El ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte, fue cuestionado sobre si tenía mucho dinero, a lo que aseguró no ser un hombre de riqueza, ni de lujos.
“No soy un hombre de lujos, ni de riqueza; nunca lo he sido”, dijo en una entrevista para Televisa.
Duarte comentó que siempre ha vivido en la justa medianía y que la única propiedad con la que cuenta es una casa en Córdoba, en el estado de Veracruz.
La vivienda ha pertenecido a su familia por 100 años y añadió que es su hogar donde vivió siempre y perteneció a sus abuelos.
“Fui la caja china de Enrique Peña Nieto, para ocultar los escándalos del gobierno”, agregó en una entrevista para el programa Despierta.
“Esa era una estrategia para lavarse la cara y para no acusarlos de corrupción metían a alguien a prisión. Era el gobernador priista más sacrificable”, añadió en conversación con la periodista Danielle Dithurbide desde el reclusorio Norte, donde paga su condena.
También destacó que las personas que lo acusaron de corrupción “ahora hasta se ponen pelucas”, relató en referencia a las imágenes que causaron polémica del ex presidente Enrique Peña Nieto en un restaurante de Nueva York y en compañía de su novia.
De las obras de arte localizadas en una bodega de Córdoba, Duarte subrayó que esos cuadros y demás objetos le fueron sembrados. “Todo es parte de un psicópata que gobernó Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares.
Duarte de Ochoa fue visto por última vez en México el 12 de octubre de 2016, cuando pidió licencia, pues dijo que enfrentaría a la justicia por ser acusado de actos de corrupción.
Sin embargo; ese mismo día, escapó y fue localizado y detenido hasta el 15 de abril de 2017 en Guatemala.
Según las investigaciones, el ex gobernador fue buscado durante seis meses por los delitos de lavado de dinero, delitos electorales y corrupción.
El 17 de julio de 2017 fue extraditado a México y un juez le dictó sentencia de 9 años de prisión que paga en el reclusorio Norte.
Un juez del Reclusorio Norte le dictó sentencia el 26 de septiembre de 2018 y una multa de 50 mil pesos por actividades delictivas y lavado de dinero.
El “Javidu” como le dicen en México, aseguró que durante su administración no se realizó ningún acto de corrupción y afirmó que la prueba más contundente es que ningún ex funcionario que laboró con él se encuentra preso.
Hace unos días causó revuelo porque inició una actividad de contestar mensajes por redes sociales y advirtió que lo hace a través de sus abogados que él no tiene celular.
El 23 de septiembre de este año publicó un mensaje en Twitter dirigido al ex fiscal, Jorge Winckler, a quien le dijo “ahora lo va a entender”
“En respuesta al prófugo @AbogadoWinckler: ahora va a entender a qué me refería con Paciencia, Prudencia, Verbal, Continencia, Dominio de Ciencia, Presencia o Ausencia según Conveniencia. Y le recomiendo que su patrón Yunes deje de redactar sus cartitas”, escribió Duarte.
El hecho es que redactó su respuesta, luego de que el abogado envió una carta a los medios en la que aseguró que nunca cometió ningún delito.
Winckler fue fiscal durante el gobierno de Miguel Ángel Yunes y es prófugo de la justicia por una orden de aprehensión en su contra por privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro.