Los diversos fenómenos naturales como los sismos no se pueden prevenir sin embargo estar preparados para enfrentarlos es parte de nuestra responsabilidad para disminuir los riesgos y evitar tragedias, es por ello que debemos asegurarnos que el lugar donde habitamos esté en optimas condiciones por lo que es importante saber cuáles son los principales errores de construcción y saber cómo identificar cuando una construcción está en riesgo.
Leonardo Flores Corona, jefe de Departamento de la Subdirección de Vulnerabilidad Estructural perteneciente a la dirección de Investigación del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) explicó en Infobae las prácticas incorrectas que frecuentemente hallan los ingenieros y cómo mejorar las viviendas durante su costrucción.
"Es sustancial la diferencia entre una construcción que está hecha por un experto que calculó la geometría y la calidad de los materiales y las que no lo tienen. Lamentablemente el porcentaje de construcción informal, que no tiene un diseño, es la que tiene más problemas de colapsar", dijo el ingeniero civil del CENAPRED.
"El primer problema es que no haya un diseño, existe la costumbre de que se contrata a un maestro albañil y por su experiencia construye más o menos bien, hace construcciones competentes pero no existe la certeza de qué pasará, no se sabe si será idónea. El segundo es el material de baja calidad, tal vez sea suficiente para una casa de un piso o de dos pero de más ya se corre un riesgo importante. Pero siempre será importante la participación de un experto que calcule cada material y orientación", agregó.
El laboratorio lleva 28 años realizando análisis estructurales de materiales de construcción, mampostería (procedimiento de construcción), ladrillos, varillas, cemento y varios de los estudios han logrado que se modifiquen los reglamentos de construcción de forma constante.
"En el del 2004 se agregaron detalles del estudio de mampostería, por ejemplo nos dimos cuenta que se se puede mejorar el refuerzo horizontal en las iladas de bloques (tabiques, ladrillos) al colocar alambres, es algo fácil de hacer y económico. Deben ser de acero de 3 a 6 mm, caben en la junta de mortero y deben estar bien sujetos de los castillos, ya que cuando los castillos y los ladrillos de fragmentan durante un sismo, estos alambres permiten mantener la estructura completa y fija", explicó el ingeniero quien también es profesor en la Universidad Nacional Autónoma de México.
En el laboratorio los ingenieros trabajan con gatos hidráulicos y grúas de alta tecnología que permiten simular diversos tipos de construcciones para saber hasta dónde aguantan un sismo o un huracán. Asimismo alojan proyectos de maestría y doctorado de instituciones educativas como la UNAM, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), entre otras.
"En la Ciudad de México las construcciones de más de 80 metros de se está pidiendo un análisis especial, pero en general se recomienda que cualquier edificación sea diseñada o supervisada por un experto. Ya los ingenieros deben estar actualizados, constantemente se dan cursos de actualización en bases a lo que hemos descubierto de forma continua. Es importante revisar el reglamento de construcción vigente de la Ciudad de México", acotó.
"Mucha gente piensa que sus casas antiguas son seguras porque aguantaron los sismos del 77, del 85 y del 2017 aunque no necesariamente, ya que las construcciones antiguas no tenían los nuevos descubrimientos, fueron construidas bajo otro reglamentos", añadió.
Los recientes temblores en la Ciudad de México y el antiguo lago
En la ciudad de México en lo que va del año se han detectado varios sismos de magnitud perceptible que tienen su origen aquí, principalmente en delegaciones como Miguel Hidalgo, Venustiano Carranza, Tlalpan y Xochimilco; sin embargo el ingeniero considera que los temblores no se magnifican ni ocurren porque haya sido un lago.
"Cuando han ocurrido es debido a fallas en las placas no en el terreno blando, los movimientos se originan en los estratos rocosos inferiores de varios centros de metros, no hay una correlación directa de que la Ciudad de México haya sido un lago por lo cual se provoquen los sismos. Hasta cierto punto los sismos son normales, la mayoría son imperceptibles", opinó el experto.
Hay un antes y después del sismo del 85
El sismo del 19 de septiembre de 1985 que dejó más de 3000 muertos vino a cambiar todo en México, tanto a nivel social para ver cómo estamos preparados para las tragedias y también en la parte de investigación y académica consideró el ingeniero Leonardo Flores.
"También nos vino a priorizar el estudio de ingenierías y por ende las reglas de construcción. Se ha ido aprendiendo no sólo del sismo de México sino de otros países, los estudiantes ya quieren estudiar esto, los gobiernos dan apoyos para investigación, aunque con el tiempo se va olvidando, es importante seguir investigando. Después del sismo del 2017 aún seguimos viendo cuáles son los causantes y cómo protegernos", dijo.
En investigador concluyó que es importante que revisemos constantemente nuestras viviendas, si tienen grietas de preocupación se puede acudir a la alcaldía más cercana con protección civil para que vaya a revisar los hogares y supervise si hay algún problema de vulnerabilidad. Si existen grietas o hundimientos es importante actuar de inmediato y reforzar el área, siempre supervisado por un ingeniero.