Ante la creciente crisis del coronavirus en México y el mundo, el gobierno federal prepara nuevas estrategias para evitar la propagación del virus que ha dejado más de 6 mil muertos en el mundo, asimismo, entregó los datos oficiales del brote de esta enfermedad en el país.
En el Estado mexicano hay 53 casos confirmados, de los cuales el 60% son hombres y el 40% mujeres; de los cuales el 83% son casos ambulatorios, es decir se recuperan en casa; con un rango de edad de los 19 a los 73 años y la Secretaría de Salud ha atendido al 68% de las personas enfermas.
Durante la conferencia diaria dirigida por Hugo López-Gatell, subsecretario de prevención y promoción de la salud, se confirmó que hospitales y laboratorios privados ya pueden aplicar pruebas de coronavirus. Esto tras realizar un esfuerzo en conjunto entre el gobierno federal y la iniciativa privada dedicada al sector salud. El subsecretario explicó que desde la pandemia de Influenza AH1N1, aprendieron que no se debe de centralizar el diagnóstico.
Así que desde enero de este año, la Secretaría de Salud invitó a distintos hospitales a que se certifiquen para poder realizar las pruebas correspondientes para la pronta detección de los casos de COVID-19. Al respecto, el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (INDRE) estableció los lineamientos de calidad para que los privados puedan aplicar las pruebas.
Los representantes de los laboratorios y hospitales no correspondientes a los del gobierno han cooperado en la estandarización de pruebas y están en la mejor disposición de coadyuvar en este proceso de transmisión. Hasta el momento, 16 laboratorios y 3 hospitales privados ya tienen la capacidad de detectar el coronavirus COVID-19 sin tener que mandar sus muestras al INDRE.
Asimismo, todo el sector se comprometió a no encarecer los costos. Ante esta buena noticia, López-Gatell especificó que los costos van de 2 mil a 2 mil 300 pesos por prueba; sin embargo, no brindó el nombre de los laboratorios ni hospitales porque no es su trabajo hacer publicidad. Pero sí especificó que los usuarios deben de estar pendientes ante la certificación del INDRE.
Asimismo, el funcionario federal retomó brevemente la Jornada Nacional de Sana Distancia, que inicia el próximo lunes 23 de marzo y termina el domingo 20 de abril y consta de cuatro puntos:
1.- Medidas básicas de prevención
2.- Suspensión temporal de actividades no esenciales
3.- Reprogramación de eventos de concentración masiva (mayores a 5 mil personas)
4.- Protección y cuidado de las personas adultas mayores (el demográfico más vulnerable)
“Esperamos retomar actividades regulares después de esta fecha”, estimó.
Al respecto, enfatizó que no se trata de un periodo vacacional, es para que la curva epidémica no se acentúe, así que la recomendación oficial es no salir de casa a menos que se cubran necesidades básicas indispensables.
Durante la conferencia, también se anunció el nuevo sitio web del gobierno federal para atender las dudas de la población: www.gob.mx/coronavirus. En donde brinda fácil acceso a cursos para personal del sector Salud y público en general para combatir al coronavirus, material para niños (videos), preguntas frecuentes, “mitos y realidades”, material de consulta (científico y de difusión), sitios de interés que combatirán la difusión de noticias falsas, experiencias y recomendaciones en general.
A pregunta expresa respecto a la celebración en Iztapalapa de la llamada “Pasión de Cristo”, López-Gatell dijo que esa celebración en específico aún no está cancelada, pero que está en conversación con la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, para aplicar la máxima de la “suspensión temporal de actividades no esenciales” y “reprogramación de eventos de concentración masiva” inscritos en la Jornada Nacional de Sana Distancia.
Respecto al tamizaje o revisión en los aeropuertos, la Secretaría de Salud no tiene contemplada la compra de cámaras térmicas por ser muy poco prácticas. El subsecretario especificó que su costo, 35 mil dólares en promedio, compite con el de un ventilador mecánico (soporte respiratorio) y que el gobierno federal decidió priorizar la atención que la detección, pues se espera que esta sea una epidemia larga.
“Los recursos existen y la prioridad es la salud”, cerró López-Gatell.
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