Un adolescente estadounidense de Oklahoma murió y varios de sus familiares sufrieron heridas de bala tras ser atacados en Tamaulipas, cerca de la frontera con Texas, por miembros de una organización delictiva.
La familia viajaba de regreso a los EEUU cuando los sicarios los emboscaron en la carretera.
El tiroteo ocurrió el sábado por la noche en Nueva Ciudad Guerrero, justo al sur de la presa Falcón; los miembros de la familia Castillo viajaban en dos camionetas Chevrolet cuando un grupo de hombres armados los atacaron, según los informes policiales.
De acuerdo con la información recabada por las autoridades, las víctimas viven en Oklahoma y viajaron a la ciudad de Monterrey para visitar a sus familiares durante las fiestas navideñas.
En su camino de regreso a Oklahoma, planeaban viajar hacia Ciudad Mier para cruzar de regreso a Texas a través del Roma International Port of Entry. La carretera en la que fueron baleados es considerada de alto riesgo. Conecta Ciudad Mier con Nueva Ciudad Guerrero, a orillas del río Bravo, y pasa por un área que se disputan grupos delictivos, incluidos el Cártel del Golfo y los Zetas
El ataque tuvo lugar cerca del kilómetro 113, cuando un grupo de pistoleros que viajaban en varias camionetas intentaron detener a la familia. Los hombres abrieron fuego y dispararon varias veces. El tiroteo provocó que el conductor se estrellara contra otro vehículo.
Tras el ataque, los sicarios abandonaron la escena.
Cuando las autoridades respondieron por primera vez al llamado, les informaron que se había tratado de un accidente de tráfico. Sin embargo, cuando llegaron, descubrieron que en realidad había sido un ataque y no un accidente, reveló la fuente del sitio especializado Breitbart Texas.
Durante el ataque, el menor de 13 años murió a causa de las numerosas heridas de bala que sufrió. Tres de sus familiares, incluida una niña de 10 años, también sufrieron lesiones. Los paramédicos llevaron a las víctimas al Hospital Universitario de Cerralvo, en Nuevo León, donde se encuentran en estado grave.
La agresión se produjo en un momento en el que los miembros del Cártel del Noreste, facción de Los Zetas, han estado llevando a cabo una serie de ataques para quitarle el control de la región al Cártel del Golfo. El CG actualmente controla esa región de la frontera y los ataques han sido constantes. Los vecinos de la zona han reportado en los últimos días la presencia de varios vehículos blindados con ametralladoras montadas, lanzagranadas y otros explosivos.
El 2 de enero ocurrió un enfrentamiento en el estado de Tamaulipas que dejó un saldo de un muerto y un lesionado por hombres que presuntamente pertenecen al Cártel del Noroeste.
El día anterior, al menos seis muertos y dos agentes heridos fueron el saldo de los enfrentamientos entre presuntos integrantes del Cártel del Noreste y la Policía en la ciudad de Nuevo Laredo, fronteriza con Estados Unidos, informó la SSP.
En noviembre, ocurrió un caso similar al sur de la frontera de Nuevo México, cuando un grupo de hombres armados del cártel atacó a la familia LeBarón, que viajaba hacia el norte. El saldo fue de nueve muertos, entre ellos mujeres y niños.
Aquella acción reavivó el discurso que pretende designar a los cárteles de la droga como Organizaciones Terroristas Extranjeras.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: