La Unión Tepito está detrás de las extorsiones a los choferes de microbuses y camiones que se ubican en el paradero del Metro Potrero de la Ciudad de México, así lo revela una investigación conjunta entre la Policía y la Procuraduría capitalina.
Los choferes son extorsionados desde hace dos años por el cártel, el cual les pide mil pesos semanales como cobro de piso.
La fuente señala que el sábado pasado fue detenido uno de estos extorsionadores con un listado de unidades que ya habían cubierto la cuota diaria, que va de los 50 a los 150 pesos.
La hoja es la prueba principal de los que ocurre en el Centro de Transferencia Modal (CETRAM) del Metro Potrero, por lo que ya se integró a la indagatoria que encabeza la Agencia Central de Investigación.
En junio de 2017, integrantes de la Unión recibieron información detallada de quiénes eran los dueños, a través de un chofer que se había peleado con sus colegas.
Al parecer, este chofer cobró 5 mil pesos por la información, la cual abundaba sobre quiénes eran los que cobraban cuotas a los microbuseros antes de la llegada de La Unión, aunque los chantajes eran intermitentes y desorganizados.
Desde la irrupción de La Unión Tepito, se estableció que cada día debían hacer aportaciones a su cuota exigida semanal o de lo contrario eran intimidados, golpeados o amenazados de muerte.
Pese a que la Procuraduría detuvo a tres sujetos identificados como José Yair E., de 24 años de edad; Kevin Brandon G., de 19 y Juan de dios V., de 23, a quienes se les incautó un arma de fuego Glock y una pistola réplica, además de 1.500 pesos que le quitaron a un chofer tras una golpiza, los afectados no han querido presentar una denuncia.
"Están muy renuentes, no quieren denunciar", admitió un alto funcionario de la dependencia que tiene conocimiento de las diligencias.
Otros casos
A finales del pasado mes de julio, pasajeros del transporte público en el Estado de México y en la alcaldía Gustavo A. Madero en la Ciudad de México vivieron momentos de terror luego de que dos unidades fueran incendiadas.
La madrugada del 31 de julio, un comando armado llegó al paradero del Mexibús Ojo de Agua, ubicado en Tecámac, Estado de México, bajó a los pasajeros y a los choferes de dos combis, las roció de gasolina y, sin más, les prendió fuego.
De acuerdo con testigos, los sujetos llegaron a bordo de una camioneta gris y amenazó a los presentes con armas, antes de incendiar las unidades del transporte público.
Los reportes señalan que ambas combis de la ruta Las Brujas, fueron quemadas por un grupo de aproximadamente, ocho hombres.
Por otra parte, un grupo de hombres incendió una combi del transporte público, que se presume, fue robada de la ruta La Raza- Zumpango.
Versiones extraoficiales informaron que dos hombres llegaron a la calle Isaac Albéniz, en la colonia Guadalupe Victoria en la alcaldía Gustavo A. Madero, bajaron de la unidad y le prendieron fuego para después escapar en otro vehículo.
Las llamas se propagaron hasta otro vehículo que se encontraba estacionado en el lugar, por lo que bomberos llegaron a la zona, en donde permanecieron cerca de 50 minutos hasta apagar el fuego.
No se reportaron personas lesionadas en ambos casos
Transportistas protestan por inseguridad en el Estado de México
Apenas el pasado 26 de julio, decenas de choferes agrupados en la Alianza de Autotransportistas México-Zumpango, bloquearon la autopista México Pachuca y el Circuito Exterior Mexiquense, en protesta por la muerte de dos de sus compañeros, derivado de la inseguridad que viven todos los días en las calles del territorio mexiquense.
Recordaron que un día anterior, fueron quemadas dos camionetas de la línea transportista San Juan Zitlaltepec mejor conocidos como Las Brujas, en el municipio de Tecámac en la zona de Ozumbilla y el viernes fueron encontrados los cuerpos de Jesús García Nava y Marcos García Vidal, dos operadores del transporte público.
Sus cuerpos fueron encontrados atados, vendados de los ojos, mutilados y severamente torturados en el interior de un auto Tsuru abandonado en un predio baldío cercano a la entrada del fraccionamiento Nuevos Paseos de San Juan, en el municipio de Zumpango.
Tras el hallazgo, los transportistas tomaron las casetas de ambas vías de comunicación para exigir la intervención del gobierno federal, ya que la administración de Alfredo del Mazo en el Estado de México, no han actuado en consecuencia.
"Ya no más sangre al volante", "AMLO nos están matando" decían algunas de las pancartas mostradas por los transportistas.
Denunciaron que al menos 16 unidades de la ruta San Juan Zitlaltepec mejor conocidos como Las Brujas han sido incendiadas, y que ahora, con la ejecución de sus compañeros, la situación llegó a niveles de terror.
"Tenemos miedo, mucho miedo, porque los ataques contra las unidades han venido sucediendo de manera frecuente y los asesinatos de nuestros compañeros también, por eso nos estamos manifestando nuevamente, porque a miedo se suma la inacción de las autoridades y la sospecha fundada de que hay extorsionadores infiltrados en las corporaciones policiacas", aseguraron.
Desde marzo pasado, los transportistas denunciaron ante los medios de comunicación, que son presas de las extorsiones de grupos del crimen organizado, pero las autoridades mexiquenses no han actuado en consecuencia.
Y aunque se han reunido con funcionarios de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, de la Secretaría de Seguridad mexiquense, así como de los ayuntamientos por donde cruzan las unidades del transporte público, la situación de violencia en su contra no se ha detenido.