El narco en México ha emprendido una lucha encarnizada por el control de los territorios. Para ganarla se ha forrado de armamento de alto poder.
Los últimos ataques en el país, evidencian la capacidad de fuego de los cárteles que han sumido a ciertas zonas del país en ocasionales escenarios de guerra.
En Tamaulipas —que desde hace tiempo busca frenar el tráfico de armas por aduanas— las fuerzas armadas han asegurado fusiles tácticos automáticos o de asalto AR15, M16, AK47, Galil, así como pistolas calibre 9.49 y 45 mm.
Ninguna de estas armas ha sido fabricada en México. De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional, la mayoría proviene de armerías en Arizona y Texas, Estados Unidos, y el destino de este mercado son bandas de la delincuencia organizada.
Durante una operación contra el Cártel del Noreste, las autoridades confiscaron equipo táctico, vehículos blindados, y ametralladoras.
Según las características, los fusiles utilizados por el narco, son de uso especial para el Ejército por su alta capacidad de fuego.
Por ejemplo, el AR-15 tiene suficiencia para disparar varias balas a gran velocidad, con ronda de 10, 30 o incluso hasta 100 proyectiles sin tener que recargar el arma.
El alcance de bala oscila entre los 400 y 600 metros y son armas que suelen verse en competencias de tiro o en actividades de caza.
Los chalecos antibalas que utilizan los agentes de la policía en México, no protegen de forma total contra los proyectiles.
El veterano fusil ruso de asalto AK-47 no encuentra rival. El arma larga supera, incluso, al M16, que fue la ametralladora estándar de la Guerra de Vietnam (1955-1975).
La producción del también llamado “cuerno de chivo” se remonta a 1974. Sus balas tienen un calibre de 5.45 mm y su alcance máximo es de 1.400 metros.
El Galil es otro de los fusiles de asalto estándar usado por los narcos del Cártel del Noreste, que tiene un alcance efectivo de 800 a 1,100 metros y un calibre de 5,56 y 7.62 mm. La resistencia de dicha arma ha sido probada por las Fuerzas Militares de Colombia.
De acuerdo con las fuerzas especiales, en Tamaulipas los grupos criminales utilizan pistolas de calibre .38 súper o 9 mm, revolver calibre .38 especial, así como fusil semiautomático calibre .223 o equivalente, subametralladora calibre 9mm, rifle para tiro de precisión, escopeta calibre 12 y lanzagranadas.
El pasado septiembre, las autoridades de la entidad fronteriza señalaron que se decomisaron 15 armas largas y equipo táctico a sicarios de La Tropa del Infierno.
Pero la confiscación de arsenal continuó hasta el pasado viernes, cuando militares abatieron a seis presuntos criminales, quienes portaban uniformes tipo militar y viajaban en un convoy de camionetas armadas.
El grupo criminal de Tamaulipas ha asentado un manual para enfrentar posibles operativos del gobierno y evitar la detención de sus líderes.
De hecho, el ejemplo ha seguir del CDN es la actuación del Cártel de Sinaloa para lograr la liberación de Ovidio Guzmán López, “El Ratón”, en Culiacán.
El Cártel del Noreste es conocido también por utilizar las llamadas “camionetas monstruo”, que son una especie de tanquetas de guerra con las que enfrentan a sus amigos y a las autoridades en operativos.
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