Cuatro artistas que estuvieron en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte, y ocho más que permanecen en reclusión, disfrutaron de una visita guiada por el Museo de Arte Moderno en la Ciudad de México.
Todos son integrantes del proyecto Kolëctiv.feat y es la primera vez que el grupo proveniente del centro de reclusión salió a un recorrido de este tipo.
Debido a que se alinea con el objetivo de la Secretaría de Cultura, de "no dejar a nadie atrás", también se unieron a la visita la titular de la dependencia, Alejandra Frausto Guerrero; la directora general de Vinculación Cultural, Esther Hernández, y Lulú Sánchez Puig, fundadora de Kolëctiv.feat.
Tuvieron una visita guiada por la exposición Territorios de la memoria. 1985-2019, con 90 obras de 59 artistas.
En su oportunidad, la secretaria Alejandra Frausto Guerrero, reconoció el esfuerzo de Kolëctiv.feat y el trabajo con Cultura Comunitaria. Afirmó que la creación, la cultura y el arte son una búsqueda de la libertad creativa, la cual no puede ser encerrada.
"Existe talento en todas partes, simplemente hay que dar los causes para que el arte florezca y se tenga un camino y un lugar hacia donde ir, nadie se puede quedar atrás en la cultura y ustedes son la prueba de ello", dijo Frausto Guerrero.
A su vez, Lulú S. Puig, artista plástica y fundadora de Kolëctiv.feat, explicó que se tiene el objetivo de impulsar la constante creación épica, expresionista, simbólica y colectiva del arte, para generar una reflexión sobre la libertad y la empatía como catalizadores de procesos de transformación en artistas privados de su libertad.
Durante el recorrido, que duró cerca de una hora, los artistas asistentes se mostraron animados con las piezas que conocieron y tuvieron contacto con los demás asistentes, con quienes compartieron su opinión de algunas obras sin ningún tipo de limitación y con total libertad de expresión. Fueron custodiados por elementos de seguridad del penal.
"Nosotros hemos perdido la libertad, pero tenemos toda la libertad de hacer lo que queramos con el arte, vaciar nuestras emociones, sacar nuestros sentimientos, para hacerlos gritar", expresó Claudio, miembro del colectivo.
Esta iniciativa, que se enmarca en el eje de Comunidades creativas y transformación social, del programa Cultura Comunitaria, tiene el objetivo de promover los derechos culturales de las personas privadas de su libertad.
Es parte de la estrategia de trabajo que busca garantizar el acceso a la cultura de manera igualitaria para todas las personas, priorizando a los grupos históricamente excluidos, en línea con los ejes de trabajo de la Secretaría de Cultura, para no dejar a nadie atrás.
Los artistas del Reclusorio Preventivo Varonil Norte pudieron disfrutar del arte de David Alfaro Siqueiros, Demián Flores, Alejandro Pintado y Gustavo Aceves, entre otros.
"Me llevo una experiencia que nunca se me va a olvidar, vi muchas obras contemporáneas, vi mucho material; lo que a mí me agrada, obras hechas con materiales reciclados, materiales tan simples con los que se pueden hacer obras de arte", dijo a la agencia estatal Notimex Josh, un hombre que tiene seis años en la cárcel.
Los artistas miembros de esta iniciativa podrán desarrollarse como talleristas de artes visuales en otros centros penitenciarios, pues se trata de un colectivo con capacidades y habilidades desarrolladas.
A este proyecto se sumará la conformación de un espacio, que además de alojar los talleres de artes visuales, también en este se podrán vender las obras que se generen dentro y fuera de prisión, como medida para combatir el estigma y la discriminación de la sociedad con las personas que estuvieron privadas de la libertad, de manera que tengan un respaldo y fuente de ingresos económicos.
Lulí Sánchez Puig, miembro fundador de Kolëctiv.feat, dio a conocer que pronto se abrirá Casa de Medio Camino, donde los ex reclusos podrán vivir unos dos años. Se espera que se establezca en lo que sería el nuevo Centro Cultural Chapultepec.