Desaparecer el Seguro Popular, tal como lo ha anunciado el presidente Andrés Manuel López Obrador, es un grave error, así lo advirtieron ex secretarios de la Secretaría de Salud (SSA) mediante una carta.
La misiva, publicada en redes sociales, fue firmada por los doctores Guillermo Soberón Acevedo, Julio Frenk Mora, José Ángel Córdova Villalobos, Salomon Chertorivski Woldenbeg, Mercedes Juan López y José Narro Robles, quienes criticaron la propuesta del gobierno federal de centralizar los servicios de salud.
Es por eso que exigieron una mesa de diálogo con la finalidad de "mejorar la propuesta de reforma y evitar errores que resulten en una regresión".
Aseguraron que el tema de la salud "no admite precipitación e improvisación", sino un "análisis cuidadoso de la continuidad y la coherencia".
Los firmantes se expresaron en contra de la desaparición de la Comisión Nacional de Protección Social de Salud y del Seguro Popular, iniciativa presentada por el coordinador de los Diputados de Morena, Mario Delgado.
"Ese error anularía uno de los avances institucionales más importantes del sistema de salud mexicano en este siglo", advirtieron.
"El Seguro Popular ha atendido en los más recientes seis años 308 mil casos de enfermedades muy severas, que pudieron arruinar el patrimonio de 308 mil familias pobres de México", destacaron.
"Este es el sentido profundo del Seguro Popular: evitar el empobrecimiento de las familias ante la eventualidad de una enfermedad muy grave, como el cáncer o el VIH/SIDA", afirmaron.
Los ex funcionario destacaron que el Seguro Popular "no es obra de ningún viraje repentino, de un gran cambio, sino de políticas de Estado por encima de prejuicios ideológicos o agendas partidistas".
Entre las virtudes del Seguro Popular, destacaron, está el aumento de la proporción camas/pacientes, reducción en mortalidad infantil, control de enfermedades y un esquema robusto de vacunación.
Los ex funcionarios cuestionaron que se busque regularizar a 80 mil médicos mediante la destrucción de la "base que soporta y financia la atención a las enfermedades catastróficas que se presentan en la población no derechohabiente de la seguridad social".
Finalmente, solicitaron a los diputados, senadores y al Gobierno federal mantener el entendimiento, el diálogo y la razón.
En reiteradas ocasiones, López Obrador ha criticado al Seguro Popular, al considerar que no ha atendido las problemáticas de salud de la población mexicana; incluso ha señalado que será sustituido por el Instituto de Salud para el Bienestar, dejando a los estados fuera de todo manejo importante en ese rubro.
Y es que el gobierno de la Cuarta Transformación asegura que buena parte de los estados corrompieron el esquema y usaron el dinero de salud para otros fines, sobre todo, políticos, o incluso comprando aparatos médicos o medicinas con sobreprecio.
De esta manera, finalizaría la descentralización de los servicios de salud, el cual inició con el secretario Guillermo Soberón Acevedo, durante la administración de Miguel de la Madrid y la cual continuó hasta el sexenio pasado, de Enrique Peña Nieto.
El Seguro Popular fue creado en el sexenio de Vicente Fox con la finalidad de que la población que no tenía seguridad social (IMSS o ISSSTE) tuviera acceso a los servicios de salud, en su mayor parte, la población más pobre del país.
La crisis del Sector Salud en el gobierno de la Cuarta Transformación
La falta de recursos económicos, derivado de la austeridad republicana de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, ha afectado gravemente al Sector Salud.
Desde el inicio del gobierno de la Cuarta Transformación, ese sector alzó la voz para denunciar lo que ahora, se está convirtiendo en una grave crisis.
Primero, los médicos residentes revelaron mediante una serie de protestas a lo largo y ancho del país, que no estaban recibiendo sus pagos; luego vino la acusación de los directores de hospitales que aseguraban que el recorte de recursos ponía en riesgo la atención médica y siguió la crisis por la falta de medicamentos.
La situación se profundizó tras la renuncia de Germán Martínez a la dirección del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), quién en su carta de dimisión, acusó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de una "injerencia perniciosa" en la operación del Instituto, lo que dijo, pone en riesgo la prestación de sus servicios de salud.
Las protestas de los médicos residentes
Los primeros días de abril de 2019, médicos residentes de al menos 68 hospitales en 24 estados de la República suspendieron sus labores y entraron en Asamblea Académica Permanente, para exigir el pago atrasado correspondiente a tres quincenas, así como el de su bono sexenal.
