Por lo menos tres factores han afectado las finanzas de nueve universidades de México que se encuentran en crisis y que en los próximos meses podrían dejarle de pagar a sus empleados por falta de recursos.
Según un análisis de la Cámara de Diputados, consultado por el medio Animal Político, las Universidades Autónomas de Chiapas, Estado de México, Benito Juárez de Oaxaca, Morelos, Nayarit, Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Sinaloa, Tabasco y Zacatecas, tienen problemas financieros causados por poco presupuesto y mala administración de recursos que data de años atrás.
Discrepancia entre presupuesto y matrícula
Del 2000 al 2019, el presupuesto a las universidades públicas aumentó 75,2%, mientras que la matrícula creció 122,7%. El dinero otorgado no ha cubierto en totalidad los gastos del número de alumnos que ingresa a los planteles, indican datos de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES).
Tan sólo del 2012 al 2018, el aumento en el número de estudiantes fue de 30,4%, entretanto, el presupuesto incrementó sólo 2,7%.
Esta problemática también se reflejó en el crecimiento de la plantilla de trabajadores. Las instituciones manifestaron que, debido al incremento de alumnos, estuvieron obligados durante años a contratar más personal. Sin embargo, los nuevos puestos no fueron reconocidos por la Secretaría de Educación Pública (SEP) ni por la Secretaría de Hacienda (SHCP) por lo que no le dieron presupuesto a las universidades para sostener la plantilla laboral.
Quienes principalmente han padecido esta traba son la Universidad Autónoma del estado de Nayarit, Sinaloa y Zacatecas, informó Animal Político.
Más beneficios a trabajadores, mismo presupuesto
La falta de reconocimiento de las autoridades a los ajustes que realizan las escuelas, también se manifestó en las prestaciones a los trabajadores. Las instituciones aumentaron los beneficios a los sindicalizados sin que estos estuvieran contemplados en el modelo de financiamiento de las dependencias. Por lo tanto, no hubo recursos extras para apoyar los nuevos beneficios.
Este es el principal problema en las finanzas de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos y la de Tabasco. En el mismo sentido, las pensiones y jubilaciones han afectado el flujo de dinero en las escuelas, sobretodo en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, informó Animal Político.
Corrupción en las instituciones
Algunas de las universidades con crisis financieras estuvieron involucradas en un esquema de triangulación de recursos. El sexenio pasado realizaron convenios con secretarías de Estado para brindar servicios. Las instituciones subcontrataron compañías para llevar a cabo el trabajo, pero después se dio a conocer que muchos de los negocios eran fantasma. Al esquema fraudulento se le nombró La Estafa Maestra.
La Universidad Autónoma del Estado de Morelos firmó cinco contratos por 1.140.000.000 de pesos con la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), cuando Rosario Robles era titular, y con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sagarpa). La Universidad Autónoma del Estado de México lo hizo por 1.440.000.000 de pesos con Sedesol. La de Tabasco realizó convenios por 580.000.000 de pesos con Pemex, y la universidad de Zacatecas con 220.000.000 con Sagarpa.
Consecuencia: deudas
La falta de recursos provocó que las universidades tuvieran que “pedir prestado” a bancos. Sin embargo, no les fue posible pagar por lo que los intereses les generaron recargos adicionales.
También impidió que pagaran obligaciones como impuestos IVA e ISR y seguridad social lo que además originó multas. Asimismo, hubo menos subsidio federal.
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