Ataques de pánico, llanto y personas desesperadas buscando a sus familiares, se hicieron presentes en La Feria de Chapultepec la tarde del 28 de septiembre luego de que un juego mecánico tuviera una falla que provocara la muerte de dos personas y dos lesionados.
Los testigos relatan que pasaban un día normal y divertido en el parque de diversiones cuando escucharon un crujido de la montaña rusa llamada Quimera. Al voltear se dieron cuenta que uno de los carros del tren que lleva a los pasajeros estaba colgando.
En los instantes después del fuerte sonido hubo confusión, gritos y caos. Una persona que grababa el juego logró capturar el momento en que el accidente sucedió, pero en las imágenes no se puede apreciar de manera tan clara lo que pasó con la atracción pues la persona que filmaba también quedó sorprendida y comenzó a correr.
Algunos medios de comunicación informaron que el vehículo del juego había chocado con un muro al dar la vuelta, y que ese impacto había provocado la muerte de los visitantes. Sin embargo, Samuel Mendoza, una de las personas que iba a bordo del juego, contó a través de su cuenta de Twitter que, contrario a lo que se decía, el carro no chocó. Sino que se salió del riel, por lo que el resto del tren lo llevó colgado hasta que este cayó sobre una caseta y las personas fallecieron.
Una vendedora del lugar respaldó la versión. Ella dijo que dos de las llantas del carro se desprendieron, y esto fue lo que provocó que saliera de las vías. También dijo que el juego tenía dos años que se encontraba en mal estado, que las piezas se movían. Ella y otros trabajadores lo reportaron a las autoridades del parque, pero no les hicieron caso.
Samuel Mendoza además se quejó por el trato que le dio el parque a las personas que iban a bordo del juego que tuvo la falla. “La seguridad del parque nos encerraron en un cuarto, nos dijeron que nos callaramos y no podíamos salir hasta que ellos nos dieran “permiso”. El parque no respondió por nada, no nos dio atención médica, sus protocolos de emergencia son nulos. Yo empecé a gritar a la gente ‘calma’ (sic)”, escribió en la red social.
Agregó que fue atendido tiempo después cuando lo dejaron salir del sitio, y fue el equipo de emergencias del gobierno quien le realizó el chequeo.
Mientras tanto, los familiares de las personas involucradas en el accidente fueron a la entrada del parque para preguntar sobre lo sucedido, pero el personal de seguridad no los dejó pasar y no brindó información.
La familia de Luis Enrique Martínez Salcedo, uno de los fallecido en el parque de diversiones tardaron más de seis horas en tener información sobre su hijo. “Estamos desesperadas, mi hija y yo no sabemos nada y a todos lados a los que hablamos nos dicen que ahí no saben nada. Su novia ya está con sus familiares y está siendo atendida, pero no sabemos dónde está mi hijo”, dijo Rosa Macedo al diario Milenio.
Ellas se enteraron de lo sucedido a través de las noticias, y sabían que su ser querido estaba ahí porque el viernes anterior el joven les había avisado, pero nunca se pusieron en contacto con ellas para darles informes.
Al mismo tiempo, Ventura Entertainment, consorcio que es dueño de La Feria de Chapultepec, dijo que desde el primer momento se le había brindado total y completo apoyo a los huéspedes afectados y que se encuentran realizando las investigaciones para brindar información precisa.
Después del accidente el Instituto de Verificación Administrativa de la Ciudad de México (INVEA) fue al sitio para inspeccionarlo y decidieron realizar suspensión de actividades como medida preventiva. Es este organismo el encargarlo de brindar los permisos a los parques de diversiones que operan en la CDMX a través de verificadores especializados.
Los requisitos para acreditarse es que ingresen una solicitud a la Dirección del Bosque de Chapultepec, apegarse a la Normatividad Interna del Bosque de Chapultepec, especificar los equipos que se utilizarán, visitas de inspección y contar con equipo médico y de seguridad, según la Sedema.
La Feria de Chapultepec obtuvo un permiso del gobierno de la Ciudad de México durante el gobierno de Miguel Ángel Mancera, para operar en la Segunda Sección de Chapultepec por 10.943.000 de pesos al año, de acuerdo a la Secretaría de Medio Ambiente. La vigencia del contrato acaba en diciembre del 2027.