La activista y analista Ophelia Pastrana vivió un episodio de discriminación en una sucursal de la cadena de café Starbucks.
A través de sus redes sociales, la conferencista señaló que el barista de la cafetería no respetó su identidad de género y decidió tratarlo como si fuera un hombre aún cuando ella solicitó lo contrario.
El altercado ocurrió cuando Pastrana pidió su bebida. De acuerdo con lo narrado, al momento de pedirle su nombre, contestó "Ophelia", a lo que el trabajador del Starbucks dijo "gracias, señor".
Aunque lo corrigió, el dependiente se refirió a ella en masculino en dos ocasiones más y finalmente, cuando recibió su bebida, el vaso tenía la inscripción de "Ofelio".
Pastrana recalcó que durante el intercambio de palabras, intentó explicarle al trabajador que al ser una mujer transgénero, deseaba que se refirieran a ella con pronombres femeninos. Sin embargo, el desenlace no fue el deseado.
La también economista ironizó sobre la situación, y en otro mensaje dijo que le daba "puntos de creatividad al barista, por permitir en su cabeza la existencia de un señor cuyo nombre sea 'Ofelio'". Y añadió que son los mismos puntos que le resta el hecho de haber escrito su nombre cuando tenía su tarjeta de crédito en la mano y lo único que debía hacer era leer el nombre en ella.
En un tercer tuit, Pastrana compartió una fotografía de su atuendo en ese día y dijo "Detegan todo, ¡ya sé por qué pasó!, es porque hoy traigo un gallito y estoy mal peinada. Eso es de vatos (hombres)".
Tras la denuncia en redes, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación en la Ciudad de México (Copred) le recordó a Ophelia las distintas vías por las que podía denunciar el acto de discriminación.
Hasta el momento la empresa no se ha pronunciado sobre el episodio ocurrido con su trabajador.
Este es el segundo acto de discriminación que Ophelia Pastrana sufre por parte de alguna empresa en menos de un mes. El 22 de julio, reportó que empleados de Citibanamex le negaron el servicio por ser transgénero.
"Citibanamex me gustaría reportar un caso de discriminación. Me acaban de negar abrir una cuenta en una sucursal porque "el sistema no deja si eres trans", escribió en Twitter.
Indicó además que los empleados se refirieron a ella con pronombres masculinos a pesar de haber mostrado documentos de identidad que la acreditan como mujer. Por ello, señaló la falta de congruencia del banco, ya que se promociona como una entidad financiera que aboga por la diversidad sexual pero no sensibiliza a sus empleados en el tema.
Aunque finalmente logró abrir su cuenta en otra sucursal, puso una queja ante el Copred. El hecho ocurrió en una sucursal de la Colonia Del Valle, en la Ciudad de México.
Discriminación contra la comunidad LGBTTTI
La comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti e Intersexual (LGBTTTI) ha sido atacada y transgredida a lo largo de la historia en México, un país en donde la discriminación ha sido normalizada a tal grado, que más de la mitad de las personas pertenecientes a esta comunidad han pensando en el suicidio.
Ante este contexto social de hostilidad y discriminación más del 50% de las personas LGBTTTI confesaron haber tenido algún pensamiento suicida en algún momento de sus vidas y una de cada cinco lo ha intentado alguna vez, así lo reveló la Encuesta sobre Discriminación por Motivos de Orientación Sexual e Identidad de Género 2018.
Esta encuesta la realizó el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, misma que también reveló que los hombres y las mujeres trans son los más afectados por esta situación. Se detalló que por temor a sufrir discriminación, 76.6% de los miembros de la comunidad LGBTTTI, evitan expresiones de afecto a su pareja en público y un porcentaje similar no demuestra de manera libre su orientación sexual.
Las personas con una identidad de género no normativa reportan con mayor frecuencia sufrir situaciones de discriminación durante la atención médica, de ellos, 48% son mujeres u hombres trans.
También el 83% de los encuestados señalaron que enfrentan contextos hostiles que se manifiestan a través de chistes ofensivos, expresiones o creencias populares que ridiculizan y mofan, y 53.8% han sufrido expresiones de odio, agresiones físicas y acoso.