La Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) emitió seis recomendaciones que debe seguir la población, en caso que la zona del Valle de México rebase los 100 puntos del índice de calidad del aire para ozono y partículas PM10 y PM2.5.
Las medidas recomendadas son: evitar la exposición al aire libre de los grupos susceptibles; no fumar, especialmente en espacios cerrados; reducir el uso del vehículo particular, compartir el auto y utilizar el servicio de transporte público. Disminuir el uso de productos que contienen compuestos orgánicos volátiles (solventes), tales como pinturas en aerosol, pinturas base aceite, barnices, aromatizantes y limpiadores domésticos, entre otros.
Complementa las recomendaciones el reportar cualquier tipo de incendio de manera inmediata. revisar y reportar fugas de gas de manera inmediata, a los teléfonos:
Ciudad de México: Locatel: 56-58-11-11.
Estado de México: Centro de Atención Telefónica: 01-800-6969-696.
En caso de que se rebasen los 150 puntos de ozono o partículas PM2.5 o PM10, la Comisión Ambiental de la Megalópolis emitirá los comunicados para informar a la población sobre las medidas y recomendaciones para cuidar su salud, así como para reducir emisiones de contaminantes de los sectores de transporte, industria, comercio y servicios en la Zona Metropolitana del Valle de México.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), advierte que las concentraciones elevadas de ozono pueden tener efectos en la salud, afectando principalmente al aparato respiratorio al e irritando las mucosas, pudiendo llegar a producir afecciones pulmonares.
Los efectos dependen de distintos factores como la concentración de partículas en el medio ambiente, la ventilación y el tiempo de exposición. El ejercicio físico al aire libre es uno de los principales factores que influyen negativamente, ya que conlleva un aumento en la cantidad del ozono inhalado y una mayor penetración en los pulmones. Los niños, ancianos y quienes padecen enfermedades respiratorias son grupos con mayor riesgo.
Los niños, ancianos y quienes padecen enfermedades respiratorias son los grupos más vulnerables a los efectos.
La última vez que se activaron las partículas preventivas por ozono fue el 8 de julio, cuando se registró un valor máximo de 103 puntos del Índice de Calidad del Aire de ozono (98 ppb), en la estación Pedregal, en la alcaldía Álvaro Obregón, en la capital mexicana.
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La cifra superó el valor de la norma de protección de la salud para este contaminante (NOM-020-SSA1-2014) que es de 95 ppb (promedio horario), equivalente a los 100 puntos del Índice de Calidad de Aire. Lo anterior, debido al escaso transporte de humedad hacia el centro del país, lo que propició baja formación de nubosidad, radiación solar intensa durante algunas horas del día y viento débil, factores meteorológicos que favorecieron el estancamiento de los contaminantes y la formación de ozono.