Supermercados y tiendas departamentales pagarán multas de hasta 170 mil pesos por entregar bolsas de plástico

Producir, distribuir y entregar bolsas de plástico estará prohibido al inicio de 2020

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Aunque a los ciudadanos no
Aunque a los ciudadanos no se les puede multar, la Sedema los invita a que denuncien a aquellos negocios que no cumplan con la ley que prohíbe el uso de bolsas de plástico a partir de 2020 (Foto: Infobae)

A partir del 1 de enero de 2020 las bolsas de plástico estarán prohibidas, ello con el objetivo de generar conciencia sobre el daño que ocasionan al ambiente y en los ecosistemas cuando éstas se acumulan.

La titular de la secretaría del medio ambiente (Sedema), Marina Robles comentó recientemente que tan sólo en la ciudad de México cada familia desecha a lo largo de un año un aproximado de 650 bolsas de plástico, cantidad que ha de multiplicarse por 2.5 millones de familias.

Para incentivar la medida, el gobierno de la Ciudad de México ha realizado acuerdos con las diferentes cadenas de supermercado, así como con tiendas departamentales y tiendas de conveniencia a fin de que de manera voluntaria dejen de distribuir bolsas de plástico.

En tanto que, también se planea que para que la medida no se vuelva un problema ni para los negocios ni para los clientes que los visitan, el gobierno de la ciudad ha promovido también entre los mismos que den como opción otro tipo de materiales, que además tengan un uso más prolongado.

Marina Robles García, secretaria del
Marina Robles García, secretaria del Medio Ambiente señala la importancia de dejar de usar bolsas de plástico en la Ciudad de México (Foto: Moisés Pablo/ Cuartoscuro)

La funcionaria de la Sedema subrayó que la medida no aplica a la ciudadanía, por lo que al estar libre de sanciones podrán denunciar en la Dirección General de Evaluación de Impacto y Regulación Ambiental de la Sedema e incluso en el Instituto de Verificación Administrativa (Invea) a los negocios que comercialicen, distribuyan o entreguen bolsas de plástico.

Robles García señaló que la medida para erradicar el uso de plásticos no radica en la multa como tal sino en la importancia de hacer conciencia sobre los temas ambientales y promover una sociedad dispuesta a cambiar, con valor y compromiso.

Sin embargo, las condiciones del medio que rodeará a la ciudadanía para que “sean mejores” dependerá de que no rompan las normas en relación al desecho definitvo de las bolsas de plástico, de otra manera la aplicación de la ley castigará a todo aquel negocio que no se una a las soluciones suscritas por el Gobierno.

La titular de la Sedema invitó también a la ciudadanía a encontrar y ofrecer soluciones prácticas para transportar los productos que compren en tiendas de autoservicio.

El gobierno de la ciudad
El gobierno de la ciudad de México a través de la Sedema negocia con supermercados e industria para que eviten el uso de plástico en la entrega de productos a sus clientes (Foto: Especial)

Aunque Marina Robles considera que aún no existen materiales que permitan asegurar que verdaderamente se cumplen con las normas y con la ley que protege la salud de las personas, las reformas al artículo 25 de la Ley de Residuos Sólidos es un paso en la prohibición de la comercialización, distribución y entregas de plástico al consumidor.

En perspectiva, son casi 13 mil toneladas de residuos sólidos las que se producen diariamente en la ciudad de México, de las que 123 toneladas son plástico, ello conforme a datos provistos por la organización ambientalista Greenpeace.

Será en 2020 que por fin la cruzada contra el plástico comenzará a surtir efecto en la ciudad de México a diferencia de las dos ocasiones en que la iniciativa no prosperó.

Fue en 2010 y en 2017 que la erradicación de las bolsas sólo se quedó en un intento al no materializar la idea de desmotivar su uso en 2010, además de no lograr la cristalización de la separación de residuos en 2017.

El uso promedio de una
El uso promedio de una bolsa de plástico es de 12 minutos (Foto: AP)

Con base en cálculos hechos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el aumento del plástico ha sido casi una tarea casi imposible de destruir.

Fue en la década de los años setenta que la producción de dicho material rebasó los 50 millones de toneladas, razón por la que para el año 250 se podría estar contemplando un total de mil millones de toneladas de plástico anuales si no se actúa en relación al creciente problema.

Por ello, consensuar con las empresas parece la mejor medida posible. Justamente el reto continúa en la cancha de la industria, pues el plástico ha de derivar en un producto que pueda transformarse en abono, es decir, la apuesta por los materiales biodegradables.

Por el momento el tema del reciclaje ha tenido una mejor historia, éxito, rentabilidad económica y reducción de residuos como lo ha sido con PET, que es ejemplo de lo que se puede lograr cuando la industria y los gobiernos llegan a acuerdos.

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