El empresario mexicano Jerónimo Arango Arias, uno de los hombres más ricos del país, falleció a los 95 años, confirmó este lunes el Centro Mexicano para la Filantropía (Cemefi).
“Enviamos a toda la familia Arango Arias nuestras condolencias. Descanse en paz”, señalaron en sus redes sociales.
Arango Arias, de acuerdo con la lista de Forbes en 2019, era el octavo hombre más rico de México, con una fortuna valuada por encima de los USD 4,300 millones.
De acuerdo con medios locales, Claudia de la Vega, directora de Asuntos Corporativos de Walmart en México y Centroamérica, detalló que Arango Arias falleció el sábado pasado por causas naturales.
Arango Arias fue hermano de Plácido, quien también falleció este año, en febrero pasado, y de Manuel, que los sobrevivió a ambos. Los tres formaron la compañía Grupo Cifra y fundaron, entre otras, la cadena de ropa Suburbia, la cadena de restaurantes Vips y El Portón y las tiendas de autoservicio Superama.
El éxito de Bodega Aurrerá en el país, cadena que fue fundada en diciembre de 1958, fue tal que, para 1991, el gigante del autoservicio Walmart se convirtió en uno de sus socios, el primero fuera de Estados Unidos para la compañía multinacional.
En 1997, decidieron venderle la totalidad de su firma a esa empresa y con ello las arcas de los Arango Arias aumentaron considerablemente. El nombre Aurrerá significa “adelante” en vasco y su éxito, de acuerdo con los expertos, creció aceleradamente ante el éxito de la estrategia de bajos precios, dando pie a lo que se convertiría en la fortuna de Arango.
Tras ampliar en varias ocasiones su primera locación y diversificar su oferta de productos, el empresario aprovechó el auge de Aurrerá para expandirse a los supermercados en la década de los 60, creando la cadena de tiendas Superama.
Más tarde incursionaría también en el negocio de la comida, concibiendo la cadena de restaurantes Vips, de la que actualmente hay más de 280 sucursales en México y que hizo crecer un enorme grupo restaurantero en España. El Grupo Alsea adquirió esta cadena en 2013.
Arango siempre mantuvo un bajo perfil, igual que sus hermanos Manuel y Plácido, quienes también se beneficiaron de la venta de Grupo Cifra para dedicarse a la filantropía. Manuel, quien todavía vive, es precisamente el presidente honorario y fundador del Cemefi.
Sobre el fallecimiento de Jerónimo Arango, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar Lmelín, indicó que fue una persona con “enorme influencia positiva dentro de la vida económica y social” del país, de acuerdo con el diario El Financiero.
Él ha encabezado iniciativas de orden social que son verdaderamente admirables y sería una enorme pérdida para el país y el sector empresarial mexicano
Jerónimo murió apenas un par de meses después que su hermano, Plácido, quien fue doctor en Ciencia Económicas por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM). Esos conocimientos que le ayudaron en su camino hacia la élite empresarial. Se casó con Teresa García con quien tuvo tres hijos, Plácido, Maité y Francisco, este último es conocido por ser un productor de cine y presidente de la Fundación Aldina.
Las personas cercanas al empresario constantemente lo definían como un hombre culto, amante del arte antiguo que a menudo realizaba donaciones al Museo del Prado y al Museo de las Bellas Artes de Asturias. Una de las acciones más conocidas que tuvo en este sector fue la donación de 25 obras antiguas a este museo.
Entre las obras donadas se encontraban pinturas españolas y trabajos de artistas europeos creadas entre los siglos XVI y XIX. Su colección contaba con obras de pintores como Goya, Zubarán, El Greco, y se extendían por la historia del arte hasta llegar al arte contemporáneo. En 1991 también realizó una importante donación de la primera edición de los “Caprichos” creados por El Greco.
Además de ser economista, también fue académico de Bellas Artes y presidente de la Fundación Príncipe de Asturias, por lo que fue acreedor de reconocimientos como o la Gran Cruz de Alfonso X El Sabio, la Gran Cruz de Isabel la Católica, la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil.
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