Temido y apegado a la santería, así es el consejero espiritual de "El Lunares, jefe de la organización criminal “La Unión Tepito”, quien escapó de las autoridades durante un operativo realizado el 22 de octubre por parte de la policía capitalina y la Marina mexicana.
El santero, de quien se desconoce su nombre y sólo se le identifica como “El Niño Problema” está implicado en la venta de armas, en la invasión y expropiación de predios y en amenazas a los vecinos de la zona. También se le relaciona con la entrega de sobornos a elementos y mandos de la elementos de seguridad en la Ciudad de México que protegen a los integrantes de “La Unión
Gracias a trabajos de inteligencia, realizados por la Secretaria de Seguridad Ciudadana (SSC) y con ayuda de las cámaras de video vigilancia de la zona, se logró captar al santero mientras conversaba en distintas ocasiones con elemento de la policía de esta ciudad, asignados al sector Morelos.
En uno de los videos, se puede observar al “Niño” mientras se abraza y conversa con Juan Tomás “R”, comandante de la Policía de investigación (PDI) de la zona de Tepito, este funcionario fue dado de baja la semana pasada por orden directa del jefe de la (PDI).
En otras de las grabaciones, se le puede observar mientras platica con elementos de la SSC que se encuentran a bordo de una camioneta PickUp de la institución, en un tercer video se le observa mientras se reúne con el mismo “Lunares”.
Al “Lunares” también se le puedo observar mientras charlaba con elementos de la policía preventiva del sector Morelos y del Grupo de Fuerza de Tarea, una unidad de élite.
Al conocer esta información, que los miembros de “La Unión” sostenían una estrecha relación con elementos y mandos de la SSC, el Secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, cerró la investigación a dos grupos especiales y adelantó los operativos que se tenían planeados contra esta organización.
Esta situación, derivó en el cateó de cuatro predios y un terreno en el barrio de Tepito, y se logró establecer el modus operandi del “Niño Problema”.
Versiones señalan que acompañaba a él “Lunares” a las viviendas de las cuales se quería apoderar y era el encargado de ofrecer una suma de dinero por el inmueble, previo a esto amenazaba de muerte a los ocupantes si rechazaban el trato.
De esta manera, fue como este grupo criminal se apodero de la mayoría de los departamentos de Peralvillo 33 y de una accesoria, además de otros ubicados en las calles de Jesús Carranza y Matamoros, al centro de la capital.
Otra integrante de “La Unión” es una mujer identificada como “La Chofis”, quién se encarga de acompañar al líder criminal a revisar las propiedades que posteriormente serán “compradas”.
El “Niño Problema” también es considerado como el padrino de “El Lunares”, ya que se presume que ambos practican en culto afrocubano.
Al “Santero”, se le puede reconocer porque todos los días viste totalmente de blanco con una gorra del mismo color, siendo una característica de las personas profesan dichas creencias.
Esta información coincide, con el altar encontrado en el cateo antes mencionado, en el cual se podían observar distintos elementos como vasijas con restos humanos y de animales, imágenes de santos y estatuas alusivas a demonios objetos que indican que ahí se realizaban rituales propios de esta religión.
Se dice que los individuos, de este grupo criminal practicaban ceremonias en donde incluían sacrificios y adoraciones a imágenes diabólicas con los cuales pedían por la buena fortuna para su empresa delictiva, incluso se dice que buscaban volverse inmunes a las balas.
Con esto se demuestra, los vínculos que sostienen los integrantes de “La Unión Tepito” con elementos y mandos de la SSC, además del fuerte sincretismo que rodea a dicha organización criminal plagada de violencia, extorciones, asesinatos y secuestros.
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