En redes sociales circula un video en donde se puede ver a varios jóvenes bailando y disparando armas de alto calibre. El clip revela la cruda realidad que parte de la infancia en México: están expuestos a la violencia armada.
Los niños que aparecen en el video habrían sido reclutados por el narcotráfico, específicamente para la banda de "Los Marucheros", que a su vez, forma parte de la estructura criminal del Cártel del Noreste, en el estado de Tamaulipas.
"Los Marucheros" son el rango más bajo en el mundo de narco, vigilan las carreteras e informan a los líderes sobre el movimiento que hay en ellas, a veces participan activamente y detienen a sus enemigos poniendo "ponchallantas" o incluso a balazos.
Se les comenzó a llamar con ese nombre, porque era frecuente que en las escenas de violencia relacionadas con el crimen organizado, era frecuente encontrar sopas instantáneas Maruchan.
La preocupación por los llamados "niños del narco" se multiplicó a partir de la llamada "Guerra contra el narco" que impulsó el expresidente mexicano Felipe Calderón.
Desde el 2006, cuando Calderón implementó como estrategia de seguridad nacional combatir de manera frontal a los cárteles del narcotráfico, diversos informes han alertado que niñas, niños y adolescentes representan uno de los grupos más vulnerables por diversas formas de violencia y violaciones a sus derechos humanos, así como por los grupos del crimen organizado.
En México la población infantil de 5 a 17 años asciende a 29,3 millones, de ellos 3,2 millones son explotados laboralmente y se estima que 460.000 han pasado a engrosar las filas de las organizaciones criminales.
En 2015, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) estimaba que 30.000 niños y niñas cooperaban con grupos criminales en diversas funciones. Para 2018, la cifra se calculaba en 460.000 menores reclutados por el narco en México, con base en cifras de Alfonso Durazo, actual secretario de Seguridad Pública del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador. De esta forma, se habría registrado un incremento del 153 %.
De acuerdo a la información de la CIDH, la cual se las proporcionó el Estado, las organizaciones criminales reclutan a niños a partir de los 10 y 11 años "para trabajar para traficantes, ya sea de productos ilícitos (drogas o armas) o de personas (burreros), como para realizar asaltos, agresiones y secuestros".
A cambio, los grupos delictivos les ofrecen dinero, ropa, alimento o medicinas, alertó la dirigente de una asociación civil en la ciudad de Guadalajara, la más importante del estado de Jalisco (oeste de México), que rescata a niños en situación de calle.
Un niño en Ecatepec – municipio violento del Estado de México – presume sus armas
"Los niños y jóvenes que buscan un trabajo son la presa preferida de las células delictivas", refirió la mujer, en condición de anonimato, al periódico local Reforma.
La Red por los Derechos de la Infancia (Redim), es una organización que trabaja en los impactos que tiene la violencia en la niñez mexicana, desde el 2011 alertaba que el Estado mexicano cada día ofrece menos oportunidades de desarrollo a niños, niñas y jóvenes, quienes además ahora son testigos y víctimas de una guerra declarada contra el crimen organizado.
"Aunque no se tiene la plena certeza, sobre el número de niños involucrados en actividades delictivas del crimen organizado, pues las autoridades no se han preocupado en elaborar estadísticas con cifras oficiales, se hablan de aproximadamente 30.000 niños y niñas que cooperan con los grupos criminales de varias formas y están involucrados en la comisión de 22 delitos diferentes", resalta la red.
Un informe de 2012 daba cuenta que a la mayoría de los menores detenidos por delincuencia organizada, se les vinculaba con el Cártel del Golfo y Los Zetas, y participaban en enfrentamientos con militares y policías en operativos contra el crimen organizado y el narcotráfico en varias entidades del país.
La CIDH alertó desde hace años que los niños y adolescentes "son utilizados y abusados" por las organizaciones criminales, pues los adultos los consideran "piezas prescindibles e intercambiables, el último eslabón de la cadena y por lo usual les encargan actividades de mayor riesgo para su integridad personal o de ser detenidos por la Policía".
La CIDH considera que el reclutamiento de menores de edad por el crimen organizado o las pandillas se da también a partir de la dependencia a alguna droga.
Un informe reciente, publicado por la Redim, revela que tres niñas, niños y adolescentes son asesinados a diario en México, debido a la crisis de violencia, que solo durante el 2018 dejó más de 33.000 víctimas fatales.
"Si tenemos a todos los jóvenes estudiando y trabajando, vamos a serenar a México. Así es como vamos a conseguir la paz y la tranquilidad (…) Nosotros vamos a atender a los jóvenes, si no se atiende al joven, imagínense, llegan a sonsacarlo, a engancharlo para que se rolen en las bandas de la delincuencia. Tenemos que quitarles a los jóvenes a las bandas", dijo López Obrador antes de echar a andar la estrategia de seguridad con la busca combatir la violencia en el país.