El taxista gotero: así operaba el hombre que presuntamente asesinó a Pablo González Kúsulas

Ambos hombres relacionados con este caso tienen un paso criminal amplio y están relacionados con la compra-venta de narcóticos

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Los probables asesinos fueron capturados el 4 y 15 de julio en las alcaldías Álvaro Obregón y Gustavo A. Madero (Foto: Twitter @C4Jimenez)
Los probables asesinos fueron capturados el 4 y 15 de julio en las alcaldías Álvaro Obregón y Gustavo A. Madero (Foto: Twitter @C4Jimenez)

Felipe N y José Manuel N fueron detenidos esta semana por asesinar a Pablo González Kúsulas con gotas oftálmicas y abandonar su cadáver en la colonia Nápoles, pero ambos tienen un historial criminal amplio, por lo que las autoridades de la Ciudad de México siguieron su rastro hasta que los capturaron.

José Manuel N fue el cómplice del asesinato. Llegó de Hidalgo el mismo día que el taxista identificado como Felipe N abandonó en la alcaldía Benito Juárez el cuerpo del joven egresado de la Universidad de California, Berkeley.

El columnista de El Universal, Héctor de Mauleón, detalló el pasado criminal de ambos hombres. Las autoridades conocieron el rostro de José Manuel N porque las cámaras de cajeros automáticos y comercios lo ubicaron en la capital del país; él  intentó hacer diversas compras con las tarjetas de Pablo con un valor de entre 5 mil y 55 mil pesos en un Oxxo ubicado en la colonia Condesa, una farmacia y en un WalMart y Bodega Aurrerá en la colonia Guerrero.

Los movimientos bancarios fueron hechos entre 07:12 y las 10:32 horas aunque sólo se completaron dos transacciones de 300 pesos cada una. Este sujeto abordó en ambos centros comerciales el taxi donde murió Pablo González Kúsulas.

Pablo Kúsulas (Foto: Facebook)
Pablo Kúsulas (Foto: Facebook)

En las investigaciones, las autoridades encontraron que ya había sido ingresado en varias ocasiones a diversos centros penitenciarios por robo a repartidor, robo de vehículos con violencia y falsificación de documentos.

Fue detenido en la alcaldía Gustavo A. Madero y podría estar relacionado con la venta de drogas, pues igualmente se le encontraron envoltorios de estupefacientes, dinero, tarjetas de crédito, y celulares.

Felipe N, el taxista que dio las gotas oftálmicas al joven abogado, también fue señalado por delitos que cometió meses atrás. Mauleón sostiene que fue detenido afuera de un banco cuando sacaba el dinero de uno de sus pasajeros en estado de ebriedad.

Según la Policía de Investigación, el taxista ya tenía una rutina establecida. Alrededor de las 12:00 horas recorría diario las calles de Polanco, la Roma y Condesa en busca de clientes que salían de los bares. Las autoridades señalaron que "cazaba pasajeros en estado de ebriedad" que le permitieran robarlos.

La Procuraduría anunció que capturaron a los probables responsables del asesinato de Pablo González Kúsulas (Foto: Facebook)
La Procuraduría anunció que capturaron a los probables responsables del asesinato de Pablo González Kúsulas (Foto: Facebook)

En cuanto subían a su automóvil, Felipe N les ofrecía una botella de agua o cerveza adulteradas con las gotas oftálmicas para abandonarlos en las calles de la Ciudad de México donde recobraban el sentido "sin cartera, sin celular y sin recuerdos", sostiene Mauleón.

Las gotas de ojos contenían Ciclopentolato que también funciona como somnífero. Así, el conductor lograba dormir a sus víctimas para extraerles tarjetas de crédito, débito y celulares.

El sábado 14 de julio fue detenido en la alcaldía Álvaro Obregón. Se encontraba a bordo del mismo taxi en el que fue asesinado González Kúsulas.

Las autoridades hallaron en su vehículo algunos envoltorios de narcóticos, botellas de agua embotellada adulterada, frascos con gotas oftalmológicas, una gramera, un celular y una tarjeta SIM.

Pablo González Kúsulas fue asesinado con gotas para los ojos (Foto: Especial)
Pablo González Kúsulas fue asesinado con gotas para los ojos (Foto: Especial)

Los agentes del caso señalaron que durante la madrugada del 22 de junio arrojó el cadáver de Pablo González Kúsulas en calles de la colonia Nápoles en la alcaldía Benito Juárez, pero el joven murió dentro del automóvil porque, tal vez, su asesino puso más gotas oftálmicas en la bebida que le ofreció.

Pablo González, de 28 años, era un abogado que se acababa de graduar de la maestría en Estados Unidos. Trabajaba en el despacho Ritch, Mueller, Heather y Nicolau en la Ciudad de México y estaba a la espera de mudarse a Nueva York para laborar ahí.

Y fue gracias a los videos de las cámaras de vigilancia proporcionados por otros abogados, que las autoridades reconstruyeron las últimas horas con vida del abogado y egresado de la Universidad de California, Berkeley.
Pablo se reunió con unos amigos en un restaurante en Santa Fe. Ya de madrugada, a las 01:50, vio a una mujer en el Karaoke ubicado en la avenida de las Palmas, que abandonó junto con un amigo.

A las 03:58 de la madrugada, las cámaras lo volvieron a ubicar mientras caminaba solo hacia su casa; después abordó el auto donde murió. El taxista abandonó el cadáver tan sólo 49 minutos después en el cruce de Georgia y Nebraska .

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