Vivir del narcotráfico se ha vuelto un modo común en algunos estados de México, es por dicha razón que los jóvenes buscan estar inmersos entre los cárteles, como sucede con “La Ceci”, una mujer que presume a su organización delictiva en redes sociales.
Muestra su vida delincuencial a través de redes sociales, donde también señala que comete extorsiones, robos, secuestros y ejecuciones como halcón del Cártel de Noreste (CDN).
De acuerdo con información de redes sociales, Cecilia Treviño radica en Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde es informante de uno de los cárteles más peligrosos de México.
A través de varias imágenes que circulan en Twitter se ve a la joven con ropa militar y utilizando equipo de comunicación para estar informando al CDN sobre lo que sucede en Nuevo Laredo.
También se señala que “La Ceci” es hermana de uno de las ocho personas que fueron ejecutadas en un lugar conocido como Casa Verde.
La supuesta integrante del Cártel del Noreste, presume los lujos que obtiene con su vida como delincuente, en la que cuenta con collares de oro de la Santa Muerte y otras joyas.
Señalan que Ceci Treviño, colabora con el supuesto jefe del cártel, un ex miembro de Los Zetas, identificado como Juan Gerardo “El Huevo”.
El modo de reclutar entre los diversos grupos delincuenciales en México, se ha diversificado, desde niños hasta mujeres como en el caso de Ceci Treviño, los cárteles los consideran un blanco fácil debido a sus condiciones de pobreza y abandono de sus familia.
Hasta el 2015 cerca de 30 mil menores de edad formaban parte del crimen organizado en México, según un reporte elaborado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
De acuerdo con el reporte Violencia, niñez y crimen organizado, elaborado por la CIDH, los grupos delincuenciales aprovechan la falta de oportunidades y las acciones reducidas de diversos gobiernos para reclutar y entrenar en el uso de armas y tráfico de drogas a diversos menores.
En el caso de las mujeres, la apariencia casi infantil, además de su juventud les ayuda a pasar desapercibidas por las autoridades y los grupos rivales, como en el caso de “La Ceci” que presuntamente colabora con el Cártel de Noreste y mantienen una rivalidad con el Cártel Jalisco Nueva Generación por el control de plazas Tamaulipas.
Las mujeres han tomado protagonismo en los cárteles mexicanos
Ya no se conforman con ser esposas o hijas de los líderes que están alejadas de la violencia y ejecuciones, sino que son entrenadas por los grupo criminales e incluso forman parte de los comandos, realizando un trabajo similar al de los hombres y teniendo la misma efectividad.
Al igual que en el caso de los hombres, las mujeres son reclutadas desde pequeñas o muy jóvenes y son entrenadas, al llegar a la mayoría de edad ya son capaces de realizar ejecuciones.
“Van en autos y llevan armas largas o cortas. Van acompañadas de hombres, ellas se bajan a hacer el trabajo”, relató un sicario.
Incluso las mujeres trabajan de forma independiente, como en el caso de “Las Flacas”, un comando que estaba formado por mujeres y que operaba en el norte de México, realizando extorsiones y ejecuciones.
Uno de los casos más recientes, fue el de Esperanza “N”, detenida en julio pasado luego de haber ejecutado a dos isralíes en un restaurante en Plaza Artz, un centro comercial exclusivo en Ciudad de México, la mujer confesó ser sicaria y haber sido contratada por el CJNG.