El cuerpo de bomberos de Ciudad de México tuvo que asistir este miércoles por la mañana al centro comercial Torre Manacar, ubicada al sur de la capital, para retirar un pino artificial con una altura aproximada de seis metros que se vino abajo. Un trabajador de la plaza resultó lesionado, por lo que fue trasladado a un hospital.
Los árboles de Navidad son característicos de las fiestas de fin de año y son colocados en los principales lugares públicos de las ciudades. Las plazas comerciales suelen adelantarse a las fiestas decembrinas y, a veces desde septiembre, comienzan a colocar pinos artificiales de varios metros de altura en las plantas bajas del conjunto o a un costado.
Encender de manera oficial el árbol de estos centros comerciales llega a ser un acontecimiento, los visitantes se reúnen alrededor para ver las luces y los locatarios salen de sus tiendas para anunciar ofertas o dar publicidad a sus productos. Pero pocas veces un decorativo navideño da de qué hablar antes de su inauguración.
De acuerdo con los testigos, la estructura de metal donde estaba colocado el árbol se desplomó. El trabajador lesionado se encontraba en la base colocando el pino decorativo cuando se vino abajo. La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos de la capital informó que la persona fue valorada y trasladada en ambulancia particular para continuar recibiendo atención médica.
El personal de la alcaldía Benito Juárez, donde ocurrió el accidente, sería la encargada de dar seguimiento a los hechos y para confirmar que la colocación del árbol navideño no representa un riesgo para los visitantes a esa plaza comercial.
El incidente ocurrió cerca de las 9:40 horas, de acuerdo con los reportes oficiales que coinciden con la versión de usuarios en redes sociales quienes se encontraban en el lugar cuando el árbol cayó. Estaban colocando el decorativo en uno de los pasillos centrales del centro comercial, que se ubica sobre avenida Insurgentes a la altura de Río Mixcoac, en la colonia Insurgente Mixcoac.
Los trabajadores estaban haciendo las labores de colocación del pino en uno de los pisos de la plaza, inaugurada en julio de 2017. Además de la persona trasladada a un hospital, el accidente dejó daños materiales.
En esta ocasión el incidente fue ocasionado por un error humano, sin embargo anteriormente se han caído otros árboles navideños de gran tamaño por las condiciones climatológicas. Así ocurrió en 2015, cuando un pino cedió ante las fuertes ráfagas de viento en la Sierra Norte de Puebla.
El árbol se encontraba en el centro de Chignahuapan, Puebla, un municipio conocido por su producción de esferas navideñas. Los medios locales informaron que el pino medía 56 metros de altura y 12 metros de diámetro, además había sido vestido con 110,000 luces.
Su caída se registró cerca de la Parroquia de Santiago Apóstol, una iglesia del siglo XVI considerada ejemplo de la arquitectura franciscana, pero no le hizo daño. Dos mujeres, una adolescente de 15 años y una adulta de 36, tuvieron una crisis nerviosa tras el accidente, necesitaron ser trasladadas a un hospital del municipio.
Una tercera mujer de 38 años, resultó con una fractura expuesta de tibia, un moretón en el muslo derecho, golpes en la cabeza y otros malestares en diversas partes del cuerpo. También fue trasladada a una unidad de servicios médicos para su atención.
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