Después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunciara en su primer informe trimestral del 2020 que la Línea 3 del Tren Ligero de Guadalajara estaba concluida, Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, aclaró que no es cierto y que lo más probable es que informaran mal al jefe del ejecutivo federal.
En conferencia de prensa, el gobernador apuntó sin fines de golpeteo político que "es evidente que la Línea 3 no está terminada, no creo que sea necesario polemizar más”. Asimismo, agregó que, a su parecer, se trata de un error de comunicación interna a nivel federal, pues la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) es la encargada de la obra que inició en 2014.
“Yo creo que le informaron mal al presidente, me parece, es un asunto de información al interior del gabinete federal”, sintetizó Alfaro Ramírez.
Para no dejar lugar a dudas, el mandatario jalisciense abundó en el avance que se tiene en la obra de transporte público y refirió que está en proceso de entrega-recepción de cocheras, talleres y del viaducto 2. También manifestó su extrañeza ante la secretaría encargada del proyecto, pues la semana pasada se reunió con la SCT para “ver el paso a paso de aquellas cuestiones que están pendientes de terminar”.
En plan informativo, Alfaro Ramírez deslinda al gobierno de Jalisco del evidente atraso que tiene el proyecto que inició en el sexenio de Enrique Peña Nieto, pues éste se esperaba que finalizara en 2017; sin embargo no ocurrió así. Cabe destacar que no sólo se ha duplicado el tiempo de entrega de la obra, sino que también los costos, pues cuando el gobierno federal autorizó la construcción de la Línea 3 del Tren Ligero, otorgó una partida de 17 mil 693 millones de pesos, misma que incrementó hasta llegar a 31 mil 500 millones. Este incremento de 13 mil 807 millones de pesos es parte de un problema heredado al nuevo régimen federal y un problema de movilidad a la capital del estado.
De acuerdo con las estimaciones de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, una vez terminada la línea, cerca de 233 mil jaliscienses disfrutarán de los servicios de movilidad urbana al día.
Sin embargo, el retraso de 3 años y el incremento de presupuesto en una obra inconclusa, ponen en tela de juicio las capacidades del gobierno para resolver un problema que está planteado desde el 2014.
El gobierno encabezado por Alfaro ha manifestado constantemente sus desacuerdos con el presidente López Obrador; sin embargo, en este caso fue reiterativo que sólo se trató de un problema de comunicación interna. No obstante, aprovechó la ocasión para poner en la óptica mediática la construcción de esta importante vía de comunicación y movilidad para sus gobernados, en donde la SCT debe de asumir su responsabilidad en los costos y tiempos de entrega, así como la calidad de la obra terminada sin importar el régimen en turno.
Un ejemplo del disentimiento que tiene con AMLO es su reciente declaración en la que calificó de desesperante la forma en la que está actuando el gobierno federal en la estrategia contra el coronavirus y criticó el desempeñando Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, con quien no se ha podido establecer comunicación. Esto, en el contexto de que el pasado 2 de abril, el gobernador solicitó al gobierno federal que adquiriera pruebas rápidas de Covid-19.
Hasta el reporte del domingo 5 de abril, Jalisco reportó 123 casos positivos por Covid-19 repartidos en 16 municipios y notificó de seis defunciones ligadas a esta enfermedad. Tiene notificó que tienen en vigilancia 774 casos sospechosos y han descartado mil 36.
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