El general Gallardo reclamó al gobierno que ponga en peligro al responsable del operativo contra Ovidio Guzmán y a su familia

Ayer por la mañana, el secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, dio a conocer el nombre del coronel que estuvo detrás del operativo fallido para capturar Ovidio Guzmán López, a petición del presidente Andrés Manuel López Obrador; sin embargo, la decisión ha sido criticada por el riesgo que puede representar para la vida del militar y sus familiares.

En entrevista con Infobae México, el general José Francisco Gallardo Rodríguez reveló que el haber dado el nombre del responsable del operativo para detener al Chapito, es un error, pues pone en riesgo al coronel Juan José Verde Montes.

“Aquí el asunto es que no debe dar nombres, porque sino, pone en riesgo a las personas que están actuando ahí, lo pone en riesgo a él y a su familia también”.

Al preguntarle su opinión acerca de que Andrés Manuel López Obrador pareciera culpar a las Fuerzas Armadas del fallido operativo en Culiacán, el general Gallardo explicó que en México “no se mueve ni el pétalo de una rosa sin la autorización del Presidente”.

El también profesor universitario y quien labora actualmente en el Senado, aseguró que el Ejército actuó de esa manera porque hubo una orden superior, ya que los militares obedecen siempre. Añadió que incluso la ley militar es muy clara, porque dice que los superiores no se pueden eximir de la responsabilidad de la actuación de las tropas a su mando.

“Entonces sí puede decir lo que quiera, pero en los términos jurídicos, políticos y legales que existen en México, el responsable es el que da la orden. Toda la estructura, la línea de mando que tiene que ver con el Ejército, pues provienen de una orden presidencial” .

En ese sentido, un ejemplo del peligro que representaría esta situación para el coronel Verde Montes sucedió hace 10 años, cuando la Secretaría de la Marina revelara que Melquisedec Angulo Córdova había sido uno de los marinos que participara en el operativo donde fue abatido Arturo Beltrán Leyva, líder del Cártel de los Beltrán Leyva.

El nombre del marino se dio a conocer porque él fue el único que murió durante el operativo realizado en Cuernavaca, en diciembre de 2009, donde se pretendía la detención de Beltrán Leyva. Pero eso no fue todo, pues también se mencionó el lugar en donde se llevaría a cabo su sepelio para rendirle honores.

A causa del fallecimiento de su hijo, Irma Córdova, su madre, recibiría una bandera de México y una pensión vitacilia, pero la noche después del entierro y homenaje a Melquisedec, un grupo armado entró a la casa de la familia del marino en Tabasco y la asesinó junto a dos de sus hermanos y a una de sus tías.

Angulo Córdova murió a los 30 años, tenía el rango de tercer maestre de las Fuerzas Armadas y era parte de una unidad de elite que combatía a los grupos criminales. El entonces presidente, Felipe Calderón, condenó el ataque públicamente: “Es un acto cobarde y deleznable”.

Según las investigaciones, el responsable del asesinato de la familia de Melquisedec Angulo Córdova fue Santos Ramírez Morales, "El santo sapo, jefe de Los Zetas en Tabasco y quien un par de años más tarde fue detenido por elementos del Ejército Nacional.

En el caso del intento fallido, para detener al Chapito el pasado 17 de octubre en Culiacán, Sinaloa, Gallardo Rodríguez aseguró que el operativo estuvo planeado desde la Secretaría Defensa Nacional; sin embargo, existe una desarticulación de todas las fuerzas armadas que intervinieron.

“Lo que veo es que hay una desarticulación de todas las fuerzas, es decir, no hubo una unión de mando, una línea de mando única (quién articuló, quién cálculo, cómo se supervisó). El que va a tener la película completa de lo que está pasando y con todos los actores, eso falló, por eso cuando se hace el operativo vemos que hay una desarticulación”.

Durante la mañanera de ayer, del presidente Andrés Manuel López Obrador, se dijo que el comandante de la zona militar había salido con 30 elementos en busca de realizar la operación de detención.