Sin embargo, aclararon que algunos trabajarían bajo protesta con la intención de no descuidar la atención en los servicios de urgencias y áreas críticas de los hospitales.
La noche del 18 de abril, la Asamblea Nacional de Médicos Residentes (ANMR) informó que levantaban todas sus acciones de protesta, tras confirmar que 95.7 por ciento de los galenos afectados por la falta de pago de sus becas o del reembolso de su bono sexenal habían recibido los pagos correspondientes de la Secretaría de Salud (Ssa).
Directores de hospitales públicos rechazan los recortes
Al mes siguiente, en mayo, once directores de los Hospitales de Especialidades del sector salud como Cancerología y Neurología, denunciaron el recorte de 2 mil 300 millones de pesos que sufrieron en conjunto y que ponían en riesgo los servicios a la población.
Días después, el presidente Andrés Manuel López Obrador descalificó lo dicho por los directores, al señalar que era posible que estuvieran mal informados sobre la situación económica de esos espacios, pues no existen recortes en el sector salud.
"Es posible que tengan falta de información (los directivos), por eso hoy se va a aclarar, sin ningún problema", aseguró.
"Habría que revisar, pero los institutos tienen recursos suficientes, les diría que son de los hospitales con más recursos, bien merecido, porque son institutos de excelencia, son institutos de dimensión mundial", dijo.
Los directivos tuvieron que reunirse con Diputados de la Comisión de Presupuesto, para expresar su inconformidad y solicitar una audiencia con el presidente López Obrador y el en ese entonces, Secretario de Hacienda, Carlos Urzúa.
Hacienda liberó recursos por lo que los hospitales sortearon el riesgo de quedarse sin recursos para lo que resta del año.
La crisis por la falta de medicamentos
Los recortes al sector salud afectaron gravemente el abasto de medicamentos, que a inicios de mayo, mantenía al borde de la crisis a 24 estados del país.
Todo derivó de la decisión tomada por el presidente Andrés Manuel López Obrador quien anunció que las cuatro principales empresas proveedoras de medicinas del país no podrán participar en las próximas licitaciones del sector porque podrían haber caído en actos de corrupción.
En consecuencia, se cancelaron las compras, no llegaron nuevas medicinas y se fue profundizando la escasez e, incluso, el desabasto, sobre todo de medicinas especializadas para tratar enfermedades como el VIH y el cáncer.
La situación derivó en varias protestas tanto de pacientes como de médicos.
La Oficial Mayor de la Secretaría de Hacienda, Raquel Buenrostro, garantizó el abasto de medicamentos y anunció que ahora el sistema de compras de medicamentos se hará en bloques y separado de la distribución.
Germán Martínez evidenció la crisis en el IMSS generada por los recortes
Pero lo que más levantó polémica fue la carta de renuncia de Germán Martínez, director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ya que evidenció que los recortes ordenados por la Secretaría de Hacienda, ponían en riesgo la atención y la operatividad en el Instituto.
En un largo documento, Martínez Cázares denunció que funcionarios de Hacienda tienen "una injerencia perniciosa" en la operación del instituto de seguridad social más importante del país.
"El Presidente del Gobierno de México proclamó el fin del neoliberalismo, pero en el IMSS algunas injerencias de Hacienda son de esencia neoliberal: ahorro y más ahorro, recortes de personal y más recortes de personal, y un rediseño institucional donde importa más el 'cargo' que el 'encargo'", dijo
"Ahorrar y controlar en exceso el gasto en salud es inhumano. Ese control llega a escatimar los recursos para los mexicanos más pobres", agregó.
Recordó que el IMSS redistribuye en sus servicios más de mil millones de pesos diarios. "En un mes puede gastar más que la UNAM en un año. Desde cuidados prenatales antes de nacer, hasta tratamientos paliativos antes de morir. Por eso, controlar en exceso esos recursos, que son de trabajadores y empresarios, sin racionalidad y sin apego a las normas del IMSS, puede acabar con esa dinámica de solidaridad social propia del Instituto".
Martínez dijo que el IMSS requiere una transformación, como ha ordenado el presidente Andrés Manuel López Obrador, pero que el eje de ésta deben ser las personas y no los funcionarios.
Las denuncias de Germán Martínez causaron un sin número de reacciones, sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador desestimó lo dicho por el ex panista, y aseguró que "afortunadamente hay muy buenos servidores públicos en el equipo y vamos a sustituirlo", lo cual ocurrió horas después al anunciar la llegada de Zoé Robledo al IMSS.