A sus ocho años, el sueño más grande de Diana Victoria González Barrera, futbolista del Club América femenil, era que en México existiera una liga de fútbol profesional para las mujeres igual a la varonil. Hoy en día, la Liga MX Femenil es una realidad y si bien aún falta mucho camino para llegar a las mismas condiciones, ella fue una de las responsables para que se le diera visibilidad al torneo, además de ser la artífice del primer campeonato de su equipo.
La madrugada de este sábado, el Club América informó sobre el fallecimiento de la futbolista, quien se había presentado al entrenamiento del viernes de cara al clásico joven contra Cruz Azul. La causa de su muerte, según la prensa deportiva local, fue una descompensación de glucosa, provocada por la diabetes.
En una entrevista realizada por los responsables de la propia Liga MX Femenil después del campeonato que América consiguió en el Apertura 2018, Diana platicó acerca de sus objetivos, sus ilusiones, el crecimiento personal y futbolístico, sus esfuerzos para mantenerse, así como las personas que le inspiraron para avanzar en su carrera profesional.
Al platicar de sus metas, el semblante y gestos de Diana eran los de una persona determinada: “Desde que tenía en mi mente como objetivo jugar en un equipo de la liga, siempre lo dije, y lo sostengo, quise estar en un equipo ganador”.
La frase podría venir de cualquier futbolista, sin embargo, en la boca de González Barrera cobraba mucho sentido, pues ella y sus dos goles contra Tigres fueron los responsables del primer campeonato en la historia del Club América Femenil.
Si bien su figura fue fundamental para tal victoria, la forma en que veía al fútbol era sumamente noble, pues siempre destacaba el juego en equipo sobre las capacidades individuales. Para ella, los partidos se convertían en una oportunidad para que todas las integrantes, cada una desde su posición, destacaran en favor del conjunto.
En el desarrollo de su carrera profesional, Diana González siempre destacó a un par de personas. Uno de ellos fue el ex futbolista, y ahora entrenador del Club América, Leonardo Cuéllar, pues además de ser un elemento de mucha importancia en la historia del fútbol femenil en México, para Diana también era alguien en donde podía encontrar apoyo.
“Siempre nos respalda de una manera impresionante. Da mucha confianza voltear a la banca y ver a nuestro cuerpo técnico y saber que de una u otra manera ellos tienen la estrategia, saben cómo nos vamos a parar, qué es lo que vamos a hacer, qué es en lo que no hay que caer y Leo, sin duda, es la piedra angular de este proyecto”, declaró.
La otra persona que resultó vital para el desarrollo de sus ilusiones en el mundo deportivo fue la futbolista y referente de la selección mexicana femenil, Mónica Vergara, con quien llegó a compartir la cancha.
“La veía y decía ‘ojalá algún día pueda jugar como ella’. De verdad, porque es jugadora inteligente, líder, con un manejo de emociones impresionante, con un toque de balón que le he visto a pocas personas y ella también me motivó a jugar de contención”, relató.
Desde el primer torneo que se jugó en 2017, la afición mostró mucho interés en el fútbol femenil. La idea de que nadie vería los partidos se cayó, pues la gente se volcaba a los estadios e incluso en México se llegó a romper un récord mundial de asistencia para ver un partido de esta categoría.
Sobre este tema, la jugadora destacó que la aceptación por parte de la afición le parecía algo positivo: “A mí me pone muy contenta saber que prenden la televisión para vernos jugar, que de pronto recibas mensajes de 'hey, te vi en la tele y jugaste muy bien’ o ‘regálame un autógrafo’”.
A sus ocho años, Diana soñó con un deporte igualitario para las mujeres. Aunque murió a los 26 años, sus goles fueron fundamentales para sentar las bases del fútbol femenil en México: “Es una cosa muy positiva lo que nos está pasando y esperamos que esto siga creciendo, que no se quede ahí, que sigamos cruzando fronteras”.
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