La mañana de este viernes el secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, dio un balance de los índices de criminalidad en el país y respaldó la estrategia del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“No cantamos victoria mientras se sigan presentando crímenes en el país, pero nos indica (las estadísticas) el acierto de la estrategia que ha emprendido el presidente”, expresó Durazo.
Desde Palacio Nacional en la tradicional conferencia matutina, el funcionario mostró las cifras de homicidios, que en marzo alcanzaron un máximo en los últimos nueve meses.
El titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana dijo que el delito de homicidio doloso ya está “en la fase de contención”, aunque los reportes “presentan altas y bajas”.
Durazo expresó que de enero a marzo de 2020 la incidencia de homicidio doloso incrementó en Chihuahua, Guanajuato, Colima, Quintana Roo, Michoacán y Sonora, esto respecto al mismo periodo de 2019.
Destaca el caso de Guanajuato, la entidad con mayor número de casos de homicidio doloso, mientras que Colima registra la mayor tasa de casos por cada 100 mil habitantes.
Los feminicidios, que en febrero detonaron una serie de manifestaciones nacionales por una serie de eventos trágicos, han costado contenerlos, dijo Durazo. Aceptó que “hay un reto importante”, pues aunque está en “fase de reducción”, las autoridades “deben empeñarse más”.
Sobre el caso de Guanajuato, López Obrador apuntó que la escalada de violencia es independiente a las cifras de crecimiento económico que registra el Bajío.
“Hay coordinación (con Guanajuato), lo que sucede es que hay estados en los que tiempo atrás ha habido más incidencia delictiva. Ayer hablábamos del caso de Guanajuato, de cómo no es suficiente lograr el crecimiento económico, porque Guanajuato es de los estados con más crecimiento económico, sostenido, se fueron a establecer plantas maquiladoras, hay industria automotriz, autopartes, crecimiento, incluso empleo, sin embargo es el estado con más violencia, esto tiene que ver con otras causas, desigualdad, crecimiento no es sinónimo de bienestar, así de claro", dijo.
López Obardor insistió en criticar el modelo económico de las administraciones predecesoras. “Y esos son los paradigmas que se están destruyendo con la crisis global del neoliberalismo, se pensaba que crecimiento era igual a bienestar y no necesariamente. Otro es el grado de complicidad que se da entre criminales y autoridades”.
“Hay gobiernos estatales que se aplican más, donde hay crecimiento y hay bienestar y no hay corrupción. O hay estados donde no hay crecimiento, no hay bienestar, pero no están tan mal en violencia porque no hay corrupción”, dijo.
López Obrador equiparó a Quintana Roo y Yucatán, estados vecinos con distintos niveles de violencia y desarrollo económico.
“El caso de Yucatán por ejemplo, tenía hasta hace poco tasas de crecimiento bajas, ahora está creciendo poco, nada que ver con el crecimiento de Quintana Roo, hasta 6% prolongado. Yucatán no, 1%. Sin embargo Yucatán es de los estados más seguros, con menos violencia, osea no tiene, hasta hace poco que empezó a crecer, avance en lo económico, pero ha conservado sus niveles de bienestar y sobre todo que no ha habido desbordamiento de corrupción, puedo decir que el gobierno de Yucatán actual, se caracteriza por la honestidad”, expresó.
El presidente aceptó que no se ha podido contener el delito de homicidio y responsabilizó a los grupos del crimen organizado que “se siguen enfrentando por las plazas”. López Obrador reiteró su llamado a que los criminales depongan las armas. “Se puede pensar que soy ingenuo pero no”, agregó.
El presidente insistió en defender su filosofía en el combate a la inseguridad.
“Nosotros acertamos por nuestras convicciones en hacer a un lado desde el inicio el modelo neoliberal. Desde el inicio dijimos ‘la violencia no se combate con violencia’... dijimos ‘la paz y la tranquilidad son frutos de la justicia’, entonces estamos atendiendo a los más pobres desde el inicio, nunca se había destinado tanto apoyo a los pobres".
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