El gobierno de Michoacán envió al menos 400 elementos de la Policía Estatal al municipio de Zamora para reforzar la seguridad, luego de que un convoy del Cártel Jalisco Nueva Generación ingresó a la ciudad, incendió casas y levantó a dos personas.
A su llegada, los elementos instalaron una serie de puestos de inspección vehícular en los accesos a Zamora y en las vías procedentes de los municipios de La Piedad, Sahuayo y la Barca, Jalisco.
Esto sucedió como acción de los ataques de un grupo de hombres armados presuntamente integrantes del CJNG, la madrugada del viernes.
La irrupción del grupo armado provocó un escenario de balaceras en distintas zonas de la ciudad y el plagio de al menos dos personas.
Según los reportes del Ejército, las tropas de esa institución atendieron una decena de denuncias ciudadanas sobre la presencia de hombres armados a bordo de al menos 15 camionetas.
Luego de las agresiones, los presuntos sicarios huyeron por la carretera estatal 37, que cuenta con una intersección a la altura de Ecuandero, hacia La Piedad y La Barca. En ese punto, la Policía de Michoacán y de Zamora, además de la Guardia Nacional desplegaron un operativo para localizar las camionetas.
El saldo preliminar de la irrupción fue de dos casas baleadas, tres más incendiadas, dos personas presuntamente plagiadas y un hombre lesionado de bala.
Zamora es uno de los municipio disputados por integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación y Los Viagras, que son una escisión de La Familia Michoacana y Los Caballeros Templarios.
En mayo pasado, Zamora registró una racha de violencia que dejó un saldo de 10 ejecutados en siete días, incluidos cuatro agentes municipales.
Medios locales reportan que fue un convoy de más de 20 camionetas las cuales tenían las siglas “CJNG”, ingresó al municipio de Zamora y dispararon contra elementos de la Policía Municipal.
En esa ocasión, el gobierno envió 350 policías estatal a esa zona, que se sumaron a los 250 federales que se encontraban desplegados en esa ciudad.
Ese mes aparecieron narcomantas en las que se acusaba al alcalde de Zamora de apoyar a integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación.
En los mensajes, los supuestos sicarios que firmaban con el seudónimo “Los empresarios independientes”, “El pueblo gente a pie” e “¡Inteligencia ciudadana!”, le exigieron al edil “dejar de poner en riesgo a todos sus empleados y a la ciudadanía” por apoyar a un grupo de delincuentes que están secuestrando, extorsionando y matando a mujeres, niños y gente inocente.
También aseguraron que “los independientes” no apoyan el secuestro y solicitan que “deje avanzar las investigaciones” del gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, y del gobierno federal “para parar esta gran delincuencia que empezó en su mandato”.
Cuestionado sobre el caso Michoacán, el presidente López Obrador dijo que hasta finales de junio entraría en operación la Guardia Nacional en todo el país, incluyendo dicho estado.
“Van a ir los elementos de la Guardia Nacional a los lugares donde hay más necesidad de seguridad, van a reforzar, esto a partir del día 30 de junio, porque se está haciendo acopio de elementos, se están capacitando, es un proceso pero ya vamos hacia allá y eso no quiere decir que descuidemos a la gente, estamos trabajando”, indicó el presidente mexicano.
Pese a la presencia de la corporación policíaca, los ataques continúan.
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