Sin embargo, Gallardo opinó que “el comandante de la zona no tiene porque hacer operaciones, él es el responsable del cumplimiento de la operación, por lo tanto no puede empeñarse, sino pone en riesgo todo. Tiene que ver que está pasando incluyendo los estatales”.

Asimismo, destacó que sí hay inconformidad por parte de las Fuerzas Armadas, ya que fueron exhibidos en asuntos que no son de su competencia. “El Ejército no son policías, es por ello que se cae el asunto este de la operación”.

El general no quiso dar nombres, pero reiteró que hay evidencia de que Fuerzas de Seguridad de Estados Unidos participaron en el fallido operativo.

“No hay información de los nombres, por ello surgen todas estas dudas. Siempre negaron que casualmente llegaron a esa casa, y en los videos se ve que no es casual, como andan todos encapuchados ya no sabe uno ni quienes participaron”.

Finalmente insistió en que tras lo que paso, se debe planear mejor y revisar todos los protocolos de seguridad pública.

“Yo creo que, debe haber un replantamiento de todo el sistema de seguridad y de defensa que están implementando desde la cuarta transformación. Ya se dieron cuenta de que no está funcionando, entonces hay que sentarse y retomar desde cero”.

Tras el revuelo que causó revelar el nombre del coronel a cargo del operativo, esta mañana, el secretario de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval ratificó que Verder Montes opera desde la Ciudad de México. por lo que fue otro militar quien se hizo cargo de la operación en Sinaloa y su nombre no será revelado.

La dureza de las críticas a López Obrador

“Él es el jefe del Grupo de Análisis de Información de Narcotráfico (GAIN) a nivel nacional, es el responsable de la obtención de la información”, fueron las palabras de Sandoval en referencia al cargo que ocupó Verde Montes durante el operativo para capturar a Ovidio Guzmán y las cuales han sido duramente criticadas por diversos medios.

El mismo Felipe Calderón hizo un señalamiento a través de su cuenta de Twitter: “El comandante del Gain, cuyo nombre fue irresponsablemente revelado esta mañana, debe ser protegido de inmediato, junto con toda su familia. Incluso valórese el nombrarlo agregado militar a otro país. Lo que pase a él y a los suyos es ya responsabilidad de quien ordenó exponerlo”.

Sobre esto, Catalina Pérez Correa, investigadora de la División de Estudios Jurídicos del CIDE, considera que “hay un riesgo en dar los nombres. Es verdad que él no estaba en campo, pero dar un nombre sí es peligroso para él y sus familiares, dado el nivel de inseguridad que han en México y el nivel de reacción de los cárteles”, dijo en una entrevista realizada por El País.

En redes sociales, los defensores de López Obrador han señalado que los reporteros fueron quienes querían conocer a los responsables del operativo, pero sobre esto, la especialista acota que las preguntas de los reporteros no estaban dirigidas a saber el nombre del responsable, sino hacia tratar de comprender cómo se había roto la cadena de mando.

“Entender si un operativo de este tipo se pudo poner en marcha sin el conocimiento de los de arriba. Porque el nombre de él no lo resuelve. Hay un desafase entre lo que se pide y lo que se da”, explicó para el diario español.

Por otra parte, el secretario de seguridad, Alfonso Durazo, quien ha acudido a la Cámara de Diputados para dar explicaciones por el operativo, también ha sido uno de los personajes más criticados por la incoherencia de sus declaraciones respecto al caso.

¿Quién es el general Gallardo?

José Francisco Gallardo Rodríguez es un militar y profesor universitario. Ingresó al Ejército como cadete numerario el 14 de febrero de 1963.

Fue encarcelado el 9 de noviembre de 1993 por haber publicado extractos de su tesis de maestría en la revista mexicana Forum. El artículo hacía un llamado en pro de la creación de un ombudsman para las fuerzas armadas mexicanas que investigan informes de violaciones a los derechos humanos de soldados y civiles por miembros de dichas fuerzas.

La Amnistía Internacional lo catalogó como preso de conciencia el 5 de mayo de 1997 y solicitó al gobierno de México que fuera inmediatamente liberado.

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