Cientos de mujeres que se concentraban en el monumento a la Revolución con motivo de la conmemoración del 8 de marzo, desde hace un par de horas comenzaron a marchar en favor de la erradicación de la violencia de género que se ha visto recrudecida desde inicio de 2020 con el asesinato, violación y desaparición de niñas, jóvenes y adultas de todas las edades, ha incrementado la inconformidad entre la comunidad, entre la que destacan madres de hijas desaparecidas o asesinadas a lo largo de diferentes administraciones en México.
Entre los medios de transporte como el metrobús y el metro se reportaron contingentes de todos tamaños en los que mujeres de edad media y avanzada se han distinguido de entre los demás por vestir colores verde y morado, que se traducen en el apoyo al aborto, la esperanza por los nuevos comienzo y en la equidad de género.
En las calles del centro algunas van con micrófonos en mano de los que se valen para enunciar sus demandas, sus himnos y, especialmente, para exigir que el gobierno cumpla con su tarea de proporcionar seguridad pública.
Cabe mencionar que entre los grupos se organizaron para ir en orden, siendo las madres de hijas asesinadas las que iban al frente de éstos, seguido de las madres que se hicieron acompañar de sus hijas e hijos menores; tras ellos venían contingentes integrados por puras mujeres y, al final, conjuntos integrados tanto por hombres, grupos políticos y sindicatos.
Los que se encontraban atestados de gente eran los medios de transporte que estaban en los alrededores del centro de la ciudad de México, en los que las personas aprovecharon para organizarse, entre los que surgían consejos en caso de que llegasen a existir ataques de ácido y se supiera qué hacer a fin de salvar la integridad física.
La salida de los manifestantes se dio desde las dos de la tarde con rumbo al Zócalo, punto de partida del que las autoridades capitalinas reportaron un aproximado de más de 4 mil personas al punto de la una de la tarde, ello tan sólo en el monumento a la Revolución.
Entre algunas de las mantas que llevaban las manifestantes se han distinguido mensajes como “Somos el grito de las que no tienen voz”, “No me mates” y mujeres alzando la mano a fin de que su presencia se contabilice entre el mar de manifestantes que protestan en contra de los feminicidios y de la violencia de género.
Hasta el momento el movimiento se ha caracterizado por marchar entre batucadas y vítores de apoyo entre las manifestantes, entre las que no ha faltado el performance de “Un violador en tu camino”, que ha sido importado desde Chile hacia diferentes partes del mundo gracias al Colectivo “Las tesis”.
Además de las colectivas, también se encuentran familiares de víctimas, asociaciones civiles y ciudadanía en general que claman, entre otros temas por ejercer la maternidad de manera libre, así como el aborto libre y seguro.
Con 30 mil mujeres inició el camino de diversos contingentes independientes, comunitarios y universitarios que fueron saliendo del monumento, sin embargo las colectivas reportaron que existían más de 70 mil personas congregadas moviéndose desde diferentes puntos del centro hacia el Zócalo.
Mañana 9 de marzo la encomienda en favor de “Un día sin mujeres” es no salir, no comprar, no trabajar, no ir a clases, a fin de visibilizar la importancia de niñas, jóvenes y adultas en la vida del país desde los diferentes círculos que la conforman, así como concientizar a la sociedad sobre qué es lo que pasa cuando una mujer no vuelve a su casa, con los suyos, deja de existir, de aportar y de formar parte de una vida que les truncan tanto quienes las desaparecen, como quienes son responsables de su seguridad en el gobierno y en la sociedad.
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