La madrugada de este viernes, presuntos sicarios de Cártel del Noroeste atacaron el Hotel Santa Teresa, en Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde se hospedaban elementos de la Policía Estatal. El resultado del ataque fue un oficial abatido y dos heridos.
El inmueble, ubicado en la avenida Reforma, servía como base de los uniformados, por lo que se presume se trató de un ataque premeditado contra los oficiales.
Sobre los hechos, el gobernador de la entidad, Francisco Cabeza de Vaca, dijo condenó el homicidio contra el policía Raúl "N", y reiteró su compromiso de devolverle la seguridad a los tamaulipecos.
"En una cobarde embosacada en NLD, perdió la vida el policía estatal Raúl "N" y resultaron heridos otros valientes tamaulipecos. Este desenlace pudo haberse evitado. La federación debe comprometerse con la seguridad. Es su responsabilidad. Mis condolencia a familia y compañeros", publicó el funcionario en su cuenta de Twitter.
De manera extra oficial se dijo que el brazo armado del CDN, conocido como "La Tropa de la Muerte", al mando de Juan Gerardo Treviño, alias "El Huevo", fue el responsable del ataque armado contra los oficiales.
Durante la embestida fueron dañados los vehículos de la Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas y la fachada del hotel.
Los hechos se dan 48 horas después del enfrentamiento armado en Nuevo Laredo, Tamaulipas,en el cual resultaron heridos al menos tres policías.
La emboscada ocurrió el pasado 21 de agosto, a las 16:00 horas, mientras elementos de la Policía Estatal instalaban un filtro en la carretera que va de Nuevo Laredo a Piedras Negras, Coahuila.
Según el medio local El Mañana de Tamaulipas, los elementos de seguridad fueron atacados por civiles armados que dispararon a quemarropa contra ellos.
Mientras los uniformados heridos, dos hombres y una mujer, eran trasladado al hospital,ocurrió una nueva agresión por parte de civiles armados donde otro policía fue lesionado.
Después de las agresiones armadas, policías estatales, con apoyo de otras corporaciones de seguridad persiguieron a los hombres armados a bordo de camionetas, en las inmediaciones de la colonia Francisco Villa, cerca del Aeropuerto Internacional de Nuevo Laredo, Los agresores huyeron y a las 17:30 horas la situación estaba bajo control.
Según el testimonio de los policías, los civiles armados viajaban en dos camionetas que traían la leyenda: "Cártel del Noroeste. Tropa del Infierno".
El ascenso del Cártel del Noroeste
Aunque su nombre comenzó a sonar más en los últimos años, el surgimiento del Cártel del Noroeste se remonta a la década de los ochenta y noventa.
A finales de los noventa algunos de los capos empezaron a reclutar exmilitares y antiguos policías federales para contratarlos como sus guardaespaldas.
La razón era que si llegaban a ser detenidos por las autoridades, recibían una pena menor si únicamente les encontraban droga, en lugar de armas. Los guardaespaldas eran los únicos que estaban armados, por lo que a los capos, no los podían acusar de portación de armas.
Osiel Cárdenas Guillen, antiguo líder del Cártel del Golfo que en 2010 recibió una sentencia de 25 años de prisión, fue uno de los principales narcos que comenzaron a reclutar guardaespaldas militares, quienes más tarde serían nombrados como “Los Zetas“.
A partir de ahí, dicha célula delictiva cobró un nuevo significado. Según el gobierno federal le quitó terreno al Cártel de Sinaloa, liderado por Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Como toda célula delictiva, algunos de sus miembros fueron encarcelados por el tráfico de drogas. Éstos personajes son importantes ya que al salir de prisión, fundan dos nuevos grupos criminales: Los Zetas Vieja Escuela y el Cártel del Noroeste.
Este último grupo instaló su base de operaciones en la Ciudad de Nuevo Laredo, aunque también tienen presencia en otros estados como Veracruz, Tamaulipas (Ciudad Victoria), Nuevo León (Monterrey) y Zacatecas.
Su habilidad para hacerse pasar como marinos o policías federales ha sido un punto a favor de los sicarios, pues han podido “cazar” más fácilmente a sus grupos rivales. Además, evitan ser identificados por el gobierno.