Luces y sombras de AMLO: el diagnóstico de Tatiana Clouthier, John Ackerman, Edgardo Buscaglia y Alejandro Solalinde

Hoy el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio un mensaje en el Zócalo para celebrar su primer año de Gobierno. En el evento hubo música y baile, e invitó con un video, que difundió por sus redes sociales, a todos aquellos que lo quisieran acompañar.

López Obrador cumplió su primer año como presidente con una popularidad que, según diversas encuestas, se aproxima al 70% de aprobación, pese a que han ocurrido eventos significativos, algunos de los cuales el propio mandatario reconoce como los más difíciles que le ha tocado enfrentar.

Infobae México conversó con algunos de los principales analistas y personajes de la política nacional para que nos dieran su balance en este primer año de la administración de López Obrador, sobre economía, migración, seguridad, equidad de género y eliminación de la violencia contra las mujeres.

Tatiana Clouthier Carrillo es uno de los personajes más notables de la Cuarta Transformación, incluso algunos ya la candidatean de manera prematura (como ella misma lo dice), para la próxima elección presidencial. La diputada por Sinaloa hace una evaluación a un año del gobierno de López Obrador, de uno de los temas coyunturales para el actual gobierno: equidad de género y cómo eliminar la violencia contra las mujeres, y la alarmante cifra de feminicidios en todo el país.

“Es la primera vez que la Cámara de Diputados tiene un grupo, o sea mejor dicho, en la Cámara de Diputados, por lo menos el grupo parlamentario de Morena tiene mitad hombres, mitad mujeres. El gabinete presidencial es un gabinete paritario. Un ejemplo: la secretaria de la Función Pública ha venido trabajando hacia abajo para poder fortalecer los órganos de control con mujeres, para fortalecer las subsecretarías y todo con un enfoque de género en donde se vayan presentando las posibilidades de fortalecer este enfoque”.

“Por otro lado tenemos también en puestos muy importantes... a la secretaria de cultura, que es uno de los trabajos más importantes que se le ha dado ahorita al trabajo social, en términos de unión de país, como la encargada de unir al país a través de la parte más linda que es la cultura. Tenemos a la secretaria de Desarrollo Social, tenemos en la Secretaría de Relaciones Exteriores a un montón de mujeres que tienen puestos importantísimos, en Washington tenemos a una mujer, en el propio Morena han entendido que los tiempos son de buscar equidad y fortalecer los trabajos en beneficio de las mujeres”, resaltó Clouthier.

“Se han logrado entender que las circunstancias han cambiado y que son momentos de tomar decisiones”.

Clouthier considera que no se trata de si el país está preparado para tener a una mujer en la presidencia, sino que es cuestión de perfiles. “Cuál ha sido el problema y a veces lo que dice es que sí está México preparado para una mujer, el tema es que ella (Margarita Zavala) no tenía el perfil y entonces queremos ya otro presidente cuando tenemos un año con López Obrador. Estamos terminando el primer año del presidente, me parece que es adelantarse a cosas".

“Qué tenemos ahorita en el presente; en el presente vamos a hacer abrir las puertas para que las mujeres puedan acceder al poder, sobre todo, yo lo pongo en este tema: cómo le vamos a hacer para que, quienes tenemos ahorita puestos de poder por llamarlo de alguna manera, hagamos lo que tengamos que hacer para que se detengan los asesinatos de mujeres en este país, yo esperaría que para finales de año estos números empiecen a cambiar y habría que ver que no hemos hecho. Y ahí lo digo de todos los ámbitos, como sociedad y como gobierno, qué no hemos hecho para que sigan matando a las mujeres”.

La diputada federal advierte la situación adversa por la que atraviesa el país, en distintos rubros, sin embrago, considera que no es imposible cambiar el rumbo. “Lo que trato de decir, es que no es imposible, hay esperanza. El país se entrega en una circunstancia súper adversa, en una situación económica, social política y de seguridad, pero el presidente de la República esta tomando las riendas”.

“También tenemos que exigir a los alcaldes, a los gobernadores, a los policías. Tenemos que ir buscando cómo le vamos a hacer como sociedad, para que estas motivaciones de delincuencia puedan ir bajando, en todos los ámbitos. Como sociedad habría que hacer todo. Un programa para que alumbremos las calles de las mujeres o a las mujeres, y cuando digo las mujeres no hablo en sentido figurado, habló también en el sentido de cómo le vamos a prender la luz para que las mujeres podamos caminar en la calle a cualquier hora tranquilas, para que podamos cuidarnos unas con otras y apoyarnos con toda la tecnología, con botones de pánico.”

“Hay una serie de cosas que tendríamos que estar haciendo, que no sé si ha hecho el gobierno: que no agarran a quien tiene que agarrar, o lo agarran y lo sueltan. Tendríamos que tener pulseras con las que se pudiera identificar, o se supiera que tú estás siendo investigado por delitos de violencia de género, y entonces ya te veo la pulsera y ya yo sé, cosas así, digo, estoy hablando en voz alta, pero entre todos nos tenemos que cuidar”, concluyó la diputada Clouthier.

