José Manuel Mireles, subdelegado del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en Michoacán, se casó por el civil con un joven 39 años menor que él. La unión se llevó a cabo el sábado 28 de septiembre en un restaurante al sur de Morelia, capital de esa entidad.
En redes sociales circuló un video del momento en que Estephanía Valdés García, de 21 años, y el ex líder de las autofensas, Mireles, que este mes cumple 60 años, firman el acta de matrimonio ante el juez. Los padrinos de boda fueron el hotelero Javier Bravo Barragán y Jimena Gutiérrez Montes, así como el diputado federal de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo Cardona y su esposa, Ruth González Silva, de acuerdo con la invitación al evento que fue difundida en medio locales.
Ricardo Gallardo Cardona, del Partido Verde Ecologista Mexicano (PVEM), también fue presidente municipal de Soledad de Graciano entre 2012 y 2015. En su último año en este cargo fue detenido por supuesto desvío de recursos.
A pesar de que la invitación decía que el enlace matrimonial se iba a llevar a cabo en el Hotel CEO, la prensa local reportó que se realizó en el restaurante Camila’s, el cual estuvo custodiado y el el uso de dispositivos móviles fue limitado. Los más de 150 invitados al evento disfrutaron un menú de crema de queso, pechuga de pollo rellena, bañada en crema de pimiento con guarnición de ensalada, calabacita rellena de verduras, pastel y flan.
Valdés García y Manuel Mireles se conocieron poco después que él comenzara el movimiento de las autodefensas en Michoacán, uno de los estados más golpeados por el narcotráfico en México. Su relación comenzó en 2014 y la primera aparición pública de la joven junto al ex autodefensa fue en el documental “Cartel Land” (2015), de Matthew Heineman.
Desde entonces ella lo acompaña en eventos públicos y se encarga encarga de administrar las redes sociales del subdelegado del ISSSTE de Michoacán. La joven además es conductora de un popular programa de un canal de televisión local.
Mireles protagonizó dos comentarios misóginos a principios de septiembre que le valieron la crítica no sólo de las mujeres en México, también de los legisladores. El funcionario utilizó la palabra “piruja”, que en México se usa de manera despectiva a las sexo servidoras, para referirse a las esposas de los derechohabientes, quienes para él exigen atención médica y tratamientos para enfermedades crónicas sin pagar cuota.
Senadores de distintos partidos públicos se pronunciaron contra el lenguaje utilizado por el subdelegado del ISSSTE local. Algunos, como Antonio García Conejo, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), dijo que una disculpa no bastaba y Josefina Vazquez Mota, del Partido Acción Nacional (PAN), exigió “consecuencias graves” para el funcionario, porque la impunidad alienta estos comportamientos.
Cuatro diputadas federales de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) pidieron la separación del cargo de Mireles. Para quienes exigieron la separación del cargo, permitir que Mireles continúe en su puesto vulnera la dignidad de las mujeres y sus familias.
Días después, llamó “nalguita” a una mujer mientras contaba una anécdota en Uruapan en la que supuestamente un líder sindical intentó extorsionarlo. Debido a las críticas que recibió, Mireles pidió disculpas públicas y anunció que tomaría un taller sobre género. Ante esta respuesta, el director local del ISSSTE, Luis Ramírez, dio por cerrado el caso.