El pasado agosto, una tapatía de 19 años voló por primera vez a Nueva York. No tenía experiencia internacional, y su nombre era sólo uno más en la larga lista de modelos que cada año buscan debutar en la semana de la moda. Pero eso, no la intimidó.
Como tantas otras aspirantes, Krini Hernández saltó de un casting a otro y recorrió la ciudad de los rascacielos en busca de una oportunidad. Aquellos días, la top-model mexicana no imaginaba que estaban por cumplirse todos sus sueños.
Proenza Shouler fue la primera marca internacional que apostó por su talento. Al ver sus rasgos definidos y su profunda mirada azul, la directora de casting de la firma estadounidense la contrató y le ofreció desfilar con ellos en exclusiva para evitar que trabajara en otras pasarelas durante la Fashion Week neoyorquina.
“Me hablaron para decirles que mi perfil les había interesado; después, conocí a los diseñadores de la marca para ver si les gustaba, y horas más tarde me confirmaron para hacer mi debut en exclusiva con ellos. ¡Lo cierto es que no podía creerlo! Me sentí muy afortunada”, explicó Krini a la revista Vogue México.
Aquel día marcó un antes y un después en la vida y la carrera de la modelo de Guanajuato. El ascenso imparable y vertiginoso que vivió en las siguientes semanas, consagró su carrera y la situó en la cima de las modelos mexicanas más reputadas y mejor cotizadas, junto a Issa Lish o Mariana Zaragoza.
En su debut, Krini no sólo conquistó la ciudad de Nueva York, sino que cautivó a los modistos más influyentes del mundo. Diseñadores, directores de casting, representantes y medios de comunicación comenzaron a preguntarse quién era aquella joven que había caminado para Proenza Schouler. Y pronto lo sabrían.
Krini rápidamente conseguió billetes de avión para las Fashion Weeks de Milán y de París. Al abandonar Nueva York se embarcó en un vuelo a Italia, donde caminó en exclusiva para nada más y nada menos que Prada. Después, viajó a París, donde desfiló luciendo las colecciones de primavera-verano 2020 de Lanvin, Alexander MqQueen, Valentino o Chanel, entre otras prestigiosas marcas.
“Las semanas anteriores había estado muy nerviosa por tanta expectativa. Fue un proceso muy largo y cansado, pero al final ¡todo valió la pena!” contó la modelo a Vogue México sobre su experiencia con Prada. “No me lo creía completamente hasta hoy, ¡que por fin lo hice! Es algo que sabes que se puede llegar a cumplir, pero sueñas con que ese día llegue”, añadió.
Desde su desfile con Proenza Schouler, su carrera explosionó en tiempo récord: Nina Ricci, Alexander McQueen, o Miu Miu fueron algunos de sus últimos trabajos. El 2019 fue su año, y marcó el camino de un 2020 que vendrá lleno de proyectos para la gran promesa mexicana de la moda.
Quién es Krini Hernández
Krini Hernández nunca buscó convertirse en modelo. Fue un agente el que la contactó a través de Facebook, después de ver sus fotos en la red social, cuando ella tenía 17 años.
“La verdad es que la moda y yo nos cruzamos casi por accidente”, contó la top-model en declaraciones a Vogue México. "Un conocido me descubrió a través de Facebook y no mucho tiempo después me invitó a trabajar en su agencia. Recuerdo que las primeras fotos que hice eran colaboraciones y para algunos catálogos, pero poco a poco comencé a interesarme más en esto. Lo cierto es que empecé en esta industria porque se dio la oportunidad y la quise aprovechar al máximo”.
Hace un año, después de sus primeros trabajos en Guadalajara, Krini viajó a la Ciudad de México para ejercer el modelaje de manera profesional. Su prometedor futuro hizo que su agencia la llevara a Australia, donde adquirió experiencia y la prepararon para las grandes ligas. El pasado agosto, voló a Nueva York.
“En este proceso he aprendido muchas cosas", contó la modelo a la revista Elle. "Principalmente que tienes que tener mucha dedicación y sacrificar cosas para poder llegar lejos. La gente piensa que es muy fácil, pero no lo es. También he aprendido a valorar muchas cosas que antes no valoraba, a ser más abierta con la gente y a no tomarme nada personal”.
Después de que las marcas más exclusivas la descubrieran en Nueva York, muchos modistos la describen como “una estrella”. Sin embargo, Krini mantiene los pies en la tierra, y a pesar de que su carrera despegó velozmente y sus éxitos no dejan de multiplicarse, es fiel a ella misma y aclara que su fama no le hará cambiar su forma de ser.
“Me considero una persona tranquila, sensible, risueña. Soy de Guadalajara y tengo 19 años. Lo cierto es que me encanta pasar tiempo con mi familia y mis amigos, pero también dedicarme a mi trabajo, que actualmente es el modelaje”, explicó.
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