John Ackerman, doctor en Derecho y en Sociología, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y director del Programa Universitario de Estudios sobre Democracia, Justicia y Sociedad (PUEDJS), de la misma casa de estudios; considera que la economía de México, en el primer año de López Obrador, va bien, sin un gran crecimiento, pero con una estabilidad firme.

“Ha sido un año de muchos aprendizajes, de muchos logros muy concretos, tanto a nivel ejecutivo, como legislativo, como judicial incluso, que luego no reconocemos. El combate a la corrupción y la austeridad, el recorte de los gastos, es una cosa fenomenal, se han ahorrado miles de millones de pesos, con la austeridad republicana que no es lo mismo que la austeridad neoliberal, que implica recortar el gasto social para pagar a los bancos, al Fondo Monetario Internacional, y la austeridad republicana que siginifica recorrtar los gastos de arriba para entregarlos a los programas sociales, esa política a funcionado muy bien”, expresó el doctor por la UNAM.

“La economía va muy bien, bueno dicen que no hay crecimiento todavía, si es importante el Producto Interno Bruto (PIB), pero tenemos una estabilidad muy firme con respecto al tipo de cambio, con respecto a la inflación, con respecto a la inversión extranjera incluso, si es cierto que el crecimiento absoluto no es grande todavía, pero esto es natural en una transición como esta”

Ackerman afirma que en general la economía mundial se ha estancado, pero en México no ha habido una crisis como en otros países; además de que el gobierno actual en realidad es pro mercado, al no favorocer monopolios y atacar la corrupción.

“Lo que no ha ocurrido es una crisis, que hasta pareciera que deseaban algunos sectores, yo creo que una vez que se den cuenta los mismos empresarios que este gobierno es pro mercado, pro crecimiento, no pro monoplio y pro corrupción, pero si está a favor del mercado, mucho más que Peña Nieto en los hechos, porque si favoreces monopolios de amigos, eso no es libre mercado; Andrés Manuel López Obrador sí está favoreciendo una verdadera competencia de desarrollo.”

También destacó las inversiones que el gobierno de López Obrador ha empezado a hacer en grandes proyectos como la refinería de Dos Bocas, el nuevo aeropuerto de Santa Lucía y el Tren Maya, además de la entrega de becas a diversos sectores sociales.

“Ya se están haciendo inversiones en grandes proyectos de infraestrucutra, Dos Bocas, el aeropuerto, el Tren Maya, el proyecto del Istmo de Tehuantepec; las becas ya están fluyendo, al principio hubo problemas burocráticos pero ya están fluyendo: la de Jóvenes Construyendo el Futuro, para las personas de la tercera edad, para personas con discapacidad, Sembrando Vida... en fin, todas las promesas que hizo López Obrador al principio se están cumpliendo, no hubo ninguna desviación de lo que el planteó”, concluyó el director del Programa de Estudios sobre Democracio, Justicia y Sociedad.

El experto en seguridad Edgardo Buscaglia, considera que López Obrador ha comenzado a hacer cosas que los gobiernos previos no hacían. Como ejemplos expone lo siguiente: “Tienen una unidad de inteligencia financiera que está desbaratando a más de 800 cuentas bancarias de siete cárteles. Algo que nunca había sucedido.”

"Tienen 135 denuncias de redes criminales de políticos y empresarios y sicarios que están siendo hoy bloqueadas por la Fiscalía General de la República. Ahí tiene un claroscuro, tiene por un lado una unidad del gobierno que está haciendo su trabajo en el área administrativa congelando dinero, denunciando, y por el otro lado un fiscal que no está abordando los casos. Entonces se nota que la voluntad política existe. Pero a 11 meses no podemos estar viendo resultados globales y completos.

Buscaglia considera que el país carece de una estrategia que abarque más que seguridad.

“México no tiene un problema de seguridad nada más, tiene un problema de delincuencia organizada de Estado que causa inseguridad y crímenes de lesa humanidad. Entonces, lo que llamamos nosotros tiene un problema de mafia de Estado, utilizando el término italiano. Hay una dimensión política de la delincuencia organizada que este gobierno ha comenzado a abordar a través de acusaciones contra, por ejemplo, Rosario Robles. Tiene una dimensión empresarial legal de la delincuencia organizada, que ha comenzado a abordar a través de acusaciones, por ejemplo, contra Collado.”

“Tiene una dimensión judicial, jueces, fiscales, policías que protegen a la delincuencia organizada, que se está comenzando a abordar, pero no se ha implementado todavía. La justicia no está acompañando al presidente. Tiene una dimensión operativa, que es el sicariato, que en México se viene atacando hace muchos años, pero solamente con detener a sicarios y a sus capos nada se puede lograr si no se abordan las dimensiones políticas, empresariales y judiciales".

“Y tiene una dimensión social de la delincuencia organizada que son los millones de niños que están cayendo en la adicción al cristal. Son los millones de niños que están siendo sujetos a una captura gradual de la delincuencia organizada en decenas de miles de pueblitos en México que no se está abordando adecuadamente”, indicó el experto en seguridad.

