Coronavirus en México: aumentará el precio de la tortilla

El avance del coronavirus Covid-19 en México que obligó a las autoridades a admitir que el país ya se encuentra en la Fase 2 del contagio, así como la devaluación estrepitosa del peso ante el dólar, ocasionarán un aumento en el precio del kilo de tortilla de hasta cuatro pesos, así lo advirtió Fidencio Sergio Jarquín Muñoz, presidente del Consejo Rector de la Tortilla Tradicional Mexicana.

Señaló que a partir de este martes 24 de marzo, el alimento básico en la dieta del mexicano, tendrá un incremento de entre dos y cuatro pesos tanto en el Estado de México como en la Ciudad de México, mientras que en entidades como Quintana Roo y Yucatán, el precio del kilo de tortilla podría alcanzar hasta los 20 pesos.

En entrevista con el diario La Jornada, Jarquín Muñoz, puntualizó que el incremento se debe principalmente a que las grandes comercializadoras esconden el maíz y a la depreciación del peso en los últimos días, derivado de la emergencia sanitaria provocada por la pandemia, por lo que es insostenible mantener el precio de la tortilla y la masa en las más de 110 mil tortillerías que existen en el país.

Aseguró que no se justifica que el costo suba entre 25 y 35% ya que autoridades federales y productores de Aguascalientes, Hidalgo, Jalisco, Guanajuato, Guerrero, Michoacán, Morelos, Querétaro, San Luis Potosí y Zacatecas aseguraron que durante el ciclo agrícola 2019-2020 hubo buena cosecha.

Pero reveló que las comercializadoras y distribuidoras justifican el alza del precio de la tonelada de maíz de 4 mil 800 pesos a 6 mil pesos por la devaluación del peso frente al dólar, la caída de la Bolsa Mexicana de Valores y a que el maíz ha tenido una baja en diversos mercados bursátiles.

El presidente del Consejo Rector de la Tortilla Tradicional Mexicana aseguró que la materia prima es acaparada para especular, por lo que hizo un llamado urgente al presidente Andrés Manuel López Obrador para que instruya a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y a la Procuraduría Federal del Consumidor a que sancionen a los especuladores.

Insistió en que el encarecimiento del maíz hace insostenible la situación de los productores de tortilla y los obliga a incrementar el precio de su producto, que no se ha ajustado en cinco años.

“No podemos solventar el aumento increíble en el precio de la tonelada del maíz que subió mil pesos en lo que va este año, en lugar de ganar estamos perdiendo”, confesó.

Este martes, en entrevista con Noticieros Televisa, el titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Ricardo Sheffield, advirtió que ante las amenazas de algunos tortilleros de aumentar el precio de la tortilla, aseguró que no existe ninguna justificación porque no se ha incrementado el precio del maíz.

Desde inicios de este año, se reportó el aumento en los precios de varios productos de la canasta básica como el pan, las galletas, la leche, los refrescos y la tortilla.

En distintos puntos del país, se reportaron precios de hasta 20 pesos el kilo. Diarios especializados como El Economista informaron que en el estado de Jalisco, el incremento alcanzaba el 60%, por lo que el kilo de tortilla de 10 a 16 pesos en menos de una semana.

En distintos medios se informó además que en tortillerías de Monterrey, Guadalajara, Veracruz y Ciudad de México, el producto había subido alrededor del 14%, un cambio que los productores justificaron por los altos costos del gas o la electricidad, y por el encarecimiento de la harina y el maíz.

Ante el incremento, la Procuraduría Federal del Consumidor lanzó un comunicado para desglosar los datos de su monitoreo y aclarar que no hay razón que justifique este incremento en el precio de las tortillas.

“La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informa que la mayoría de tiendas de autoservicio y tortillerías en el país mantienen sin cambio el precio del kilo de tortilla; tampoco ha habido aumentos sustanciales de los insumos que justifiquen el alza del precio del producto”.

Según la dependencia, el costo de la tortilla se había mantenido sin variación en el 86% de los establecimientos del país.

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