El machismo y la violencia contra la mujer son temas que le preocupan al peruano Gustavo Rodríguez, mismos que plasma en su novela Madrugada, ya que son "de los dos más grandes problemas sociales que tiene mi país".
"Si Madrugada fuera un tratado de física, seguramente se llamaría resiliencia". Esta respuesta ha sido dicha por el autor en muchas de las entrevistas que ha ofrecido a medios, pero lo que quiere decir, es esa capacidad que tienen los seres humanos para adaptarse en situaciones adversas.
Razón por la cual, el personaje de Trinidad Ríos incorpora todas las "estrategias de supervivencia que las mujeres desafortunadamente tienen en Perú", siendo esta una de las preocupaciones del autor hacia las mujeres no solo de Lima, sino también de América Latina.
En su personaje de Trinidad muestra esos "aspectos, artilugios y técnicas de supervivencia" que ella elige para poder mantenerse en el mundo. Siendo esto una lucha constante de lo que pasa en Perú. Motivo por el cual Gustavo no se planteó esta problemática, sino más bien ya era algo que observaba al día y le preocupaba.
"Lo único que yo he hecho es poner al servicio de la ficción cosas reales que me rodean. Es lo que hacemos todos los escritores que fantaseamos", expresó.
Gustavo, quien es serio y directo al contestar, se describió con Infobae, como un escritor auto testimonial en el cual confesó su gusto por inventar personajes a las que puede dar vida y voz.
"Yo disfruto mucho inventando personajes que no existen y el mayor placer que encuentro como escritor a la larga es descubrir a dos personas que hablan, qué discuten sobre un personaje que inventado como si fuera real".
La novela también ahonda en el machismo, en la violencia y aunque el escritor declaró que lo más complicado fue "tratar de que no se notara que eran temas importantes".
También habló sobre aquellos escritores cuyos temas nacen de la nada y no a quienes lo planean. "Yo desconfío de los escritores que cuando se sientan a escribir dicen ´hoy voy a tocar este gran tema qué es importante para nuestra sociedad´".
"Desconfío de esa aproximación a la literatura por qué, digamos, la literatura no debe dejarte respuestas, debe dejarte preguntas y una estrategia que elegí para que estos temas tan crueles y sórdidos, que trata Madrugada, pudieran ser digeribles en la unión de lectura y usar el humor como lubricante", expresó.
Por eso muchas de las expresiones usadas en el libro son importantes para la historia, porque muestran el comportamiento de un personaje, de una sociedad y del pensamiento que tienen.
De igual forma, esa "jerga" se relacionan con las canciones que el personaje Danny de los Ríos utiliza en el libro, editado por Penguin Random House, donde tomó un papel importante para Madrugada, siendo vital en distintas dimensiones.
"En una primera dimensión, sin mencionar canciones, la novela es musical porque decidí respetar totalmente las distintas maneras o formas que pueda haber en un Perú contemporáneo a nivel socio económico o de regiones".
Y para poder presentar a los personajes se tenía que "respetar esta forma de hablar, estos sonidos y estos acentos que constituye una música. También ayuda a definir a los protagonistas porque aquí en madrugada se definen por la manera en que hablan y a nivel musical a nivel ya de canciones es la parte más visible", expresó.
Un tema familiar que se convirtió en libro
Una de las problemáticas que hay en el libro va relacionado con que Trinidad y Danny tiene un parentesco, hecho que es importante para la trama del libro. Sin embargo, esta historia fue un caso verídico, de la cual el autor confesó a Infobae que salió gracias a su hermano.
"Mi hermano viene con la novedad de que se le apareció el llamado de una hija de 30 años sin que él sepa que exista. Mi imaginación empezó a pedalear, preguntándome ¿Qué podría hacer que una mujer busca a su padre después de 30 años? ¿Qué pasado pudo haber tenido? o ¿Que motivación pudo haber tenido? y es ahí en donde empieza a nacer Trinidad en mi cabeza".
El personaje de la vida real y la del libro son distintas, pero gracias a ese evento que tuvo en familia pudo pensar en "una enorme cantidad de mujeres que he conocido a lo largo de mi vida y en situaciones también de las que he sido testigo para que en Trinidad encuentre una nueva voz".
En cuanto al personaje de Danny de los Ríos, fue sincero y declaró que no fue difícil imaginárselo "porque yo tengo un hermano que es cantante", siendo una ayuda para crear este personaje "machista, bipolar, pero muy profesional a su vez".
"el haber escrito esta novela ha ayudado a querer más a mi familia, por qué escribir esta novela es por un lado es tratar de entender tu sociedad y por el otro lado es tratar de dar a mi familia y con esta novela he procesado ambos frentes", expresó.
Música en la narrativa
El grupo de los Bee Gees es la música que uno se imagina en el libro. El autor señaló que es el "soundtrack tan diverso" porque sirve para ser creíble la trayectoria de edad de Daniel de los Ríos, otro protagonista de Madrugada.
"Me gusta la ironía qué resulta: se habla de cosas muy violentas y muy terribles mientras la voz en falsete femenina de Barry Gibb suena", expresó para Infobae.
De igual forma Gustavo admitió que el lenguaje de la música no se le complicó tanto porque viene de una familia con "oído musical" que ha sido heredado ese radar "dentro de los tímpanos que disfruto mucho escuchando y haciendo".