La Ciudad de México tendrá poca agua durante los últimos cuatros meses del año. El Sistema Cutzamala, principal abastecedor de potable en la capital del país, ha disminuido un 20% la media de su almacenamiento, por lo que las autoridades decidieron reducir la distribución en lo que resta del 2019.
Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, informó de la situación este miércoles en su conferencia de prensa matutina. De acuerdo con la información proporcionada por la funcionaria, en su normalidad la Comisión Nacional del Agua (Conagua) bombea 10 metros cúbicos por segundo provenientes desde el Sistema Cutzamala a la capital y 6.5 al Estado de México.
En los últimos días las sequías en el país han afectado los causales que abastecen al río Cutzamala, haciendo que la media de la presa disminuya un 20 por ciento. Para mitigar la situación, la administración de Sheinbaum tomó la decisión de reducir la cantidad que destinan a la capital.
En la primera quincena de agosto la Conagua registró que más del 30% del territorio nacional enfrentó sequías de moderadas a excepcionales, un porcentaje mayor al de julio.
La Ciudad de México recibirá 9 metros cúbicos de agua por segundo. La medida se replicará en el Estado de México, donde pasarán de 6.5 a 5.5 metros cúbicos por segundo. Aproximadamente, 500,000 personas se verán afectadas, sobre todo quienes residen en las alcaldías Tlalpan e Iztapalapa, sin embargo, se planea poner en marcha un programa de abastecimiento por medio de pipas.
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Sheinbaum recordó que su gobierno está realizando diversas acciones para cuidar el agua, por ejemplo, están investigando las condiciones de la tubería para saber cuáles tramos se necesitan cambiar, conocer el estado de las fugas, el sistema de sectorización.
Rafael Díaz Leal Barrueta, secretario de Obras del Estado de México, informó que la dependencia a su cargo ha enfocado su trabajo en la atención inmediata de fugas, rehabilitación de pozos, crear estrategias para el uso de agua tratada y fomentar la cultura del cuidado del agua.
Esperan que para 2020 haya mejores condiciones de distribución de agua como consecuencia de la reparación de fugas que hay tanto en las tuberías como en las presas, así como el uso de fuentes alternas de abastecimiento, para ello trabajan las dos entidades en conjunto con la Conagua. }
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La Presa Madín, ubicada en Atizapán de Zaragoza, Estado de México, es una de las que se tienen contempladas para llevar agua a la capital.
Blanca Jiménez, directora general de Conagua, dijo que están trabajando con el Instituto de Ingeniería en la elaboración de un un protocolo para medir con más precisión el volumen del agua que hay que enviar al Valle de México con base en la cantidad de almacenamiento de la presa.
La disminución de un metro cúbico por segundo comenzará a implementarse a partir de la próxima semana. Sheinbaum pidió utilizar se manera racional el recurso, por ejemplo, evitar el riego de jardines y el lavado de autos con agua potable.