A un mes de la liberación de Ovidio Guzmán, cientos de militares desfilaron por Culiacán

Unos 800 elementos de la Sedena marcharon por las mismas calles de Sinaloa donde hace cuatro semanas se vivieron horas de terror, angustia y dramatismo tras la captura y posterior liberación de uno de los hijos de “El Chapo” Guzmán

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La breve marcha de los soldados pasó por las calles de la capital de Sinaloa (VIdeo: Televisión del Pacífico)

A casi un mes del asedio a Culiacán donde fuerzas federales capturaron a Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, y posteriormente lo liberaron para evitar “la pérdida de vidas humanas”, y que provocó una fuerte movilización de integrantes del Cártel de Sinaloa, elementos del Ejército mexicano marcharon por las calles de la capital de Sinaloa.

Fueron 747 elementos de tropa los que marcharon por las calles de la ciudad, que hace apenas cuatro semanas se encontraba en un estado de sitio, provocado por el grupo delincuencial que intentaba rescatar a Guzmán López.

Tras una jornada, la del jueves 17 de octubre, dramática e intensa, donde la ciudadanía tuvo que abandonar las calles y refugiarse en cualquier casa o establecimiento para evitar las balaceras, el gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador decidió liberar a uno de los hijos de El Chapo para evitar que murieran más personas.

(Foto: Gobierno de Culiacán)
(Foto: Gobierno de Culiacán)

Sin embargo, el saldo no fue blanco: en total, aquel día murieron ocho personas -un civil, un agente de la Guardia Nacional, un interno y cinco agresores- y 16 heridos. Guzmán López quedó el libertad y los integrantes del Cártel de Sinaloa retiraron los bloqueos que habían montado en las entradas y salidas de la urbe para evitar el traslado de Ovidio, sobre quien pesa una orden de extradición del gobierno de Estados Unidos.

La ciudad, por su parte, quedó marcada después de horas de terror. En videos difundidos en redes sociales sobre los peores momentos del sitio a la ciudad, se pueden observar familias y menores refugiados en tiendas comerciales y algunos que se encontraron en medio del fuego cruzado esperando a que los disparos cesaran para poder ponerse a salvo.

En las horas posteriores a uno de los momentos más críticos del gobierno de López Obrador, por la falta de respuestas e información, además de la liberación de Guzmán López, cientos de elementos de las Fuerzas Especiales de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), arribaron a la capital sinaloense “para reforzar la seguridad”.

Hace cuatro semanas, Culiacán vivió
Hace cuatro semanas, Culiacán vivió horas de pánico (Foto: AFP)

El desfile de este jueves se realizó como actividad previa a la exposición “La Gran Fuerza de México”, cuyo propósito es el de “estrechar el acercamiento de la ciudadanía con las fuerzas militares, y por ello, familias enteras podrán conocer más acerca del Ejército Mexicano, además ver aeronaves, vehículos y equipo táctico que utiliza la milicia en sus operativos”.

Además, sirvió como demostración de que la situación que se vivió el mes pasado no volverá a repetirse. Pero los críticos señalaron que las fuerzas de la Sedena, la Guardia Nacional y otras instituciones llegaron muy tarde a Culiacán.

Tras el desfile, que de acuerdo con medios locales duró menos de media hora, el gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz, anunció que había acordado con el titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval, que los elementos que fueron enviados a Culiacán hace un par de semanas “se queden para reforzar la vigilancia este fin de año”.

(Foto: Gobierno de Culiacán)
(Foto: Gobierno de Culiacán)

“Acabo de hablar con el secretario de la Defensa Nacional para pedirle eso, que se mantenga, que se queden y no sólo eso, incluso nos van a reforzar para algunas zonas. Diciembre es un mes de mucho movimiento económico, los aguinaldos, la gente gasta, compra, tenemos que apoyar mucho a los comercios para evitar lo más que se pueda los robos”, explicó Ordaz.

El gobernador del estado presenció el evento desde un balcón de la presidencia municipal de Culiacán, acompañado por el comandante de la Tercera Región Militar, general de División, Carlos Ramón Carrillo del Villar; y del comandante de la Novena Zona Militar, general de Brigada, Maximiliano Cruz Ramos; así como el secretario del Ayuntamiento, Othón Herrera y Cairo, en representación del alcalde Jesús Estrada Ferreiro, entre otros invitados especiales.

En el desfile participaron, además de los más de 700 elementos de tropa, dos jefes militares, 42 oficiales y 10 banderas de guerra, así como varios vehículos especiales: un Humvee con obucero (cañón), seis vehículos blindados, 12 canófilos, 12 Cheyennes y tres Sandcats, entre otros.

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