“Los militares están cansados de ofrecer la otra mejilla" en situaciones de riesgo: advirtieron analistas a AMLO

Los uniformados han mostrado indicios de que la estrategia propuesta por el presidente López Obrador de no responder a las agresiones podría cambiar

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López Obrador propuso una política que se resume en la frase "abrazos, no balazos" (Foto: Especial)
López Obrador propuso una política que se resume en la frase "abrazos, no balazos" (Foto: Especial)

El Ejército mexicano, y a su vez la Guardia Nacional, han tolerado en los últimos meses las agresiones de diferentes sectores de la población, a pedido de su comandante en jefe: el presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, la actitud de los uniformados podría cambiar.

De acuerdo con la agencia AP, “hay indicios de que los militares se están cansando de ofrecer la otra mejilla”. “Reaparece el temor de que vuelvan los abusos de los derechos humanos como los del 2014, cuando soldados ejecutaron al menos una docena de sospechosos de pertenecer a bandas delictivas que se habían entregado”, en referencia a los hechos ocurridos en la localidad de Tlatlaya en aquel año.

Y es que las escenas de agresiones y sometimiento a miembros del Ejército en diferentes comunidades del país se han vuelto habituales y se han repetido en varias partes del país: ciudadanos han arremetido contra militares y policías, quienes sólo se repliegan por lo que, incluso, han resultado heridos. En lo que va del año, se han reportado al menos una docena de agresiones, aunque algunos elevan la cifra por encima de los 100 sucesos.

Las agresiones han subido de tono, ya que los cárteles usan a la gente como "escudo humano" (Foto: Archivo)
Las agresiones han subido de tono, ya que los cárteles usan a la gente como "escudo humano" (Foto: Archivo)

Apenas el jueves pasado, tres elementos del Ejército fallecieron después de la emboscada de un “grupo indeterminado de personas” mientras los uniformados realizaban un reconocimiento terrestre en un municipio de Guerrero, en el suroeste de México, informó la Secretaría de la Defensa Nacional.

La localidad, en el centro de Guerrero y a unos 35 kilómetros de Chilpancingo, la capital, se ubica en la zona de la sierra de dicha entidad, donde abundan los plantíos de marihuana y amapola, debido a que es una de las zonas de más difícil acceso para las fuerzas del orden.

El domingo pasado, un miembro de la Guardia Nacional murió dos días después de haber sido herido con una arma de fuego en el municipio de Bochil, en el estado de Chiapas.

La Guardia Nacional también ha sufrido agresiones (Foto: Archivo)
La Guardia Nacional también ha sufrido agresiones (Foto: Archivo)

El hombre había sido trasladado a un hospital de Tuxtla Gutiérrez, capital del estado, ubicado en el sur de México, para ser atendido. La comunidad donde fue agredido se encuentra unos 36 kilómetros al noreste de la principal ciudad de la entidad. Sin embargo, nada pudieron hacer para evitar su fallecimiento.

El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador ha insistido una y otra vez que el Ejército es “pueblo uniformado” y no debe atacar a la población. “Jamás utilizaré la fuerza para resolver conflictos, diferencias, protestas sociales, ese es el juramento que nosotros hacemos: no hacer uso de la fuerza, no reprimir al pueblo”, aseguró en su momento.

“El interrogante es cuánto tiempo el ejército mantendrá una actitud pasiva en medio de una escalada de provocaciones y homicidios”, señaló AP. La Sedena, por su parte, ya advirtió a principios de septiembre que tanto el Ejército como la Guardia Nacional “contestará las agresiones en legítima defensa”.

Las FFAA han sido cada vez más agresiones en los últimos meses (Foto: Saúl López/ Cuartoscuro)
Las FFAA han sido cada vez más agresiones en los últimos meses (Foto: Saúl López/ Cuartoscuro)

“Ante la ocurrencia de un delito, y en los casos en que el personal militar sea objeto de una agresión, se actuará conforme a los principios del Uso de la fuerza y su gradualidad, para proteger la vida e integridad física de los miembros de las Fuerzas Armadas”, explicaron.

Sin embargo, el mandatario mexicano, Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, matizó la indicación en los días posteriores. “La recomendación es que no se abuse de la fuerza, que se actúe con respeto a los derechos humanos, que no suceda lo de antes, que había masacres, eso está prohibido, no se tolera en el gobierno esa actitud”, dijo en una de sus ruedas de prensa matutinas.

Para los expertos, hay dos casos que indican un cambio en la actitud pasiva que hasta ahora caracterizó las respuestas de las Fuerzas Armadas fueron aquellos ocurridos a principios de septiembre, uno en el estado de Querétaro y otro en Puebla.

La Sedena advirtió que responderán "en legítima defensa" y con "fuerza proporcional" (Foto: Presidencia)
La Sedena advirtió que responderán "en legítima defensa" y con "fuerza proporcional" (Foto: Presidencia)

En el primero, docenas de personas se reunieron en unas vías del tren para robar a pasajeros, pero cuando elementos del Ejército patrullaban la zona, fueron recibidos con agresiones, por lo que los elementos se dedicaron a mirar mientras las personas eran saqueadas.

El cambio ocurrió cuando sonaron disparos. El Ejército señaló que no estaba claro quién los había lanzado, pero además el oficial a cargo del patrullaje disparó contra el piso. En el hecho dos civiles fueron lesionados debido a ello, pero en ningún momento se indicó que se les había disparado directamente.

El evento en Puebla, que ocurrió unas horas después, se lanzaron tiros al aire cuando, de nuevo, decenas de personas enfrentaron a soldados buscnado tomar el control de mercancía que había sido confiscada por el Ejército. En este caso, no hubo heridos, pero sí un cambio en la reacción de las autoridades.

Los militares lanzaron tiros al aire en Puebla (Foto: Captura de pantalla, Facebook)
Los militares lanzaron tiros al aire en Puebla (Foto: Captura de pantalla, Facebook)

La situación ha cambiado además porque las organizaciones delictivas usan ahora “escudos humanos”: personas que agreden a los uniformados para que estos no puedan responder con armas de fuego y tengan que hacerlo con otro tipo de estrategias.

Sin embargo, la alternativa preferida por los altos mandos no queda clara una vez que se tiene que ejecutar en las situaciones reales: el uso de la llamada “fuerza proporcional".

La Sedena, en su comunicado donde informaba que responderían a las agresiones, dijo que lo haría siempre a partir de la proporcionalidad de la respuesta, pero, de acuerdo con AP, la dependencia “no respondió a preguntas acerca de si los soldados están equipados o entrenados en el uso de fuerza no letal”.

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