Después de que el presidente López Obrador anunció su decisión de bajar el precio de la gasolina, el periodista Carlos Loret de Mola lo señaló por supuestamente ocultar la verdad y colgarse de títulos que no le corresponden.
En un video compartido en sus redes sociales, el mandatario mexicano explicó que la decisión se tomó porque ahora está costando menos la importación de gasolina; y además con esta acción, aseguró, se buscará reforzar la economía popular.
"A pesar de la caída en el precio del petróleo, que desde luego nos afecta, tomamos la decisión de reducir el precio de la gasolina porque ahora nos está costando menos su importación. Esto es fortalecer la economía popular frente a la adversidad… Decidí que bajara el precio para que nos ayude a atemperar, que no se sienta tanto la crisis económica”, señaló el presidente.
Sin embargo, el columnista dijo que el precio de la gasolina está integrado a grandes rasgos por tres componentes: el precio internacional del petróleo, el costo de transportarla hasta las estaciones de servicio y el impuesto IEPS que el gobierno utiliza para recaudar.
“Así pues, en realidad, la única incidencia que tiene el gobierno sobre el precio de la gasolina es que puede subir o bajar ese IEPS (Impuesto Especial sobre Procucción y servicios). Y ese no bajó, entre otras cosas, porque con la economía paralizada, uno de los pocos impuestos que le sirven al gobierno para recaudar es este IEPS”, explicó.
Asimismo, indicó que lo que bajó fue el precio internacional del petróleo, y en eso “el gobierno de AMLO no tiene nada que ver”, afirmó. “El primer desplome fue a causa de un desacuerdo entre Rusia y Arabia Saudita, y luego se vino abajo por las fuertes expectativas económicas que ha generado el coronavirus".
Finalmente, negó que la reducción de gasolina beneficie al sector popular, pues aseguró que un “sinfín de estudios” demuestran que subsidiar las gasolinas beneficia sobre todo a los más privilegiados que tienen automóviles y los usan más veces.
El domingo 22 de marzo el presidente por fin asumió que se avecina una crisis económica en México a raíz de la pandemia del Covid-19 en el mundo, así como por la caída del precio petróleo
A pesar de la mala jornada que tuvo el peso frente al dólar en días pasados, el fin de semana tuvo un ligera recuperación de la que hasta ahora se refleja en 24.08 unidades por dólar, aunque aún se mantiene en un clima de incertidumbre de alto nivel, en las que se ha señalado que las medidas tomadas por el Banco de México aún son de poco impacto, por lo que implica que el gobierno local tome las decisiones pertinentes en materia de política fiscal, a las que el mismo Ejecutivo se ha negado hasta el momento.
Dicha situación ha prevalecido desde la renuncia del ahora ex secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, hecho que detonó la baja confianza de los mercados extranjeros en México, a lo que AMLO argumentó que no había nada que temer, pues se contaba con “un peso fortachón”. En contraste, conforme a la actual crisis originada por la pandemia del coronavirus, el Banco de México ha tenido que tomar cartas en la materia a fin de aminorar el golpe para el país que se encuentra en medio de una economía estancada, en la que se reportan industrias de corte manufacturero, minero y de la construcción también a la baja.
Hasta el momento no se descarta la posibilidad de que el peso alcance los 25 pesos por unidad, a pesar de los esfuerzos de Banxico en coordinación con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a fin de recuperar el orden del mercado al inyectarle liquidez y apaciguar la volatilidad que vive en tiempos de coronavirus.
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