En medio del debate sobre si la economía mexicana se encuentra en recesión, los directivos de BBVA en México aseguraron que hay optimismo de crecimiento para el país en 2020, a pesar de las dificultades de la administración de Andrés Manuel López Obrador en sus primeros 12 meses a cargo del país.
De acuerdo con el director general de BBVA México, Eduardo Osuna, hay razones para estar “razonablemente optimistas” para el próximo año. “Vamos bastante bien en las cosas esenciales de la economía y veo con cierto optimismo el año que viene”, añadió el presidente del Consejo de administración de BBVA México, Jaime Serra Puche.
"Que de una vez por todas la inversión sí se desate, hay dos cosas que pueden influir: el programa de infraestructura que empezará a tomar ritmo y la inversión extranjera, que va a depender mucho de cómo se concluyen las negociaciones del T-MEC”, detalló Serra.
El directivo se refirió al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá que sustituirá al TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América Latina). Sin embargo, hasta ahora, sólo el gobierno mexicano ha ratificado el acuerdo, y se espera por las resoluciones de los Congresos estadounidense y canadiense.
“El hecho de que se haya hecho un esfuerzo en el plan de infraestructura es muy bueno, porque son proyectos más realistas”, concluyó Serra, que destacó que esperan un crecimiento del 1.3% en 2020.
El concepto de recesión, a debate
Más temprano este jueves, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) consideró que México no atraviesa un panorama económico adverso como han señalado estimaciones de otros organismos.
“Nosotros no creemos que México esté en recesión, ya dijimos nuestra proyección es de 0.2 por ciento, con este entorno incierto relacionado con la inversión, pero esperamos que en el 2020 haya una recuperación importante del crecimiento, porque habrá sin duda mayores inversiones en infraestructura y en el aumento del consumo, sobre todo de los hogares más pobres”, declaró la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena.
Y es que, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que se dieron a conocer a principios de semana, la economía mexicana se encuentra en recesión técnica al tener tres trimestres consecutivos a la baja.
Al presentar los resultados del Producto Interno Bruto (PIB) por componentes, el Inegi reportó que durante el tercer trimestre de este año, las Actividades Primarias (sector agricultura/ ganadería) aumentaron 3.3% y el de las Terciarias (comercio y servicios) lo hicieron en un 0.%; sin embargo, las actividades Secundarias (Industria) disminuyeron 0.1% en el trimestre julio-septiembre de este año en comparación con el trimestre anterior.
Pese al crecimiento en el sector de la agricultura y ganadería, no fue suficiente. De esta manera, la economía mexicana se encuentra en una recesión técnica.
En el pasado mes de julio, antes de conocerse los primeros datos del PIB del segundo trimestre, especialistas de JP Morgan aseguraban que México se encontraba en una recesión técnica.
"La economía ha estado débil desde hace algún tiempo, y el aproximado del PIB de mayo actual lo encamina a generar un crecimiento negativo en el segundo trimestre, lo que sería equivalente a una recesión técnica”.
Incluso el multimillonario Carlos Slim, el mexicano más rico y uno de los primeros en la lista mundial de Forbes, participó en el debate. "Lo trascendente no era si este año crecíamos 0.5, 0.4 o 0.8”, dijo, sino ser capaces de atraer la inversión financiera.
“Ya sabíamos que no habría crecimiento, entonces, se sentaron las bases con unas finanzas públicas, mucha disciplina por parte del sector público. No subió la deuda, no hay déficit fiscal, la inflación bajó, entonces, están sentadas las bases. Eso crea confianza en la inversión financiera”, señaló en una conferencia de prensa.
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