El Gobierno de México descartó concentraciones de contaminantes más altas de lo normal en el sargazo que llega a las costas del Caribe mexicano, informó este lunes la Secretaría de Marina.
Luego de que personal de la Secretaría de Marina (Semar) realizara pruebas a algunas muestras de agua en las costas del estado de Quintana Roo, determinaron que "el sargazo no es contaminante", según un boletín emitido por el organismo.
Para determinar esto se establecieron ocho estaciones de muestreo de temperatura, pH, OD, salinidad y sólidos disueltos totales.
Se recolectaron muestras para determinar bacterias enterococos y coliformes fecales, así como nutrientes (nitratos, nitritos ortofosfatos y amonio) y demanda bioquímica de oxígeno.
"Los resultados de análisis de laboratorio indican que no tiene arsénico ni metales pesados y el azufre está dentro de las normas nacionales e internacionales", apuntó el Gobierno mexicano.
Asimismo, agregó que los reportes sanitarios indican cero casos de afectación a la salud humana.
El sargazo no presenta lixiviados agresivos o dañinos para el medio ambiente terrestre, aseveraron.
Al ver su inocuidad, el Gobierno aseguró que ya trabaja en la "realización de experimentos de secado de sargazo para determinar si es factible su aprovechamiento e industrialización".
Las pruebas que se efectuaron para medir la contaminación fueron en aguas costeras y en aguas oceánicas, dando en ambos casos resultados satisfactorios.
Además, se mantiene una fase de prueba de las boyas de deriva, un instrumento oceanográfico que ayuda "ubicar e identificar la trayectoria de las agregaciones de sargazo".
"Estas boyas cuentan con telemetría inteligente, lo que permite enviar su posición geográfica vía satélite gracias a sus componentes resistentes y fotoceldas, las cuales mantienen alimentado este instrumento con autonomía sustentable durante varios meses", explicó el comunicado.
Estas boyas acompañarán en su trayectoria las agregaciones de sargazo a fin de determinar el comportamiento en las corrientes marinas en el área del Caribe a futuro cuando se presenten este fenómeno.
El sargazo es un alga que se origina en el Mar de los Sargazos, en el océano Atlántico, entre las costas de Estados Unidos y Europa.
Desde hace más de un lustro se desprendió una gran porción de este y se ubicó entre las costas de África y Brasil, desde donde las corrientes marinas lo trasladan hacia el Caribe.
En los últimos años las costas mexicanas se han visto especialmente afectadas por esta alga que amenaza el paradisíaco color turquesa del mar.
En términos económicos, hace algunos meses se reveló que los hoteles de Quintana Roo gastaron el año pasado alrededor de un millón de pesos (unos 52.089 dólares) al mes para retirar el sargazo de las playas.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, considera el fenómeno un "asunto menor", si bien ha anunciado medidas para amortiguar el impacto del sargazo en las costas mexicanas.
Entre las condiciones que pueden estar influyendo en la proliferación actual del sargazo se hallan la temperatura del mar, el incremento de la evaporación frente a la precipitación, así como la contaminación de las aguas.
Según la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), desde 2018 han aparecido muertos en las costas del Caribe mexicano ejemplares de 72 especies, principalmente peces, pero también crustáceos y otros animales, a causa del sargazo.
La mortalidad estaría relacionada con la descomposición de las mencionadas algas, que generaría un deterioro de la calidad del agua que acabaría afectando a otros seres vivos.
Con información de EFEUSA