"Tirarle dinero al problema a través de un ataque a la pobreza, por ejemplo, no va a resolver el problema. La pobreza no es causa de la mafia, la gente pobre no es mafiosa, la pobreza en sí misma no es un factor que causa delincuencia organizada. Hay países con mucha más pobreza que no tienen crímenes de lesa humanidad, que no tienen la delincuencia organizada que tiene México, en África, en Asia. La desigualdad del ingreso causada por empresarios leales, oligopólicos, que destruyen la inversión social y buscan alianzas con la delincuencia organizada, es uno de los factores principales que causa que este problema esté fuera de control.

“Por parte del Poder Ejecutivo hay una voluntad de implementar acciones como en el caso de la fiscal anticorrupción, que no le dejan cooperar con la fiscalía anti lavado. Hay voluntad y hay acción por parte de la unidad de inteligencia financiera. Pero esas son dos islas de efectividad. Tenemos que asegurarnos que todos los eslabones del sistema, unidades de inteligencia, policías, fiscalías, jueces y sistema penitenciario, trabajen como una orquesta de cámara. Eso no se ha logrado todavía”.

“No se ha organizado el Estado. El presidente tiene que dar un manotazo en la mesa en las reuniones de gabinete y forzar esa coordinación... No estamos abordando todas las áreas. Atacar el sicariato por sí solo, el presidente tiene razón, capturar capos, capturar sicarios, jamás desmantela la delincuencia organizada porque dejas al cerebro de la delincuencia organizada, que es la dimensión política y empresarial, la dejas intacta. Ahora se está empezando a atacar la parte política y empresarial pero la fiscalía no se está moviendo”, termina el analista en seguridad.

Para el defensor de Derechos Humanos, el sacerdote Alejandro Solalinde, la estrategia en materia de migración del gobierno de López Obrador es “el lado flaco de su administración”.

“Es pésima, porque él está ponderando el aspecto de seguridad, entiendo que está trantando con pincitas el tema de Donald Trump, entonces si queremos tener un proyecto de nación hay que tratar con pincitas este tema para que no perjudique el plan de México".

“Pero yo creo que el lado flaco del gobierno de Andrés Manuel, y empezando por él, aunque sea mi amigo y lo quiero mucho, pero no sabe casi nada de migración, sabe muy poco y tienen gente operando pero son sumamente burocrátas”.

Solalinde detecta dos grandes problemas en la manera que se está abordando el tema de la migración en el actual gobierno. Uno, la infiltración del crimen organizado en el Instituto Nacional de Migración (INM), y dos, la burocrácia en el mismo organismo, que a consideración del defensor de Derechos Humanos, es el principal “elefante reumatico” del que ha dicho en múltiples ocasiones López Obrador, es el mayor obstaculo a vencer en su gobierno.

“En el Instituto Nacional de Migración tenemos dos problemas: Uno, la infiltración del crimen organizado, parece que eso lo van solucionando poco a poco, a base de militarizar el INM. Pero luego tenemos el problema también, que no se está atendiendo, lo más importante, que son los papeles de las personas migrantes, ahorita tenemos muchos desafíos y entonces los que saben, un poco abajo, a su manera saben hacerlo, tienen miedo entonces no lo hacen, y tenemos asuntos de papeles de migrantes que no han resuelto. Y eso es un error y por supuspuesto que seguiremos luchando y diciéndole, y hasta que lo hagan porque lo tienen que hacer, no es un favor, es su obligación lo marca la ley. Lo tienen que hacer”.

"Entonces cuando Andrés Manuel habla de ese elefante reumático, el principal es el instituo nacional de migración.

El padre Solalinde reconoce la voluntad política de López Obrador, porque tiene la fórmula, como él mismo lo ha dicho, del equilibrio entre seguridad y Derechos Humanos, pero “eso no lo han entendido los de abajo”, dice el sacerdote.

“Estamos de acuerdo que ahorita es una imprudencia, más con lo que pasó con lo de la familia LeBarón y la postura de Donald Trump, sería temerarío dejar pasar a los migrantes para que los cárteles los secuestraran, y no solo los narcotraficantes sino que Trump los regresara, acaba de regresar 51.000 personas que estaban en tramite para acá, ya está en proceso, entonces dejar que pasen no se puede, pero no atenderlos aquí es otra".

“Veníamos trabajando lo de las Casas del Migrante, albergues, defensores de Derechos Humanos, activistas, veníamos trabajando de una forma antes de que pasara lo de las caravanas del año pasado, todo eso se modificó, ya cambió todo, entonces nosotros debemos de aprender a acompañar a los migrantes ahora en las nuevas circusntacias que viven, en la coyontura, no bajar la guardia, pero ser propositivo, no caer en el error de personas que protestan y no proponen, es más, unirnos para decirle al Instituto Nacional de Migración cómo se han de hacer las cosas, porque ellos podrán tener operadores, pero el espíritu del servicio es otra cosa, no ha entendido lo que es la Cuarta Transformación”.

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