El Poder Judicial del Estado de México en coordinación con la Secretaría de Seguridad, también tomó la determinación de abrir las celdas en cárceles de la entidad, para liberar a alrededor de 1,894 reos, debido a la pandemia de coronavirus que ha dejado a miles de infectados a nivel nacional. En el país ya son 6,876 casos de COVID-19 hasta las primeras horas del sábado.
El objetivo es disminuir la sobrepoblación en las prisiones y evitar contagios por coronavirus, además de que la falta de higiene en las cárceles hace más difícil tomar las medidas adecuadas y recomendadas por autoridades sanitarias para evitar un brote de coronavirus, pues no existe una sana distancia entre los prisioneros.
De acuerdo con las investigaciones, hace un par de años, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) reportó que el Cefereso número 1 Altiplano, de Almoloya de Juárez, Edomex, tiene una capacidad para alojar a al menos 836 internos, pero durante una revisión se contabilizaron al menos 1,100 reos.
Luego de un trabajo conjunto por parte de las autoridades, se liberó a 59 personas y a 1,835 reos les colocaron un brazalete electrónico en el esquema de libertad anticipada como medida de prevención ante la contingencia por el virus.
La selección de las autoridades se enfocó a personas sentenciadas por delitos no graves ni violento, con el objetivo de proteger a los más vulnerables, como es el caso de las personas de la tercera edad, enfermos terminales o mujeres embarazadas.
Autoridades explicaron que el proceso se dio en dos vertientes, una de ellas la libertad condicional a través del uso de brazaletes de monitoreo electrónico y dos, la libertad anticipada que consiste en la remisión parcial de la pena, además de considerar el proceso efectivo de reinserción social, así como el buen comportamiento que han demostrados los reos.
La SS anticipó que mantendrán el análisis de más de 5,500 casos, considerados no graves ni violentos, siendo los de sentencias menores a cinco años.
En CDMX
Hace un par de días, el Poder Judicial de la Ciudad de México también ordenó la salida de algunos presos en diversas cárceles capitalinas, bajo el término de razones humanitarias y debido a la pandemia de COVID-19.
Luego del esfuerzo conjunto que sostiene el organismo judicial con el gobierno de la CDMX por la crisis del coronavirus, se autorizó la libertad de 78 prisioneros de 800 que se tienen contemplados hasta el momento.
Para su liberación, se tomaron en cuenta algunos puntos como: edad del reo, tipo de delito, los que están a punto de cumplir sentencia o si cuentan con padecimientos crónicos como: hipertensión o diabetes.
La decisión de liberar a mujeres, hombres y adultos mayores se tomó entre jueces, la Consejería Jurídica capitalina y el Ministerio Público. Además de que se logró luego de un análisis entre el Tribunal Superior de Justicia y autoridades de salud, con el objetivo de evitar un brote de contagios o muertes dentro de las cárceles.
De acuerdo con las autoridades, la propuesta también incluye a los adolescentes, cuatro de los cuales ya fueron enviados a su casa tras la la modificación de la medida de sanción en internamiento impuesta por la Comisión de Justicia para Adolescentes del Tribunal de Justicia de la Ciudad de México.
El Tribunal Superior aseguró que por el momento se modificó la sanción de internamiento a los jóvenes y se les aplicó la de la estancia domiciliaria, por lo que siguen en proceso legal pero desde la comodidad de su hogar.
Y es que respetar la sana distancia en los centros penitenciarios es difícil, debido a la sobrepoblación que existe en algunos de ellos, tal es el caso del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, que tiene capacidad para 6,208 personas, pero, hasta diciembre pasado, había 8,266 internos.
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