México alista cuatro buques para combatir el sargazo en sus playas. Con una inversión de 30 millones de pesos, la Secretaría de Marina (Semar) avanza conforme a lo previsto en la construcción de los primeros barcos recolectores de esta macroalga.
Los buques son ensamblados en el Astillero número 3 de la Secretaría de Marina, ubicado en el puerto veracruzano de Coatzacoalcos y a cargo de la Dirección General de Construcciones Navales de la Semar.
De acuerdo con la dependencia, la primera embarcación estaría lista en octubre próximo y el resto en los tres meses posteriores, para después ser enviados a las costas de Quintana Roo, una de las zonas más afectadas por la macroalga.
Cada buque será tripulado por cuatro marinos y podrá extraer hasta 80 toneladas diarias de esta alga, para un total de 320 entre los cuatro.
"Estos barcos son parte fundamental de la estrategia del gobierno mexicano para contención del fenómeno atípico del sargazo y sus características los hace ideales para la navegación en el caribe mexicano", expuso el director de dicho astillero, Jorge Daniel Zamora.
Daniel Zamora destacó que la construcción de las cuatro naves son hechas 100% con "manos mexicanas y calidad reconocida y certificada internacionalmente", además de que contribuyen a la capacitación para la mano de obra local y al desarrollo económico de la región.
La construcción de los cuatro buques está a cargo de 24 elementos bajo la Dirección General de Construcciones Navales de la Semar y su equipamiento consta de una grúa de cinco toneladas, tres bandas transportadoras para sargazo, un sistema de recolección de sacos de 600 kilogramos cada uno y un sistema de lavado para evitar posible contaminación donde se depositará el sargazo.
Jorge Daniel Zamora explicó que actualmente la primera nave registra avance de 80% en su construcción y las otras tres de 40%, en tanto que cada buque recolector navegará a una profundidad de 40 a 80 centímetros, dependiendo del peso de la carga.
Se espera que tengan hasta cuatro recorridos por día, con una duración de dos horas cada uno y con capacidad de recoger 20 toneladas por viaje.
El sargazo no presenta lixiviados agresivos o dañinos para el medio ambiente terrestre, según las autoridades mexicanas, sin embargo, su excesiva presencia provoca el daño de ecosistemas y pone en peligro a cientos de especies.
Las pruebas que se efectuaron por parte del personal de la Marina para medir la contaminación fueron en aguas costeras y en aguas oceánicas, dando en ambos casos resultados satisfactorios.
Además, se mantiene una fase de prueba de boyas de deriva, un instrumento oceanográfico que ayuda "ubicar e identificar la trayectoria de las agregaciones de sargazo".
"Estas boyas cuentan con telemetría inteligente, lo que permite enviar su posición geográfica vía satélite gracias a sus componentes resistentes y fotoceldas, las cuales mantienen alimentado este instrumento con autonomía sustentable durante varios meses", explicó la Semar en un comunicado compartido hace una semana.
El sargazo es un alga que se origina en el Mar de los Sargazos, en el océano Atlántico, entre las costas de Estados Unidos y Europa.
LEE: La macroalga de la que se avisó desde hace 8 años y hoy es un "cinturón de sargazo"
Desde hace más de un lustro se desprendió una gran porción de este y se ubicó entre las costas de África y Brasil, desde donde las corrientes marinas lo trasladan hacia el Caribe.
En los últimos años las costas mexicanas se han visto especialmente afectadas por esta alga que amenaza el paradisíaco color turquesa del mar.
En términos económicos, hace algunos meses se reveló que los hoteles de Quintana Roo gastaron el año pasado alrededor de un millón de pesos (unos USD 52.089) al mes para retirar el sargazo de las playas.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, considera el fenómeno un "asunto menor", si bien ha anunciado medidas para amortiguar el impacto del sargazo en las costas mexicanas.
Entre las condiciones que pueden estar influyendo en la proliferación actual del sargazo se hallan la temperatura del mar, el incremento de la evaporación frente a la precipitación, así como la contaminación de las aguas.
LEE: "Es un desastre ecológico": la crisis del sargazo en México
Según la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), desde 2018 han aparecido muertos en las costas del Caribe mexicano ejemplares de 72 especies, principalmente peces pero también crustáceos y otros animales, a causa del sargazo.
La mortalidad estaría relacionada con la descomposición de las mencionadas algas, que generaría un deterioro de la calidad del agua que acabaría afectando a otros seres vivos.