a un linchamiento mediático tan feroz”, aseveró Ibarra, en un eco de las declaraciones hiperbólicas que suele realizar, por ejemplo, el presidente estadounidense Trump contra los medios.
Ibarra también advirtió que “ellos preparan el terreno a los más perversos y sofisticados entre los conjurados”, los que “buscan que el caos y la muerte imperen en México para volver al poder y que tienen, como Felipe Calderón, las manos manchadas de sangre inocente”.
Contra ellos, finalizó Ibarra, “hay que desenmascararlos, ponerlos en evidencia, desarmarlos con la razón”. “Anteponer a su llamado a la violencia una defensa creativa, audaz, pacífica pero enérgica, de la democracia que recién conquistamos”, concluyó.
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