Después del derrame de 3 mil litros de ácido sulfúrico de Mar de Cortés, provocado por una planta de la empresa minera Grupo México, el mercado ha castigado el valor de la empresa.
Del 11 de julio, día en que se reportó el derrame, a ayer lunes 15 de julio, la compañía mexicana propiedad de Germán Larrea perdió 17.438 millones de pesos, lo que representa 4.54% menos del valor que tenía antes del incidente en la Bolsa Mexicana de Valores.
La semana pasada el valor comercial total de la compañía era de 383.878 millones de pesos,y ahora se encuentra en 355.440 millones.
Sin embargo, pareciera que sólo las finanzas de la empresa Grupo México han resultado afectadas; compañía que opera en el país desde 1890 (antes con el nombre Asarco). Desde el inicios del presente siglo la minera ha acumulado 120 infracciones por problemas relacionados principalmente por el medio ambiente, según Grupo PODER.
Una de ellas fue el derrame de 40 mil litros de cobre acidulado en Río Sonora en 2014, que ha sido catalogada como la tragedia ambiental más grande del país. Después del desastre ecológico, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente determinó que Grupo México debería pagar 23.566.000 pesos como multa por la contaminación del arroyo.
También fue abierto un Fideicomiso de 2.000.000.000 de pesos para contrarrestar el deterioro que se hizo al ecosistema del lugar y reactivar la economía de las localidades aledañas afectadas. No obstante, desde su creación se reportó opacidad en su manejo. Como la entrega del dinero en efectivo a las manos de los habitantes del sector sin registros exhaustivos ni estrategias para reparar los daños de fondo.
En los compromisos que hizo la empresa para corregir su error, se encontraba construir 36 plantas potabilizadoras y un hospital, pero no se han iniciado obras, demandó el diputado local Carlos Navarrete, quien propuso quitar la concesión de Grupo México para operar en la entidad.
Igualmente en 2014 se definió una multa de 13.400.000 de pesos de parte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social por un accidente ocurrido en mina de Charcas en San Luis Potosí en la que fallecieron cinco mineros. Pero la empresa impugnó la sanción ante el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa.
Por la tragedia en Pasta de Conchos, en donde una explosión cobró la vida de 65 trabajadores de los cuáles sólo dos de los cuerpos pudieron ser recuperados, la compañía pagó 1.900.000.000 millones de pesos.
Sin embargo, no se le prohibió a Grupo México operar. Al contrario, se continuó con la aprobación de sus proyectos. Durante el gobierno de Enrique Peña Nieto la empresa edificó una presa de 1.700 millones de metros cúbicos de capacidad de líquido.
A pesar de los accidentes fatales y daños al medio ambiente, la compañía minera propiedad del segundo hombre más rico del país ha permanecido intacta. Sigue con operaciones de manera normal en el país.
Después del derrame de mar de cortés Andrés Manuel López Obrador dijo en una de sus conferencias de prensa matutinas que castigará a los responsables después de que el informe de daños ambientales ocasionados por el ácido sulfúrico estuviera terminado.
"Lo que puedo adelantarles es que ya no hay influyentismo, ya no existe influyentismo y se va a aplicar la ley sin consideraciones de ninguna índole. Si se cometen daños se tienen que reparar daños y se tiene que castigar a los responsables, pero quiero tener el informe, el reporte", declaró.
Mientras se lleva a cabo el análisis de la PROFEPA , el Congreso de Sonora inició trámites para declarar persona non grata al empresario Germán Larrea. De aprobarse la propuesta, el dueño de la minera sería rechazada en la entidad.